Estaba poniéndome los tacones cuando Mia me llamó.
Mia: ¿Llegas ya?
Yo: Sí, estoy saliendo - Mentí.
Acabé de prepararme rápidamente y salí de casa, con suerte la discoteca no estaba lejos y conseguí llegar en poco tiempo.
Mia: Hey , has tardado
Yo: Sí, lo siento ¿Entramos?
Mia: Sí
Le dimos el DNI al portero y nos dejó entrar. Pasamos a la zona vip ya que el tío de Mia era el dueño del local y nos dejó entrar al reservado. Nos pedimos un Ron-cola. Al lado nuestro había un grupo de chicos, pero me fijé en uno en concreto; era moreno, pelo corto y ojos marrones. Entonces cruzamos miradas
Yo: Mia, mira ese chico es monísimo.
Mia: ¿Quién, el que está sentado? No lo veo bien.
Yo: Me está mirando.
Mia: Pues ahora te mirará más.
Mia me cogió de la mano y me llevó a la pista de baile empecé a bailar y noté como él me miraba entonces se levantó y se acercó. Empezamos a bailar juntos. No solía hacer esas cosas, no era una chica de lios de una noche pero él me atraía muchísimo. Se acercó a mi oreja y me dijo:
- ¿Cómo te llamas?
Yo: Aria ¿Y tú?
- Sergio
Aria: ¿Cuántos años tienes?
Sergio: 18 ¿ Y tú?
Aria: 18 también.
Entonces dejamos de hablar y empezamos a bailar. Nos acercamos, cada vez estábamos más juntos y nos besamos. El beso cada vez era más intenso y le dije:
Aria:¿Quieres venir a mi casa? No hay nadie.
Sergio:¿Segura?
Aria: Si.
Salimos de la de la disco y fuimos a mi casa. Pasamos la noche juntos.
A la mañana siguiente me desperté y él ya no estaba, me dejó un papel que ponía su número de teléfono pero nunca le llamé ni le volví a ver.
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Casualidades
RomanceLa skuad hace un concurso para ir a pasar unos días a la mansión pero todo se complica cuando aparecen dos chicas que llaman la atención de varios integrantes de la casa.