Ojos de limón y nubes de tormenta

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Lisboa 5 años

"¡Dame eso!" gritaba mientras saltaba intentando alcanzar a Shopie que se veía muy asustada.

"No te han dicho ya que a la escuela no se traen muñecas, esto no es el Kínder" ese troll tenia a Sophie en su sudorosa mano muy por encima de mí, y claro tenía toda la cara de un villano.

"Ella no es una muñeca" dije saltando con todas mis fuerzas "Suéltala ya vas a pegarle tu apestoso olor a troll" aún seguía saltando y comenzaron a rodar algunas lagrimas por mi mejilla

"La bebita está llorando" el se estaba riendo y yo ya no podía detener mis lagrimas

"Dame eso" un cuerpo grande, aún mas grande que el Troll pasó  quitándole a Sophie de sus horribles manos, le dio una mirada como la que mamá solía darle a papá cuando olvidaba llevarme a la escuela "Vete ya" su voz se oía mala creó que prefería al troll sobre este gigantón que bien podría ser dos veces yo. El troll cabeza de zanahoria salió corriendo y ahora este gigante de cabello color caramelo, me miro y juraría que sus ojos son como dos limones, sonrió y tenia bonitos dientes,  (¿podría masticarme con esos dientes?) se agachó y seco mis lágrimas su mano era suave (apuesto a que usa crema), el tomó mis manitas y las puso estiradas al frente y justo ahí puso a Sophie (No es malo, ¡hasta ahora!). "Estas mejor" sonrió, otra vez (el ratón debe darle una fortuna por esos dientes), solo asentí, "Te acompañó  a tu salón", no había notado que la campanilla había sonado y el patio estaba casi vacío (quizá viajar con protección no estaría nada mal)

"Esta bien" abrase fuerte a Sophie con un brazo y le di mi manita, el solo la miro como si estuviera viendo un gato bailar con un pececito y después pareció entenderlo y se levantó para tomar mi mano, comenzamos a caminar hacia la escuela (deberían llamarla quita tiempo, porque pues yo podría estar jugando al té  ahora mismo) "¿Porqué eres tan grande?" El me miro y sonrió. 

"Hola! soy Nicolás Jay Thompson, tengo ocho años, me gustan las bananas cubiertas de chocolate y odio las zanahorias" rio y me miro "Ahora preséntate tu" dijo mientras nos deteníamos en el pasillo

"Yo hice una pregunta primero" solté su mano y me pare frente a él y arrugue mi nariz, mientras cruzaba los brazos. Suspiro

"Eres una chica difícil, bien" otro suspiro y se agachó para quedar a mi altura "No has pensado que no es que yo sea grande, es solo que tu" toco mi nariz con su dedo "eres demasiado pequeña" arrugue mas mi nariz y el pareció entender que no iba a jugar su juego, otro suspiro ( acaso guarda demasiado aire) "Mi padre es alto, dice que yo seré tan alto como el porqué toda mi familia lo es, además creo que como muchas verduras y si te digo un secreto” se agacho para acercarse a mi oído y yo me levante de puntillas ”Creo que es el danonino” me miro y sonrió yo sonreí y deje de cruzar mis brazos.

"Babieca Esme Annethe Elizabeth Lisboa Salvatore Blue, cinco años me encantan los arándanos> y odio los chicharos y al niño cabeza de zanahoria" casi me quedo sin aire pero logre decir mis 5 nombres y me sentía orgullosa

"Cuantos nombres" su cara parecía feliz" tienes mucho para escoger, ¿Y cómo te gusta que te digan?" seguía sonriendo(estará feliz todo el tiempo)

"No sé, todos me dicen cómo quieren y tienes de donde escoger" me encogí de hombros "Papa me dice Lizy, los abuelos Babi, mi tía Joy me dice Any mamá solía decirme Libo, puedes decirme cómo quieras" le sonreí a pesar de comenzar a sentir como si alguien rompiera todas mis muñecas al pensar en mamá, no note cuando una lágrima recorrió mi mejilla hasta que el la limpio.

"Me gusta Esy, es pequeño como tú" me sonrió y me perdí en esos ojos de limón.

5añosdespués 

Esy 10 años

"¡Jay, mira esto!" iba corriendo con una carta en mis manos

"¿Que es eso Esy?" me miro sonriente como siempre, el estaba en su patio jugando con unos amigos y yo había corrido desde mi casa que no quedaba muy lejos hasta aquí

"¡Es una carta del ratón, el contesto mi carta!" sonreía a más no poder, Jay me sonrió y me miro con ternura, se escucharon las estruendosas risas de sus amigos.

"¡Pobre tonta!, no sabes que el ratón  no existe" mire a Jay para que dijera algo pero no lo hizo

"Nick saca a esta nena de aquí queremos seguir jugando" Jay no decía nada solo nos miraba ellos, yo, ellos, yo. Creo que sabía cómo acabaría esto así que lo hice más fácil me di la vuelta y me fui, me fui corriendo me fui llorando, eso no era verdad el existía.

"Esy, ven, Esy" lo oía  detrás de mi, venía corriendo tras de mí, yo no pare pero el llego y me abrazó "Esy no los escuches, claro que existe, sólo que ellos tienen los dientes tan picados que jamás les ha traído nada el ratón" me gire y lo vi sonreírme mientras lo abrazaba fuerte y me pegaba a su pecho sintiendo su vista  en mi, su mirada de ojos de limón.

2 años después

Jay 15 años

Me despierto feliz y al revisar la fecha en el calendario me siento de muy buen humor es sábado y hoy va a ser un día tan perfecto como ella. Me puse una camisa blanca de cuello V unos pantalones de mezclilla mis tenis azules y mi sudadera blanca, bajo las escaleras sin hacer ruido tomo el regaló del lobby y saco el mini pastel del refrié, tomo las llaves del auto (próximamente mío) y salgo hacia su casa en el camino voy escuchando la radio y pensando en lo feliz que se pondrá con el pastel ella lo adora

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toco la puerta pero notó que está abierta pasó casi corriendo al sentir miedo mucho miedo por ella subo corriendo a su habitación y ahí esta su negra y rizada melena, esta sollozando abrazando a una almohada aun tiene puesta su pijama de tinkerbell  "Esy" ella voltea y veo sus ojos rojos y corro a abrazarla ,no puedo soportar ver una sola lagrima salir de sus ojos, desde aquel primer día de clases (¿Que habrá pasado?) "¿Esy qué pasa?" ella niega con la cabeza mientras moja mi sudadera y yo solo acarició su espalda.

"Tiraste mi pastel" ¿que el pastel? miro hacia donde ella vio y noto que tire el pastel y el regaló al piso.

"Puedo comprarte otro, puedo comprarte mil pasteles" ella solloza aún mas (¿Qué diablos estoy haciendo mal?) "Esy"  ella levanta su mirada

"Murió, y yo no quiero más cumpleaños" y es ahí cuando veo sus ojos convertirse en nubes de tormenta.

 

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