Segunda parte: fuego
Los magos con espectro de fuego son los hijos del sol,
son cigarrillos encendidos en un callejón con un chasquido
de dedos fríos, son velas de una noche de para siempres que
no se apagan hasta la mañana siguiente, son la calidez de una
familia reunida alrededor de una hoguera de otoño, son la pasión
de un corazón latiendo por alguien por primera vez.—••—
Habían acordado que se encontrarían en el montículo de tierra que había en el parque entre los edificios del laboratorio y el invernadero del campus. Decenas de pequeñas velas estaban dispuestas en el punto más alto del montículo, formando una espiral de tres brazos que se unían en el centro.
—Entonces —dijo Jongin, leyendo por enésima vez la pequeña libreta que Kyungsoo había llevado consigo—, el ejercicio consiste en sentarse alrededor de las velas y ver cuántas podemos encender por separado y luego en conjunto —concluyó.
—Parece fácil —dijo Baekhyun.
Pese a ser cerca de medianoche, tenía la misma picardía y vitalidad de siempre. Kyungsoo se preguntó de qué se sorprendía. Él, en cambio, lo único que quería era meterse en la cama y no tener que pensar en nada hasta la mañana siguiente, especialmente no en sus poderes.
—Seguro que no será tan fácil como parece —murmuró Kyungsoo.
Jongin alzó la vista para mirarlo. Baekhyun había empezado a comprobar las mechas de las velas que le tocaba tratar de encender a él.
—Vamos, hyung —trató de animarlo el más pequeño—. Es magia del espectro de fuego, a ninguno de nosotros se nos va a dar bien.
Kyungsoo trató de hacerle caso y de empaparse de algo de su optimismo, pese a que por dentro temía qué iba a pasar si no podía encender todas las velas y no podían completar el ejercicio por su culpa.
—¿Listos? —preguntó Baekhyun, que ya había terminado de comprobar sus velas—. Primero tenemos que tratar de encenderlas solos, ¿verdad?
Ambos asintieron. Kyungsoo enderezó la espalda y sujetó el prisma con fuerza, tarareando una incansable mantra de porfavorfunciona porfavorfunciona porfavorfunciona.
—A la de tres —dijo Baekhyun—. Tres, dos y...
Poco a poco, las velas se fueron encendiendo. Jongin consiguió encender tres, Baekhyun, cinco. Kyungsoo miró su única vela encendida, débil y tintineante con cada soplo de aire de medianoche, pero aun así encendida. Podría haber sido peor.
—Entonces, ahora —dijo Baekhyun, acercándose para soplar y apagar las velas—. Tenemos que hacer lo mismo pero dándonos las manos.
YOU ARE READING
Finis Terre (BaekSoo)
FanfictionPese a que Do Kyungsoo todavía no lo supiese, el segundo curso en la Universidad Nacional de Magia iba a implicar decisiones equivocadas, promesas rotas y más imprudencias de las que en ese momento podía imaginar. Pese a que Do Kyungsoo todavía no l...