~ shots~••[Sehun]••

☆°EL HOTEL°☆

Decidí esperarlo

Después del baño no podía mentir y decir que no estaría dispuesta a esperarlo porque sería una absoluta mentira.

Había esperado la noche desde que aterrizamos, desde que lo vi irse
Una parte de mi,la negativa, recitaba constantemente que ya había tenido lo que quería aunque fuera poco y que ni albergara esperanzas de que vuelva por más

La otra parte, la divertida, me impulsó a elejir mi mejor ropa interior, provocativa al máximo me la puse junto con un remeron medio transparente, no me gustaba demasiado por que no era mi estilo.

Me iban mejor las camisetas sin mangas

Pero todo era poder de seducción y esta era la forma de demostrarle tal vez,que lo había estado esperando,después de la ansiedad del momento me tiré en el sillón lo que pareció una eternidad creo que incluso llegué a dormirme cuando escuché un golpe en la puerta.

Me levanté no tan rápido para poder tener un poco de decencia y después de acomodarme  el pelo miré por la rendija para confirmar que fuera él.

Hermoso, con una camisa gris y pantalón negro de vestir parecía un príncipe de Disney .

No había tenido oportunidad de besarlo así que lo que más me interesaba en este momento era eso, dio unos pasos y a modo de saludo me agarró de la nuca y casi grito

gracias Dios!

No tiene labios tan carnosos pero aún así me encantan, el primer beso fue algo casto, como me lo esperé, pero luego tomó intensidad y me sujeto de la nuca fuerte ,me recordó a como me sujetó en el avión sólo que acá era dulce, al menos por un momento.

Cerró la puerta de golpe con una vuelta de llave y sin soltarme me hizo retroceder hasta llegar al sillón en el que me había dormido minutos antes .

Lo primero que se sacó fue los zapatos , no había tenido oportunidad de verlo antes así que lo miré absolutamente anonadada.

Se estaba desvistiendo para mí.

Le siguió el pantalón y la camisa de un solo tirón, no me dejaba desvestirme y no me dejaba desvestirlo, tenía mis manos a los costados y guardaba la distancia que él quería.

Si su propósito era que lo viera entonces eso haría

-3 veces te vi en un avión- habló mientras daba pasos sigilosos hasta llegar a mí

- En alguno te quedaste mirándome, pensaste en mi después? Pensaste en mí en la oscuridad de la noche?- no me tocaba con sus manos pero si con su voz y no tuve más remedio que contestar

-Si, las primera vez te recordé la segunda te imaginé y en la tercera te soñé entre mis piernas- estaba roja como un tomate de poderme ver seguro lo confirmaría.

-Pasé una noche entera imaginando tus piernas alrededor mío, ahora quiero ver lo que imaginabas de mi-

Me recosto en el sillón mientras me arrancaba el remeron que tenía puesto, sentí cambiar su respiración cuando me vio en ropa interior.

-Tócate para mi,Me dijo al oído y empezó a besarme el cuello y fue bajando hasta mis pechos mordiendo de a poco. Sin dificultad alguna me sacó el corpiño y se metió un pezón en la boca mientras me pellizco el otro, la sensación me provocó arquear la espalda e instintivamente llevé mis manos a su pelo pero a una la permitió a la otra la llevó a mi zona íntima que todavía estaba cubierta por la pequeña tanga que tenía.

No era una santa y desde mi punto de vista era algo natural conocerse a uno mismo, pero jamás lo había compartido con ninguna pareja o novio por así decirlo, me resultaba demasiado personal

Pero estaba poseída, esa era mi explicación

Por su voz, su boca y lo poco que había conocido en el avión
Así que no lo pensé dos veces y corri mi ropa interior a un lado para masajear mi zona erógena no era lo mismo no podía concentrarme y no sé a ciencia cierta si lo notó o no pero comenzó a morderme y a besarme de nuevo y mi mente se perdió en el toque de sus manos y mi cuerpo empezó a responder, en algún momento dejo de besarme para estar solo observandome, lo sentí pararse y sacarse el boxer que tenía puesto

Aún con los ojos cerrados podía sentirlo cerca, podía distinguir su perfume claramente, entonces no me fue difícil alcanzarlo. abri los ojos y la imagen que tenía sobre mi casi me manda al borde de mi clímax
su mirada estaba en mi y el imitaba los movimientos de mi mano en él.

Se acariciaba suave siguiendo mi ritmo,en el momento que llevó  la cabeza hacia atrás dejé de tocarme necesitaba sentirlo a él
estaba de cuclillas en el sillón  así que le saque la mano para reemplazarla con la mía

Sentí un gemido a través de su pecho, ambos nos mirábamos fijo y sin romper el contacto entendí lo que me dijo con sus ojos

Pase mi dedo por la punta primero, me iba a costar porque era más grande de lo que había sentido, sus venas palpitaban y estaba levemente inclinado hacia arriba. Lo metí en mi boca lo más que pude intentando a acostumbrarme al grosor ,lo sentía en  golpear en mi garganta así que fui lento
Pero dominante como era no me lo permitió, formo un nudo de pelo  con la mano y estableció el ritmo que el quería

Gimiendo fuerte me impulsaba hacia abajo con fuerza, pero quería imponer mi propia marca así que en una subida lo mordi lo suficientemente fuerte para no cederle todo el control y en lugar de dolerle lo enloqueció más.

Me apartó con fuerza y de un solo tirón me arrancó la tanga me subío al apollabrazos, de esa forma mi cabeza colgaba por un extremo. Me llevó hacia el que estaba en el borde y puso una de mis piernas en su cadera y otra en el hombro.

-Esto va a doler bebé, y vas a encontrar el placer en ese dolor.Mejor aún, va a encantarte- me dijo con la respiración entrecortada

Un segundo más tarde me penetró con fuerza que de no haberme agarrado del sofá me hubiese caído.

Dolía

Pero no era mentira, su ritmo feroz me hizo encontrar el placer aún cuando sentía el ardor por el tamaño y la fuerza

Y mi cuerpo empezó a relajarse y encontrarlo en cada embestida

empecé a moverme con él, a hacerle saber con mi cuerpo que lo estaba disfrutando tanto y más de lo que el pensó y me salió de forma natural.

El pedirle que se mueva más fuerte, gimio tanto que seguro lo habian escuchado en la habitación de al lado.

Verlo en éxtasis me llevo a un clímax único, me costaba respirar  con regularidad pero como pude le hable al oído

-Pierdete en mi sehun, dame lo que merezco-
Y aunque estábamos usando protección pude sentir su clímax en mi, me moví hasta que no quedo nada de él y nada de mi.

Después de un siglo que nos llevó recuperar el habla por fin lo escuché decir

"En verdad me tuviste en el cielo"

Esta es la parte lemonosa prometida 😙

                        Nos leeremos pronto 💕