el Exorcista ligero

el exorcista ligero #1

Capítulo 1: Parte 1
Rin estaba prácticamente dormido cuando subió al tren. El altavoz dijo en voz alta el nombre de la estación, que medio inconsciente había echado de menos, y su cabeza se sacudió con un sobresalto. En qué viejo pedo se había convertido, y solo a los veintiséis. día largo, horario diferido, viaje en tren aburrido de vuelta al apartamento. Al menos se había sentado. Arrancó después de que una anciana se bajara hace seis o siete paradas con una montaña de comestibles. Vivir tan lejos de la Academia apestaba.

bostezó, con los ojos llorosos, así que se los frotó, luego las puertas se abrieron, se abrieron y ella pisó: una mujer con ondas de largo cabello dorado en la espalda. Él parpadeó y ella tomó un lugar en el poste de la mano que estaba frente a él. lo sorprendió mirando y sonrió, por lo que apartó la mirada, un poco rosa, y cuando volvió la cabeza, se miró los zapatos. Un brillante par de ... ¿cómo llamaste eso? Tacones cortos? El tipo con la correa que pasa por encima. y mallas, ella también llevaba mallas, las de color rojo oscuro bajo una falda negra larga con pliegues en ella. Él le echó un vistazo a la cara. Era bonita, y definitivamente extranjera, con una bufanda tejida y un suéter, y se bamboleó ligeramente, agarrándose al poste cuando el tren comenzó a alejarse de la estación.

ella lo atrapó mirando otra vez y esta vez se sonrojó.

El tren cobró velocidad, corriendo por los túneles bajo Ciudad Academia, la luz ocasional parpadeando en las ventanas con líneas largas. Mucho que hacer cuando llegara a casa ... ¿Ya había regresado Yukio? Necesitaba alimentar a Kuro. solo quería dormir ... Había empezado a quedarse dormido otra vez cuando el tren se detuvo bruscamente y el impulso lo arrojó al bar a su lado y la dama rubia en su asiento vacío.

Flick: las luces del techo cambiaron por el naranja de emergencia. Él y la dama se miraron sorprendidos. estaba aplastada contra el duro plástico del asiento del tren. Alrededor de ellos, surgieron pequeñas conversaciones de alarma, los pasajeros comenzaron a enderezarse.

"¿Qué es?" ella preguntó.

"Alguien tomó el descanso de emergencia", dijo, y se levantó.

subió rápidamente al vagón del tren -estaba sentado en el segundo- y abrió la puerta, pasando con cuidado por el hueco y entró en el vagón delantero. La gente allí estaba igual de desordenada, algunos de ellos aún tendidos en el suelo. Fue a la puerta del operador y llamó.

"¿Que esta pasando?" preguntó a través del plexiglás.

El operador se puso en pie y abrió la puerta. Agarró los hombros de Rin. "¡Tú! Eres un exorcista, ¿verdad?" Sus ojos eran salvajes y escupió un poco mientras gritaba.

Rin ya no tenía muchas ganas de lidiar con locura hoy. "¿Sí, por qué?" se deslizó fuera del alcance del hombre y alisó los hombros de su uniforme.

El operador señaló con un dedo salvaje la ventana delantera del tren. "¡Mira!"

Allí, a la luz de los faros, de pie en medio de las vías, había una persona. pero no era una persona: los miembros colgaban flácidos en un ángulo antinatural, con la cabeza colgando.

"Un ghoul".

El operador dejó escapar un chillido. "¡Un demonio! ¡Un demonio!" las personas en la cabina del tren lo escucharon y entraron en pánico, poniéndose de pie y soltando gritos propios, empujándose unos a otros mientras trataban de llegar a la parte trasera del auto y la puerta por la que Rin había entrado. Se giró y miró por encima del hombro.

"¡Oye!"

Se detuvieron y miraron a Rin.

"Cálmese." Nadie se movió. Se volvió hacia el operador. "Llama al número de emergencia de los Caballeros de la Cruz Verdadera, pregunta por Yukio. Diles que Rin Okumura ya está aquí". El operador levantó el teléfono en el tablero de control y comenzó a marcar de inmediato. Rin comenzó a bajar la cabina del automóvil. "Evacúe al último automóvil. Atrape a la mayor cantidad posible de personas y no salgas del tren. ¿Lo entendiste?"

Había llegado a la puerta. Algunas personas lo saludaron con la cabeza, y él asintió con la cabeza, columpiándose sobre las vías. Solo era un ghoul, y solo había uno. probablemente no necesitaría a Yukio, pero es mejor que lo siento. Trabajó su camino alrededor del tren hasta que apareció en el frente. Cuando lo vio, el ghoul dejó de caminar.

Si no necesitara dibujar a Kurikara, no lo haría. Mientras menos atención atrajera, mejor. en la oscuridad del túnel del tren, sus llamas azules serían brillantes como el infierno, probablemente solo asustar a la gente más. Cuando se acercó al ghoul, sacó la espada en su vaina de su espalda.

"Está bien, feo. Terminemos con esto".

rin dio un paso, lista para atacar al ghoul y darle un buen golpe, incluso en su funda, Kurikara seguía siendo un arma efectiva, pero justo cuando su pie dejaba el suelo, un coro de gemidos sonó por el túnel. Él dudó. Mierda. diez o doce ghouls más se desplomaron en la luz, gimiendo y gorgoteando. Debería haber sospechado. Siempre viajaban en manadas.

Bueno, no había nada para eso. Rin tendría que llevarlos por su cuenta hasta que Yukio regresara. corrió hacia el primer ghoul, lo golpeó en la cabeza con Kurikara y se volvió para dar un golpe al siguiente. Bajó tres o cuatro hasta que un ghoul se agarró a su chaqueta. La sacudió, pero se agarró nuevamente y tiró. tropezó, y se escabulló, sacando las piernas de debajo de un ghoul a su izquierda. En el túnel, los gemidos se hicieron más fuertes. La mayor parte de la manada, pegada una contra la otra, llenando el túnel de pared a pared, venía hacia él.

"Mierda."

No había forma. él le quitó un ghoul a sus piernas. Tendría que dibujar a Kurikara, simplemente no había manera de que pudiera hacerlo de otra manera. Whack, whack, dos más, e incluso entonces no estaba seguro si podría sacarlos a todos por su cuenta. Él necesitaría-

"¡Aviso!"

rin giró y-bam, se agachó justo a tiempo cuando la mujer rubia con leotardos rojo oscuro, con el pelo recogido en un nudo en la parte superior de la cabeza, corrió hacia él y le arrojó algo afilado a un ghoul que no había visto. notado estaba llegando a su garganta. Lo que sea que arrojó le cortó el cuello y se lanzó hacia ella donde lo atrapó con una mano enguantada.

"¿Qué estás esperando? Dibuja tu espada".

se tomó solo un momento para mirarlo y darle una mirada que no le importaba antes de correr por las vías del tren hacia el grupo de ghouls que esperaban. Mientras corría, extendió la mano y cruzó los brazos detrás de la cabeza. su suéter se deslizó de sus hombros y de un par de tatuajes en su espalda en forma de sol y luna dibujó dos cuchillas. Destellaron por un momento bajo la luz de los faros antes de comenzar a atacar a los ghouls. Dulce.

Rin no pudo evitar la sonrisa que se extendió por su rostro. dejó que la tela roja cayera alrededor de la funda de Kurikara y luego sacó la hoja de su funda. Al instante, las paredes del túnel se iluminaron con luz azul y, con un rápido corte, envió una ola de llamas al grupo de ghouls que lo había rodeado y los había cortado.

Delante de él, la mujer se detuvo, casi en estado de shock, y lo miró fijamente, a sus llamas. El momento duró solo unos segundos antes de que ella pareciera aceptarlo y seguir adelante, cortando las piernas de un ghoul en la rodilla. Ese fue el más rápido que Rin había visto a nadie lidiar con verlo en forma de demonio completo.
Juntos, los dos se abrieron camino a través de la manada de ghouls, Rin dando golpes rápidos con Kurikara y enviando rayos de llamas, la mujer trabajando rápidamente con sus dos cuchillas y la hoz del boomerang. ella podía enviar a esa cosa volando por el túnel, cortando ghouls, matando a algunos con sus espadas, y luego atrapándolo en su camino de regreso, deteniéndose por un momento para apuntar y dejarlo volar de nuevo.

Ella era increíble, pero incluso con los dos, la manada de ghouls era demasiado gruesa. Pronto, habían trabajado lo suficientemente profundo en la manada como para estar fuera de la luz del tren, pero también habían logrado rodearse. ¿De dónde habían venido todos?

"¡No es bueno!" la mujer gritó sobre sus gritos. "Voy a encontrar el alfa. ¿Crees que puedes manejarte aquí?"

"Si pero-"

Antes de que él pudiera protestar, ella saltó, cortando un camino hacia el lado del túnel como si estuviera atravesando la jungla con un machete. Incluso si encontraba el alfa, no había forma de que pudiera derribarlo ella sola. el alfa controlaba la manada; en el momento en que ella comenzara a atacarlo, los otros ghouls se volverían contra ella. Tendría que tratar de mantenerlos ocupados.

Usar sus llamas ahora se había convertido en una segunda naturaleza. Simplemente les dejó hacer lo que querían, instintivamente los controlaba en el fondo de su mente. ghoul after ghoul cayó a su espada y las llamas. Un minuto o así pasó antes de que un gran rugido rugiente viniera silbando por el túnel más allá de sus oídos. Ella había encontrado el alfa.

Y justo en el momento en que los ghouls se alejaron de Rin y comenzaron a caminar pesadamente por el túnel, de vuelta al alfa para protegerlo. por unos momentos hizo su trabajo más fácil, atacando a los demonios sin que ellos atacaran hacia atrás, pero finalmente la mitad de la manada se separó y se centró en Rin mientras los otros se perdían en la oscuridad donde no podía ver, pero podía oír el chasquido rebanada de espadas de esa mujer. los ghouls lo rodeaban en un círculo limpio, inmóvil. Se volvió lentamente, examinándolos, observando, esperando su ...

¡Chasquido! siseando y gruñendo, todos se lanzaron contra él de inmediato, cerrándose como una manada de leones sobre su presa y en ese mismo instante una serie de disparos resonaron a través del túnel y aproximadamente la mitad de sus cabezas explotaron. Justo a tiempo. Rin se llevó el resto con Kurikara. se giró, y allí estaba Yukio de pie a la luz de los faros, recargando su pistola.

"Me dirigía a casa, así que estaba cerca", dijo, adelantándose.

"Gracias."

"Claro. ¿Qué está pasando allí?"

Rin negó con la cabeza. "No lo sé. Alguna damaella apareció de la nada y comenzó a matar demonios, así que lo hice ".

Se encogió de hombros y una segunda ronda de ghouls salió de las sombras hacia ellos.

"¿Un exorcista?" Yukio disparó unos pocos.

"Supongo que sí, pero ella no llevaba ningún equipotenía un par de cuchillas como las de Shura, bueno, no como las de Shura, pero se las sacó de la espalda como Shura, bueno, no importa. Entiende el punto. Rin negó con la cabeza, mató a un ghoul.

Un terrible y retumbante gemido resonó en el túnel, seguido de un tremendo estrépito. de inmediato todos los ghouls cayeron muertos a su alrededor.

Rin casi deja caer a Kurikara. "Ella lo hizo."

Yukio lo miró. "¿Hizo qué?"

"Sacó el alfa".

Yukio alzó las cejas. Ahora estaba en silencio, aparte del sonido de los tacones cortos golpeando contra las vías del tren. Yukio y Rin miraron mientras la mujer aparecía vagando fuera de la oscuridad.

"¿Alguno de ustedes tiene un doctor meister?" -preguntó, sosteniendo una mano en su brazo sangrante, riendo y escupiendo sangre. "Esa última ..." Hizo una pausa, tambaleándose, y yendo, si era posible, incluso más pálida de lo que ya era.

Yuki dio una palmada en el brazo de Rin. "Se va a desmayar. ¡Atrápala, Rin!"

Sobresaltada, Rin se apresuró hacia adelante y logró agarrarse debajo de los brazos de la mujer antes de quedar completamente inerte. Ella era sorprendentemente pesada, y en su prisa, Rin se había colocado en un ángulo incómodo. comenzó a resbalar, y segundos más tarde fue obligado a arrojarse al suelo él mismo, la mujer en su regazo. Él gruñó bajo su peso.

Sus ojos se abrieron y ella lo miró, una risa que se convirtió en una tos que le provocó un pequeño chorro de sangre en la boca.

"Buenas llamas", dijo, y luego se desmayó por completo.