Calidez

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Voz: ¿Vas a entrar o no ?

No veía nada, pero esa voz me resultaba familiar.

Voz: Eooo

Comencé a ver algo borroso, era... ¿Un chico ? Me estaba llamando.

Extrañamemente, comenzó a jugar con mi pelo.

Voz: Eyyy, ¿me vas a hacer caso ya ?

Comencé a ver mejor, me encontraba en un lugar extraño, parecía que estaba en algo parecido al cielo. Estaba sentada sobre una especie de suelo nube y alrededor de mi, tan sólo veía lo que me parecía el cielo azul de primavera y a ese chico. ¡ Yo lo había visto antes! Yo le había visto... pero no recordaba dónde... ¿Tal vez en la biblioteca ? No lo sabía pero los ojos verdes con puntitos azules expuestos bajo aquella vitrina de gafas de media luna me hipnotizaban con su belleza. Tenía el pelo rojo como el fuego... ¿Él era el chico que se encontraba en el sagrario? Me empujé hacia atrás increíblemente sorprendida.

Valery: ¿Y tú eres?

Chico pelirrojo: Oh! Venga, no hagas como que no me conoces...

Valery: Deja de tocar mi pelo.

Chico pelirrojo: Es que... Es interesante tiene tres colores.

Dijo él con curiosidad; como si a un niño pequeño le entregaras un caramelo por primera vez. Aparté sus manos de mi pelo y volví a sentarme más atrás.

Valery: Si, se llama tinte. ¿Quién eres?

Dije un poco asqueada.

Chico pelirrojo: Jo... ¿Por qué eres tan borde? Soy yo...

Valery: ¡A ver! No pongas pucheros. No se quién eres ni donde estoy. Deberías explicarme un poco. ¿No crees ?

Vi cómo su amplia sonrisa volvía a sus rosados labios.

Chico pelirrojo: Mira que eres cabezota -dijo riendo- y también un poco... ¿Cómo decirlo ? ¿Despistada ? Sí, despistada.

Empecé a pensar que este chico no sabía pensar para sí mismo. También demostró que era muy expresivo con su rostro.

Chico pelirrojo: A ver si te suena el sagrario de la iglesia.

Valery: ¡Oh!- dije llevándome las manos a la boca- ¿Ese chico eras tu? Hombre... Tu pelo... Es igual... Rojo... Como el fuego...

Tuve el especial deseo de revolverle el pelo, y obviamente no lo detuve. Despeinar a las personas era una obsesión que realmente me encantaba. Cuando pasé mi mano por su cabello sentí como algún tipo de calidez atravesaba mi mano esparciéndose por todo mi cuerpo. Era... Era como sentir que tu madre te abrazaba demostrándote inmenso amor y cariño. No sé; era una calidez que nunca antes había sentido pero que no quería dejar de sentir.

Valery: ¿Qué eres? ¿Por que me haces sentir así ?

Aparté mi mano de su cabello a continuación cubriéndola con la otra.

Nathaniel: Ohh... - su sonrisa había vuelto a desaparecer. Ahora me miraba con tristeza, con compasión...- Valery...

Toco mi mejilla quitando la lágrima que supuse que tenía cayendo por mi mejilla. Al notar que su tacto en mi mejilla volví a sentir aquella calidez. Me separé. Ahora sí notaba cómo las lágrimas calientes caían por mi cara sin control.

Chico pelirrojo: Nathy... Soy Nathaniel...

Basurilla 1 (? 🙈🙉🙊Donde viven las historias. Descúbrelo ahora