A New Beginning (Una historia de Marvel)

Capítulo III

(Años atrás)

Recuerdo como si fuera ayer la misión en Lagos, el rostro descompuesto de Wanda cuando vio el edificio colapsando, las miradas que nos cruzamos en silencio, justo antes de activarnos y de tratar de salvar el máximo posible de vidas. Todo lo que hacemos lo hacemos para que el mundo esté en equilibrio, a salvo, para que los 'villanos' no ganen. Eso es lo que tenemos en nuestras mentes y en nuestros corazones. Pero a veces salen cosas mal. Sobre el papel es fácil planearlo, pero cuando estás luchando en una ciudad poblada, repleta de edificaciones y de personas corriendo de un lado a otro... Entonces pueden ocurrir cosas como las que pasaron aquel día.

También recuerdo a la perfección regresar a casa y que cada uno se encerrara en su cuarto. Con alguna excepción. Visión prácticamente no se despegó de Wanda y el resto intentamos estar a su lado en la medida de lo posible, pero las imágenes también nos atormentaban a nosotros. Lo que no sabíamos era que ese incidente, porque fue un incidente, iba a marcar el comienzo de un episodio que guardo en la memoria con una tonalidad gris, oscura, fría. Aún puedo escuchar, a cámara lenta, las palabras de Tony. Aún puedo ver su mirada, suplicando que le escucháramos, que le entendiéramos, que dejásemos el orgullo a un lado y prestáramos atención. Las primeras discusiones, un Rhodey firme como siempre que chocaba con otra roca como era Sam. Steve y Tony serios, cabizbajos. Y algunos intentando crear un terreno común, seguro, en el que pudiéramos movernos todos.

Pero aquellos acuerdos se habían propuesto resquebrajarnos. A una familia. Ahora echo la vista atrás y duele incluso más. ¿Había desperdiciado los últimos momentos junto a Tony? ¿No habría oportunidad para curar las heridas que nos fueron abiertas de la manera más injusta posible?

(Momento actual)

En los últimos años había aprendido a ver Wakanda como mi hogar y contemplarlo devastado, roto, con el corazón destrozado, me dolía como si fuera yo misma la que había sufrido. Cuando Steve trajo a Bucky, decidí quedarme y ayudar en todo lo que estuviera en mi mano. Así podría esconderme del gobierno y, además, ser útil. Y de la misma manera en que los Vengadores me acogieron en su día, T'Challa y su gente también lo hicieron.

Después de revisar todo el perímetro, me dirigí directamente al laboratorio de Shuri. La última vez que la había visto estaba estudiando a fondo a Visión, tan optimista como siempre, segura de que podría conseguir separar de él la Gema de la Mente sin que sufriera ningún daño. Y no sabía si había corrido la misma suerte que Sam y Bucky, ni siquiera me atrevía a pensarlo.

Respiré hondo antes de entrar por la puerta, que tenía marcas claras del azote de los secuaces de Thanos. Un miedo que hacía años que no sentía había agarrotado mis piernas y provocaba que un absurdo temblor recorriera mi cuerpo. Me asomé a la parte de abajo y ahí la vi, sentada, confundida. Y no pude hacer otra cosa que correr y abrazarla. Egoístamente, no podía perder a otra persona más. Pero pensando en el equipo, en la familia, no podíamos prescindir de ella. Era una pieza clave para lo que estaba por venir.

(Años atrás)

Antes del funeral de Peggy, forcé un encuentro con un Tony que ya imaginaba lo que estaba por venir. Aunque no supiera la escala que iba a tener el conflicto. Recuerdo la urgencia en sus palabras, en sus gestos, en su mirada. Siempre he sabido que, junto a Pepper y, por supuesto, a la humanidad, lo éramos todo para él.

-Entiendo perfectamente el punto de vista de Rogers. Pero comprended lo que intento deciros, por favor. Si no firmamos ahora, nos harán firmar. O, peor, nos encerrarán como a delincuentes.

-Pero, Tony, ¿y si nos fuerzan a participar en misiones injustas? ¿En causas políticas? Sé lo que es tener que jugarte la vida por algo en lo que no crees y tener que quitársela a personas que no esconden ni un ápice de maldad en sus almas.

-Habrá concesiones, las conseguiremos. Sólo si firmamos. Si no lo hacemos, nos tomarán como a criminales. Se acabaron los Vengadores. Se acabó esto -dijo con desesperación mientras miraba y señalaba a su alrededor. Pero no hacía referencia a lo material, sino a esos lazos que siempre creí irrompibles.

-Sabes que confío en ti, todos lo hacemos. Pero no estoy segura, Tony. Sólo quiero que me prometas, por favor, que esto no...

Tony me cortó y me abrazó sin darme tiempo a comprobar si eso que había creído ver en sus ojos eran lágrimas.

-Te prometo que haré todo lo que esté en mi mano para que esto no nos haga daño. Incluso aunque seamos todos demasiado tercos y orgullosos.

(Momento actual)

-No entiendo nada. ¿Cómo que se han desvanecido? ¿Eso significa que mi hermano...?

-No sé, Shuri. Yo tampoco comprendo nada. Ni siquiera sabemos si Tony y el chico están bien. No he podido hacer nada. De repente todo ha pasado y... -Lo intenté, pero no pude evitar contener las lágrimas.

Por suerte, en ese instante entraron en el laboratorio Nat, Steve y Bruce. Fue precisamente este último el que se enfrascó en una conversación técnica con Shuri, en la que recordaron uno a uno los pasos dados con Visión y revisaron los avances, los resultados... Mientras, Steve, Natasha y yo sólo dábamos paseos de un lado a otro, buscando la nada y encontrando vacío. Hasta que Thor apareció en la sala con semblante serio y con lo que parecía el primer paso del plan.