Una vida sin ti. "IchiRuki"

Felicidad.

Desenfundó su zanpakuto con una lentitud que irradiaba elegancia, su tranquilidad, transmitía técnica y habilidad pues su espada era la mas hermosa de la sociedad de almas.
Cerro sus ojos al mismo tiempo que un frio y cristalino viento pasaba por los lados de su cuello, agitando su cabello, podía verse como el suelo comenzaba a tornarse un centelleante hielo cegador, en el que la bestia carente de corazon podía ver su ruina.

Rukia: Este es tu final.
          Mae "Sode no Shirayuki"

Con el resonar de sus palabras el devorador de almas comenzó a congelarse de pies a cabeza, quedando atrapado en un cilindro que tenía su inicio desde el suelo hasta llegar al cúspide del cielo.
La pequeña Shinigami con un paso flash tomo a la niña de los brazos del hueco, antes de que este se congelara por completo.

Rukia: ¡Ay por Dios! ¡Yuzu! ¿Como estas? ¿Te lastimo mucho?

Yuzu: ¿Rukia? ¿Eres tu? 

Adolorida y algo conmocionada por todo lo ocurrido, esta última perdió la conciencia.

                             ..........

-¿Donde estoy? Auchh, mi cabeza duele demaciado-
 
-¡Yuzu! por fin despiertas, me tenías muy preocupado-

Yuzu: Jinta ¿Como llegue aqui?

Jinta: ¿Que? ¿Acaso no lo recuerdas?

Dijo el colorado, sosteniendo muy fuerte la mano de la joven.

Jinta: Te estaba esperando para nuestra cita pero nunca llegaste.
La señorita Kuchiki te trajo aqui a la casa del Señor Urahara, ella te salvo de un ataque de un hueco.

La mente de la joven comenzó a recapitular todo lo vivido para llenarse de ansiedad y preocupación.

Yuzu: ¿Donde? ¿donde se encuentra ella ahora?

Jinta: Ella y los demás Shinigamis se reunieron en un punto del parque para abrir el portal a la sociedad de almas.
¿Que te sucede? Estas palida.

Yuzu: Tengo, tengo que decirle a mi hermano de Rukia, ella volvio.

Jinta: Tranquila todo estará bien, solo descansa.

Jinta algo preocupado pozo su mano sobre un lado de la cara de la shockeada chica, ella lo miro fijamente.
Tomo su cara y lo beso muy repentina mente.

Jinta: ¿qu..e hace.. s?

Este se enrojeció tanto como un tomate, quedando en una especie de trance. La joven aprovecho para salir de ahí corriendo para contarle todo a su hermano.
Sin antes pararse en el umbral de la puerta.

Yuzu: Jinta, no sabes cuanto lo siento sabes que te quiero mucho, pero este momento no se trata de nosotros, la felicidad de mi hermano esta en juego.

Yuzo sabia que Jinta por preocupación no la habria dejado ir. Para que esta hiciera reposo, el hubiera avisado a alguien mas, pero si la ayuda llegaba tarde y si el momento se esfumaba, y el encuentro no se daba ¿que seria de Ichigo?.
Todo esto iba y venia en la mente de la pequeña hermana de Ichigo, hasta el portazo que inconscientemente le dio a la puerta de su casa la volvio en si, encontrándose con su Padre y hermana.

Yuzu: ¡Papa! ¡Ichigo! ¿Donde esta?

Isshin: Hija ¿Que te sucede?

Yuzu: ¡Solo díganme donde esta!

Isshin: En su habitación recién llego.

Sin mas que decir, la recién llegada comenzó a correr por las escaleras que la llevarían a las habitaciones.

Yuzu: Por fin, llegue.

La niña se detuvo justo centimetros de la puerta de la habitación de Ichigo.
Cuando este último la abrió.

Ichigo: ¿Yuzu?