Cap. 1

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Viernes por la noche

Una encapuchada caminaba por el Bosque cargando una pequeña cesta, tratando de encontrar un lugar seguro canino y camino hasta llegar a una casa por lo que veía habitada por las rosas sín perder tiempo debido a que la juvia comenzó corrió hasta la puerta dejando la pequeña cesta de donde se escucho un pequeño quejido.

Desco: shhhh tranquila pequeña,  todo va a estar bien — murmuro moviendo la cesta — perdóname amor,   Pero no olvides que mami te ama — menciono tratando de contener las lágrimas — 

La encapuchada se acercó a la cesta donde deposito un suave beso,  golpeo la puerta con fuerza para salir corriendo y esconderse entre la naturaleza tratando de contener las ganas de volver por ella,  pero ella sabia que era lo mejor.

En la mansión

Reiji: Tsk... donde están los familiares cuando se necesitan — se quejó caminado hacia la puerta — uno ya no puede tener una cena tranquila sin interrupciones

Canino hasta llegar a su destino en cuanto la abrió no encontro a nadie pensando que era una broma de mal gusto estaba apunto de cerrar la puerta pero un pequeño pero diminutivo quejido llamo su atención bajando la mirada se encontró con una cesta que tenía un pequeño bulto que se movía,  con desconfianza tomo la cesta la destapo para llevarse una gran sorpresa.

Reiji: y-yui — tartamudeo incredulo viendo a la pequeña rubia de piel blanca moverse — e-esto no puede ser posible

Pero los pequeños sollozos de la menor lo trajo a la realidad dándose cuenta que no era una broma,  sin esperar cerro la puerta y camino a paso rápido hasta el comedor donde sus hermanos lo estaban esperando, muchas cosas habían cambiado desde la muerte de yui pero trataban de no demostrarlo,  apenas ingreso las preguntas no tardaron

Laito: nfu~ ¿quien era reiji-kun? — pregunto con su típico tono divertido — 

Ayato: ¿ Que es eso que traes en la cesta? A ore-sama le llega un olor muy conocido — menciono olfateando el aire — un olor que hace tiempo no olía

Kanato: Nee teddy ~ acaso no es como el olor de yui-san? — en cuanto dijo ese nombre los hermanos desviaron la mirada —

Shu: silencio — ordeno abriendo los ojos — Reiji ¿que traes en esa cesta?

Reiji: Eso es lo que vengo a decirles — agrego acomodando sus gafas — no se si sea real o mentira,  ya que no hay poder científico que lo compruebe

Subaru: puedes dejar de andarte con rodeos — gruñó levantándose de su silla para telestransportarse a su lado quitándole la cesta — veamos que mierdas ay ahí

En cuanto subaro destapo al pequeño ser sus ojos se abrieron como platos,  no daba crédito a lo que veía debía ser una broma,  sus hermanos al ver el trance de su hermano decidieron acercarse llevandose la misma sorpresa que ellos ahi frente a sus ojos estaba una pequeña rubia de ojos rosados (magneta) que los veía con suma atención.

Ayato: chichinashi? — murmuro y la bebe río en respuesta — acaso a ore-sama le hizo daño los tokoyakis que tiene alucinaciones

Laito: bitch-chan — susurró con los ojos abiertos sacando  a la pequeña de la incómoda cesta tomándola por las axilas — bitch-chan eres tu? 

Kanato: huele a yui-san — agrego oliendo el cabello de la bebe —

Reiji: cuidado con la bebe— exclamó un tanto preocupado de que se le fuera a caer más no lo demostró — ella es frágil

Shu: Reiji que esta sucediendo?  — miro a su hermano menor en busca de una respuesta —¿ como es esto posible? 

Reiji: no lose — grito provocando el llanto de la bebe que se había asustado —

Reencarnación [Diabolik lovers] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora