Capítulo 6

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Me acerque a Diego y le dije que se calmara, realmente por la cantidad de alcohol que había ingerido no tenia sus sentidos activos, empezó a botar cosas por todos lados, entre eso mi ropa y mis veladadores.
Mi padrastro lo agarró de los brazos y le dijo que se tranquilizara pero el realmente no hacia caso a nadie.

Entonces reaccionó de una terrible manera, deseando soltarse empezo a forcejear hasta que lo logro y queria ponerse a pelear con su amigo que según el me pretendía.
Lo siguiente que pasó fue muy desgarrador para mi, vi como salía de mi casa ensangrentado pero lo peor de todo la sangre no era suya

No lo volví a ver, me dolía demasiado mi corazón y mi madre con justas razones tampoco deseaba saber de él, en el colegio mis dias eran tristes pero pasables, intente de nuevo con chicos que cursaban a mi lado pero sentía que no eran para mi.
Pasaba el tiempo de diciembre ya estabamos en inicios de julio y en todo ese tiempo no habia escuchado ni su nombre.

Un dia, en la noche mi padrastro me llevo a ver un perro para su hija yo muy contenta lo acompañe, estabamos fuera de su lugar de trabajo y ya saliendo se dirige a lado de la calle y entra en un carro, miro detenidamente el carro hasta darme cuenta de quién era el que lo conducía, era él.

Enamorada de un hombre mayorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora