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Despertó con el desayuno en la cama. Sehun estaba envuelto en una de las suaves batas del hotel y cargando la comida del room service que probablemente costaba una pequeña fortuna. "Despierta, niño bonito. Ya son las diez".

Luhan gimoteo y luchó para sentarse. Sus ojos no querían mantenerse abiertos. Todo estaba adolorido. "¿Me despertaste antes de las once?" La camisa de Sehun amenazaba con deslizarse sobre uno de sus hombros cuando se estiró para alcanzar el plato.

"Usualmente no me levanto mucho después de las ocho. Tuviste suerte".

"Ugh, Dios, eres tan viejo" Frunció el ceño y apuñaló su omelet, que realmente olía increíble, y probablemente debería de ponerlo de un mejor humor, porque estaba jodidamente hambriento. Pero él también estaba jodidamente cansado y adolorido. La camisa de Sehun se pegaba a él de extrañas maneras. Hizo una mueca y metió comida en su boca.

La manera en que la bata de Sehun se abrió, revelando una V bien pronunciada, piel suave, instantáneamente hizo que Luhan se despertará incluso más de lo que la comida lo había hecho. "¿Abriste la puerta vestido así?"

"¿Así como? "Sehun parpadeo lentamente y tomo un poco del omelet.

"Indecente. Quiero decir anoche tu cabello desordenado por el sexo se veía realmente caliente pero esta mañana solo luces como mierda".

Sehun rió y tomó un gran sorbo de café como alguien que lo hacía muy seguido. "Cuando termines tu desayuno, podemos ducharnos y arreglar mi cabello".

Oh, ducharse. Luhan metió un par de pedazos más en su boca mientras Sehun descansaba sobre las suaves sábanas blancas y aun así se las arreglaba para comer su comida con dignidad. Luhan se dio cuenta de que en realidad no había visto al hombre a la luz del día hasta ahora. El sol de la mañana suavizaba su aspecto de alguna forma, convirtiéndolo en una especie de figura amable pero noble, en lugar de intenso. Quizá era solo el extraño cabello que lo hacía lucir menos formidable.

Luhan terminó su comida, pero todavía no quería dejar el blanco paraíso. Las sábanas eran suaves, el edredón era grueso, las almohadas eran esponjosas, y el colchón debajo de su trasero era demasiado profundo. Él sentía como si alguien lo hubiera lanzado en un caro nido blanco y esponjoso.

"Nunca voy a dejar esta cama".

"¿Oh enserio?"

"Demasiado cómodo. Solo me quedaré aquí hasta que muera de hambre y tengan que sacar mi cuerpo"

"Como quieras" Sehun le dedicó una sonrisa juguetona, se deslizó fuera de la cama y a pasos largos se dirigió al baño, dejando que la bata cayera de sus hombros y luego al suelo en el camino. Había suaves líneas rojas cruzando sus anchos hombros donde Luhan lo había arañado la noche anterior. Su tarsero era redondo, tonificado y fantástico, y Luhan quería apretarlo un poco más. Desapareció en el baño y Luhan escuchó que el agua comenzaba a correr.

"Maldita sea"

Las rodillas de Luhan se rindieron tan pronto sus pies tocaron el suelo. No era que no pudiera pararse. Él solo no esperaba que le tomara tanto esfuerzo. Había sido algo descuidado con el ejercicio durante la semana de finales, así que su cuerpo no estaba ni remotamente preparado para cerca de tres horas de sexo con Sehun. Hablando de él, Sehun apareció en la entrada, lucía preocupado, y se apresuró a levantarlo del suelo.

"¿Estas bien?"

"S-sí" Su sonrojo era muy fuerte otra vez.

"Si te hace sentir un poco mejor, estoy un poco adolorido también. Prometí que te partiría en dos"

worth every penny ♡ hunhan [trad]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora