Bajo el brillo de una luna llena, bajo una pequeña lluvia, bajo la tenue luz de un atardecer, tu belleza sigue persistente, sin inmutarse, sin perderse. Esas dos pequeñas esferas color avellana ventanas de tu alma que solo abres a quien crees merecedor, me miran rigurosamente mientras presto atención, unas líneas finas curvandose en un pequeño gesto muestran esas perfectas perlas con las que me brindas luz, una capa espesa cae por tus hombros lo cuál me recuerda una hermosa noche un cielo obscuro, solitario, pero no vacío, llenas mi alma con tu escencia, la cuál impregnas en mi piel sin necesidad de contacto sin necesidad de palabras solo con la unión de un mismo espíritu.
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Impregnado
PoetryAlguien especial siempre está presente, aunque no lo tengas frente a ti