QUIEN ES DAISUKE-KUN?

Capítulo IV: Sigamos con la Misión de Guardiana

EN EL CAPITULO ANTERIOR:

Hump -gruño y se perdió en una esquina, mientras la ojiperla miro a Shino y a Kiba delante de ella y suspiro y luego poso su mirada en el suelo- que sucede? -Pregunto la ojiperla sin mirar a sus amigos-

Es lo mismo que te íbamos a preguntar hinata, que rayos sucede?, a qué se debió el comportamiento de ayer? -preguntó el inuzuka, mientras el aburame se mantenía callado como siempre, solo se metería de ser necesario-

-la ojiperla frunció el ceño- en serio quieren saber? -pregunto la chica, el aburame abrió la boca dispuesto a hablar; pero el castaño lo interrumpió como siempre

EN EL CAPITULO DE HOY

Claro que si! -hablo por los dos el castaño, haciendo que un aura depresiva cubriera todo alrededor del aburame-

Estoy cansada -dijo la ojiperla para poder retirarse e ir con el uchiha-

-El inuzuka la miró ceñudo- oye, en otro momento podrás ir a tu casa a descansar. Ahora tienes que decirme... -pero fue interrumpido por la ojiperla, que soltó un resoplido de exasperación y negó repetidas veces con la cabeza- no entiendes. Lo que trato de decir... es que estoy cansada de que siempre estén encima de mí -dijo la ojiperla un poco molesta, el castaño iba hablar nuevamente, para alegar que el nunca se había subido sobre ella; pero shino se lo impidió al propinarle un pisotón. Quiso gritar; pero fue silenciado por la mano de su amigo, voleo furioso hasta el para encontrarse la boca del aburame que le susurraba que prestara atención-

-La ojiperla segui cabizbaja- Siempre es lo mismo, desde el comienzo ustedes siempre me han sobreprotegido. Al principio me sentía muy querida por ustedes; pero al paso del tiempo me di cuenta de que ustedes lo hacian porque pensaban que no soy lo suficientemente fuerte para valerme por mi misma  -apretó sus puños- todos siempre esperan tan poco de mi -dijo nuevamente, el castaño quiso negar; pero la ojiperla se dio cuenta de sus intenciones- no me digas que no porque ustedes saben que es verdad -volteo así el aburame y lo miró suplicante- tu si me dirás la verdad, cierto shino? -dijo la ojiperla, el aburame bajo la mirada, en señal de que lo que había dicho su compañera tenía algo de cierto-

Hina -hablo el castaño con un inusual tono de voz suave- lamento si alguna vez te hemos hecho creer eso. La verdad es otra, por lo menos yo siempre e confiado en ti y se que eres una gran kunoichi -exclamó seguro de sus palabras- te cuidamos así, no porque no creamos en ti, si no porque no queremos que te pase nada... porque te queremos. Por eso nació nuestro lado sobreprotector -dijo bajando la mirada-

Si! -hablo shino dándole la razón al castaño- kiba tiene razón hinata, y espero que puedas perdonarnos por hacerte sentir así. Al principio así porque desprendes un aura de fragilidad, que hacer que todos te quieran proteger, tiempo después nos dimos cuenta que a pesar de ser tierna, amable y bondadosa, eres alguien que puede llegar a ser mortífera si se lo propone -dijo el chico muy seguro de lo que decía y con la seriedad que lo caracterizaba-

U-Ustedes... de verdad creen eso de mi? -pregunto la ojiperla sorprendida por lo dicho por sus amigos, el inuzuka sonrió mostrando todos sus dientes, mientras el aburame solo sonrió de medio lado-

Si hinata, te creemos capaz de muchas cosas -habló el aburame acomodándose las gafas, mientra la ojiperla sonrió contenta sintiendo como una lágrima traicionera baja por su mejilla. Kiba no lo resistió y dio un par de zancadas para darle un abrazo muy fuerte- eres genial hinata! -grito el castaño asfixiandola con un gran abrazo de oso-