Ilegal [Navi]

Única parte

🎶

Ya no quiero flores, quiero noches de colores. Donde me condense y en tus manos me evapore...

No me escribas cartas en inglés, quiero de esos besos en francés. Llévame más alto que el monte Everest...

Ven, te voy a derretir en mi calor. Yo soy sol y tú eres hielo.
Ven, ten y mójame los labios con alcohol y recorre mi cuerpo.
Sacia mi sed... Descubre el secreto en mi cuello. Muérdeme la piel.
Ven y piérdeme el respeto...

Déjame la luna y las estrellas en el cielo. Si vas a bajarme algo, róbame en el suelo. Ya no me dediques la canción, donde lloras por mi corazón.
Ven y cántame el abecedario del amor.

Ven, te voy a derretir en mi calor. Yo soy sol y tú eres hielo.
Ven, ten y mójame los labios con alcohol y recorre mi cuerpo.
Sacia mi sed... Descubre el secreto en mi cuello. Muérdeme la piel.
Ven y piérdeme el respeto...

🎶

Won Sik estaba totalmente petrificado, todavía no salía del shock que le causaba el escuchar y leer en su idioma dicha canción. Sabía que Hak Yeon lo quería, pero nunca le había quedado en claro hasta qué punto. Bueno no, hasta... ahora.

El hombre no sólo era un par de años mayor que él, poseedor de un carisma enorme que desbordaba sin siquiera intentarlo; eso sí no se contaba el hecho de que era toda una belleza andante, tanto interna como externamente. Y aunque a veces parecía alguien demasiado recto y sumamente formal al acatar su papel de líder, para Won Sik el que se hubiera esmerado en traducir la letra de una canción latina, tan sólo para sorprenderlo. Lo había dejado tan atónito, no por el hecho en sí, sino por lo explícito de la letra en dicha canción.

El rapero posó sus ojos una vez más en la limpia y bien definida escritura sobre la pequeña tarjeta de su mano. La canción ya había finalizado del reproductor de música de su móvil, pero él, todavía podía sentir los acordes y las ansias de aquella voz femenina, que lo transportaban como su hubiera sido el mismísimo Hak Yeon quien se la estuviera cantando.

Tan inmerso estaba que no se percató que Jae Hwan había entrado a la misma habitación seguido de Hyuk.

— Larva ¿Qué haces? — preguntó a modo de saludo el mayor de los tres — ¿Ravi? — insistió al no obtener respuesta.

— ¿Ah?... Nada... Sólo... Sólo estaba escuchando música — respondió el aludido guardando la tarjeta rápidamente entre uno de los bolsillos de su pantalón.

— ¿Música? ¿Y ese milagro? — bromeó esta vez Hyuk sentándose a su lado a la vez que terminaba de responder un mensaje en su móvil.

Jae Hwan lo observó detenidamente por un breve momento para finalmente agregar:

— Oye, Won Sik, ¿Te encuentras bien? Estas sudando — dijo sentándose a su otro lado.

— ¿Sí? Seguro debe ser que... — comenzó diciendo para quedarse callado a mitad de su oración, al ver entrar a Hak Yeon junto a Taek Woon y Hongbin.

Sus miradas conectaron por escaso tres segundos, hasta que fue Taek Woon quien más que decidido habló, interrumpiendo el campo de visión de Won Sik.

— Tengo hambre, ¿Nos vamos a comer, ya?

— ¡Sí! Yo también tengo hambre — manifestó Hyuk.