CUARTO CRECIENTE

los extraños 2.

Porque siempre yo mamá- reclamé.
Mamá me miró con esos verdes ojos intensos y dijo : Evelyn tú eres buena para ayudarme sabes que Lorein siempre hace mal las tareas de casa.
Le respondí: Ok mamá.
Me limité a decir pues siempre contestaba lo mismo.

Puse la mesa en silencio cuando Mamá llamó a todos a cenar Me senté en mi lugar habitual lejos de papá y cerca de Lorein.
- mañana empieza el colegio Espero que este año al igual que la anterior las dos están muy atentas en especial tú Evelyn es tu último año- dijo mi padre.
- si papá- contesté.
-¿ ya tienen todo listo para mañana?- preguntó mamá- Recuerden que hay que madrugar y no quiero apuros A última hora- añadio.
- Sí mamá- volví a contestar.
Lorein rió - te preocupas demasiado mamá ya somos suficiente grandes para saber nuestra responsabilidad- comentó diferente escogiendo cuidadosamente sus palabras para quedar bien.
Comí lo más rápido posible para escapar de otra aburrida conversación familiar y subir a mi habitación ya que todo podía estar listo para mañana mi padre hablaba de cómo el tiempo había pasado y ahora nos veía convertidas en lindas señoritas la verdad yo no me consideraba linda Aunque me parecía mucho a Lorein era ligeramente más gruesa mi cabello lacio y castaño llevaba un cuarto por debajo de mis hombros y me gustaba que el flequillo de mi cabello está para mi ojo ya que no eran tan grandes como los de lorein se parecía a los oscuros ojos cafés de Mi padre mis labios eran medianos un poco gruesos siempre intentando forzar una sonrisa también era blanca como ella pero un poco más pálida para no desentonar el blanco color de mi piel con mi cabello castaño oscuro tintura valijeros mechones rubios. Aproveché una breve pausa Para levantarme de la mesa y dirigirme a lavar los platos.- necesito terminar de arreglar mi bolso y mi uniforme voy a subir hasta mañana.- normalmente en época de clases acostumbramos dormir temprano para evitar demoras en la mañana mamá beso en la frente y papá también lorein se despidió y me siguió por las escaleras yo entro a mi habitación y ella la suya no éramos muy unida sólo teníamos en común nuestro apellido.

Me apresure a sacar el uniforme nuevo y antes de que subiera mis padres me dirigía plancharlo en la habitación recogí de la bolsa todos los cuadernos que me habían comprado la semana pasada tomé un marcador brilloso que tenía sobre la mesa y empecé a poner mi nombre y la materia de cada uno de ellos tomé los libros y también etiquete metí todo en el bolso verde militar estaba lista para el primer día de clases .
Entré a tomar una ducha afortunadamente tenía un baño en mi habitación el año pasado cuando papá logró vender una mansión con una inmobiliaria en la que trabajaba Adecco la habitación de Lorein y la mía Para evitar discusiones diarias entre nosotras y la espera interminable para utilizar el baño.
El reloj ya marcaba las 9 de la noche cuando ya terminé de bañarme con agua tibia haga frío o haga calor siempre debía ser tibia al salir del baño con la bata un suave escalofrío me recorrió la espalda toda la tarde había llovido se sentía el clima helado.
Como de costumbre me acerqué a la ventana Ahora sólo garuaba una densa neblina inusual lo cubría todo me senté en un extremo de mi ventana mirando hacia la calle mientras me peinaba fantaseaba nuevamente con mis difuso futuro tan sólo Si pudiera saber que me esperaba después de un año y medio tan sólo Si supiera...
El vecindario se veía tranquilo no sé cuánto tiempo estuve mirando por la ventana pero el sonido del camión en la Calle Justo frente de la casa me distrajo gire a la cabeza y me di cuenta que era la mudanza llegaban vecinos nuevos a la casa que había sido de los cassis Quienes se fueron de la ciudad hace poco más de 7 meses detrás de un camión se estaciona un auto negro y detrás de ese un BMW negro muy elegante de allí bajaron un hombre de mediana edad 48 o 50 años y una mujer que asumir que era su esposa se veía más joven que él se dirigieron directamente a la puerta de la casa y p prendieron las luces los del camión de mudanza se empezaron a bajar las cosas Mi curiosidad no me permitía irme de la cama a dormir los ocupan tes del del carro negro aún no bajaban la neblina se hizo mucho más densa difuminando mi Visión.
Al cabo de unos minutos la puerta del copiloto del auto se abrió bajo una chica delgada no pude ver su rostro por la oscuridad al mismo tiempo bajó un chico o era un adulto no lo podía distinguir llevaba un grueso abrigo largo que le cubría hasta las rodillas eso impedía que pudiera ver su convicción el cuello de su abrigo estaba levantado le cubría la nuca su cabello era corto.
Finalmente bajo la persona que manejaba era un chico pude distinguir porque su rostro se iluminó con la luz de uno de los faroles de la calle el viento jugaba con su cabello negro que caía en varios mechones cubriéndole la frente llevaba un abrigo negro largo hasta las rodillas una bufanda que le envolvía su cuello era alto tanto como el primero que bajó del asiento trasero.
Se apresuró a entrar a la casa siguiendo a los otros dos inmediatamente imaginé que eran hermanos por la simetría que tenía al caminar la chica delante y los dos varones atrás parecían atletas o algo así porque tenían anchas espaldas.
Me alegro saber que tenía vecinos nuevos en el vecindario No pasa nada era un lugar realmente aburrido todas las personas eran adultas parejas mayores a mis padres algunos tenían hijos ya no Universidad y otros eran profesionales.
A pesar de que aún no tenía facilidad para hacer amigos y mucho menos el don de la palabra albergaba una ligera esperanza de conocer a los nuevos vecinos cuando me percaté de que el único movimiento era el del camión de mudanzas que se marchaba Decidí irme a la cama.

sonó el despertador el primer día de clases fue la primera idea que cruzó por mi mente sin mucho entusiasmo me levanté fui al baño tomé mi uniforme de guardarropa me lo puse y empecé a peinarme una cola de caballo y luego de verme en el espejo decidí mejor dejarme lo suelto y taparme mi ojo izquierdo con el flequillo Bajé las escaleras y como de costumbre papá estaba sentado en la mesa esperando llevarnos a mí y a mi hermana al colegio No sé porqué pero el reconfortaba llegarnos el primer día Tal vez porque el resto del año pasaba viajando por su negocio inmobiliario y lo vemos una o dos veces por la semana La verdad es que algo me parecía a él no tomar tan en serio la vida La indiferencia ante las cosas y vivirlas como vengan en fin.