La Condición (Corregido)

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Gabriel:

Nathan esta a salvo de nuevo. Espero que lo este para siempre esta vez. Pero ahora que regresó,  con el viene el dolor de corazón que tanto he intentado mantener dentro. Grité, patee y rompí cosas solo por la oportunidad de salir de esta casa y solo verle. Le dije a Van que no le hablaría, que solo necesitaba saber que estaba bien. Solo para saber como estaba, Hice todo el ruido y el drama hasta que perdí la voz y mis nudillos se partieron sangrando, me deslizo por la pared, respirando pesadamente. Envolví mis nudillos con vendas de ungüento para ayudarlos a sanar.

Hace unos días, Van me aparto de Nesbitt para decirme que suponía que estaba enamorado de Nathan, aparte la vista brevemente,  me había convencido de hablar con ella, no había tenido la intención de decirle, no se como lo logro, pero lo siguiente que supe fue que estaba llorando y se lo derrame todo a Van, todo el dolor que Nathan había traído a mi vida des de que lo conocí, pero no lo culpo, nunca podría haberlo culpado de eso. Si ni siquiera puedo imaginar mi vida sin el, como mi mejor amigo o como mi novio, no me importa, siempre y cuando el este cerca de mi. Van parecía angustiada cuando le conté esto, después de investigar un poco, dijo que el estrés y la tensión en mi corazón por todo lo que estaba pasando, me estaba matando, eventualmente, mi corazón me fallaría, iba a morir.

Tenia que decirle a Nathan o empeoraría las cosas. No ayudaría que todos tengan miedo de lo que sera el siguiente movimiento de Marcus Edge, el padre de Nathan, que los brujos negros sean eliminados rápidamente uno por uno. De acuerdo con Van, debo parar de preocuparme demasiado por todo y por todos, dice que el cariño de Nathan debería ayudar, ya sea como sujetarnos las manos, algún abrazo o cosas como esa, se que tendré que contarle tarde o temprano, pero, no creo que tenga agallas. No quiero ser una carga para el, quiero que sea cariñoso conmigo por tener un vinculo cercano, porque somos mejores amigos, no porque moriré si no lo hace. Muestras vacías de afecto harían peores las cosas y me acercarían mas a la muerte. Hace mucho tiempo que acepte que las cosas no iban a cambiar, que con mi don, no tendría una vida larga, esta habilidad para cambiar mi aspecto a otra persona no iba a durar para siempre, la idea de morir, me provoca un ataque de miedo por la espalada. El pensamiento de morir ahora, cuando tengo tanto que perder, es demasiado de lo que puedo soportar. No duermo mucho.

En la mañana, he ido a buscar a Nathan por el bosque. Tarde unos 10 minutos antes de encontrarlo a unos 50 metros de la casa de Van. Tumbado, en posición fetal, bajo la sombra de unos arboles, gimiendo y temblando en sus sueños, abrazándose a si mismo.
Supongo que estará teniendo pesadillas, me arrastro junto a el, y suavemente, tiro de el, para sacarlo un poco de sus sueños, abriendo los ojos haciendo que me enamore otra vez. Me golpeo mentalmente. Concéntrate, Gabriel. No es hora de pensar en eso.

"Gabriel" dice el suavemente. "De verdad estas aquí."
"Si, estoy aquí y nunca me iré si puedo ayudar" Replique
"Ven aquí, tengo frió. Me arrepiento de no haber traído nada que pueda calentarme"
Nathan me acerco a el y me tape la cara para que el no viera lo rojo que estaba, sin querer coloque mi mano en el hueso de su cadera. Me preocupe al instante. Se ve que no ha podido comer bien como debería y eso me hace sentir culpable. Debería de haber estado para el, debería haberlo cuidado como todo amigo decente haría. Moví mi mano antes de que el reaccionara.

"Pero ahora te tengo a ti, siempre estas calentito"

Intente que no se viera el rojo intenso de mis mejillas.

"No te muevas, es lindo así, tranquilo, con paz, solo tu y yo, como cuando estábamos en la cabaña de Mercurio, cuando íbamos a escalar o nadar, como los viejos tiempos, cuando todo estaba bien y estábamos a salvo, antes de que todo se fuera a la mierda"
Dice Nathan.

El coloca suavemente su cabeza en mi pecho, esta temblando mientras acaricia mi cuerpo, estoy tratando de concentrarme pero Nathan me trata como una almohada humana.

"Si tienes frió, quizás deberíamos entrar en la casa, ir a una cama y calentarnos allí" Dije con voz temblorosa. Trata de respirar Gabriel, Dentro, Fuera, Dentro, Fuera. Solo es un gesto inocente, nada mas, para Nathan no significa nada.

"Pero estoy cómodo así" Nathan se quejo débilmente. "Quiero que las cosas sigan así."

"Yo también Nathan" Replique. Moví su cabeza suavemente para poder moverme. Después de unas cuantas maniobras y medias quejas de Nathan, saque a Nathan del refugio y lo lleve a la casa. Todavía esta temblando y sus ojos siguen caídos. Nesbitt oye la puerta abrirse y asoma la cabeza por el marco de la puerta de la cocina. Frunce el ceño hacia Nathan y luego hacia mi.

"¿Que esta mal con el?" Pregunta Nesbitt
"Las pesadillas y el clima frió lo mantuvieron despierto la mayor parte de la noche. Saldré en unos minutos". Respondo por encima de mi hombro. Llevo a Nathan a la habitación libre, se necesita aun más que fuerza para luchar con los edredones y detener a Nathan de inquietarse alrededor de la cama antes de que lo cubra con las sabanas. El calentara pronto. Hare algo de sopa para cuando despierte, Van tendrá algo que podrá ayudarlo a recuperar energía y algo de peso que ha perdido.

"Gabriel, ven aquí, acuéstate conmigo, no quiero volver a dormir solo, no quiero que sea un sueño" dice Nathan, bosteza ruidosamente y sonrió por la forma en que su cara se arrugo cómica antes de subir a la parte superior de la cama, acabe quitándome los zapatos y arrastrándome debajo el edredón.

Nathan se acerca y lo siento temblar, así que me vuelvo a enfrentar al chico mas pequeño y envuelvo mis largos brazos alrededor de su pequeño cuerpo. Puedo sentir su columna vertebral a través de su camisa. Nathan esta fuera de si. Solo estoy ayudando a un amigo y se que no recordara esto mas tarde. Esta demasiado cansado para procesar cualquier cosa. E incluso si lo hace, se que en el fondo, el sueña hacer esto con Annalise. Ese pensamiento me deprime, pero me alegra que este con alguien quien lo haga sonreír y que no le haga olvidar que lo aman, así que decidí centrarme en calentarlo antes que nada. Lleva tiempo, pero al final, deja de temblar y sonríe satisfecho. Se ve tan inocente.

"Prometo que esto es real. Soy real. Y tu también. Siempre estaré aquí para ti, tanto si quieres o no, nunca tendrás que preocuparte por eso" Yo susurro.
"Se que no" responde el en voz baja. "Por eso significas mucho para mi, porque se que siempre vas a estar allí, eres demasiado cabezota como para dejarme en paz" Me rió y paso mis dedos suavemente por su cabello, ha crecido bastante en el mes que no nos hemos visto. El hace un sonido de satisfecho.
"Pero lo aprecio mucho, realmente lo hago Gabriel"

Finalmente nos dormimos, espero que Van y Nesbitt nos dejen en paz por un tiempo, aunque es poco probable, ambos son muy curiosos y entrometidos.

Lo ultimo que recuerdo antes de dormirme fue el sonido de la puerta abrirse y dos figuras de pie en la entrada, mis ojos se cierran antes de procesar quien es.

Oh Mierda, creo.

Lado DesgarradoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora