Jueves, 7 de septiembre;
El verano ya casi ha acabado. Otro verano más, un interminable, insoportable, desagradable verano más. Mis padres discuten de camino a casa, como siempre. “La música siempre ayuda en estos casos.” me digo, introduciendo los auriculares en cada una de mis orejas.
La música retumba en mi ocupada cabeza, repleta de sentimientos. Miro el paisaje pasar por la ventana, veloz.
Mi hermana llora, ella solo tiene 3 años y no merece vivir lo que yo.
- Deja tu mierda de música de niña "deprimida" y haz caso a Emily. - Replica mi madre mientras hala mi auricular.
Hola, soy Mía y, si estás leyendo esto, significa que ya estoy muerta y buscas información sobre mi fallecimiento. Pues, aquí tienes, la historia de mi corta vida, empezando desde aquí. Toma asiento, coge unas palomitas, y lee.
