3. Quiero ir

16 3 2
                                    

 

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

 

Cuando te sonríen antes de irse,
te dan una impresión
errónea de lo que pasará


Unas voces... Escucho a Padre y Madre.

— ¿Y ahora que vamos hacer?

— ¿En serio? Tenemos que regresar y volver a tomar las riendas— Padre se escucha fastidiado— ya lo viste mujer, la herida de tu cabeza solo muestra los indicios de lo que se viene. Tenemos que detenerlo.

— ¿Nosotros? Viste como nos acorralaron, recuerda quién evito aquel ataque que iba hacía tí y ahora quién esta herida, no podemos hacerlo nosotros dos.

— No te preocupes, habrá más.

— ¿Cómo estás tan seguro?

— Confía en mí.

¿Qué está pasando? ¿A dónde piensan volver? ¿A ese lugar? Es peligroso, ¿por qué hay que ir de nuevo?

— Está bien— se van a ir de nuevo y yo no puedo hacer nada para detenerlos— pero, nos llevaremos a nuestra hija.

— No.

— Te lo suplico.

— La niña no está preparada para eso. Regresaremos cuando todo acabe.

— ¿Y qué tal si algo le pasa? No soporto cuando nos vamos y la dejamos aquí, ella ya está grande, creo que merece saber qué es lo que hay más allá. Vendrá con nosotros.

— ¿Te cres capaz de soportar si ella se desmorona frente a tí? Sí es así, adelante.

— ... Quiero que esté segura.

— Lo estará... La vamos a despertar y le diremos que volveremos.

— ¿Ahora?

— Sí.

No. Si se van a ir de nuevo no quiero abrir los ojos, si eso significa que me dejaran aquí de nuevo, no lo haré. No vayan, estoy asustada... ¿Qué es esto que salen de mis ojos? ¿Por qué mi rostro se siente así?
Mueven mi cuerpo y me llaman pero, no quiero despertar. Tuirts deurtus.

— Tuirts deurtus.

Todo se ha vuelto de ese color y silencioso.

— ¿Hija? — entrecierro los ojos— Ya está despertando ven.

— ¿Ya? — Padre se acerca y se sienta a mi lado, entretanto yo intento no irme de nuevo contra el suelo— Mírame hija— me agarra con delicadeza el rostro, sus ojos me miran con atención y luego su expresión cambia— ¿Aplicaste un hechizo?

— ¿Un hechizo? — asiente. Recuerdo cuando dije esas palabras que aparecieron en mi cabeza y luego caer en ese lugar pero, ¿Hechizo? ¿Qué fue lo que hice? Niego— No... ¿Qué es un hechizo?

— ¿Fuiste tú?— voltea a ver a Madre— ¿Qué intentas?

— ¿De qué hablas? Estuve todo el tiempo contigo y herida, no tuve tiempo de hacerlo.

— ... Discutimos esto sobre nuestra hija, ya te dije que ella se va a quedar aquí, si hiciste eso para tener un contratiempo.

— ¡No hice nada! ¡Estaba herida!

— ¿A dónde van?— Padre y Madre me miran con atención— ¿Padre?

— No vamos por poco tiempo.

— ... Quiero ir.

— ¡¿Sabes qué?! — voltea y ve Madre enfurecido— Explícale, necesito respirar... Vengo por ti luego.

Aquella figurara apareció de nuevo, Padre camino firme y la atravesó.

— ¿Madre?

Madre se queda viendo el lugar donde aquella figura ha desaparecido. Cierra los ojos y respira, me acerco un poco y noto algo raro en su rostro. Abre los ojos de golpe y yo me hecho para atrás.

— Hija, no tengo mucho tiempo, así que escúchame,— me sujeta de los hombros y mira de nuevo a ese lugar— las cosas están empeorando, tenemos que regresar, esta vez no te aseguro que volveremos en poco tiempo, los... Tenemos problemas, iremos y arreglaremos todo.

— Quiero ir.

— Es peligroso.

— ¿Y por qué van si lo es?

— Es algo complicado de explicar... Es nuestro deber.

— No quiero estar sola.

Sus ojos se entrecierran y algo empieza a salir de ellos, inclino mi cabeza confundida y Madre me rodea con los brazos.

— Mi pequeña.

¿Qué es lo que tiene? Le está pasando lo que me pasó exactamente a mí hace poco. ¿Es malo? Quiero saberlo.

— ¿Qué tienes?— toco su cabello— ¿Qué es lo que sale de tus ojos?

— Estoy triste... Son lágrimas.

— ¿Lágrimas?

— Estoy llorando.

— ¿Por qué?

— Siento que pierdo algo y a la vez que algo se produce.

— ¿Eso es posible?

— Completamente.

Madre se limpia las lágrimas y me mira fijamente para después levantarse y hacer que esa figura aparezca de nuevo.

— Madre— se detiene— ¿Al menos antes de que te vayas, me dirás más cosas? Algo lindo de allá... No quiero quedarme sola.

— ...— sonríe y esa figura desaparece— Te diré todo lo hermoso pero, necesito que prometas algo.

— ¿Prometer?

— Prometer es cuándo te diré que hagas o digas algo, sin importar lo que harás, lo cumplirás, porque es tu obligación y estás de acuerdo con eso.

— Suena hermoso... Prometer.

— Lo es, pero, es complicado no romperlo.

— ¿Por qué?

— Ya lo sabrás.

En este momento, sin importar lo que Madre me pida prometer, sé que es muy difícil; lo veo en sus ojos. Sonríe ampliamente y después mi vista se empieza a nublar por completo, ¿Qué está pasando? En esto no habíamos acordado, yo no cedí ante esto. ¿Madre? La sensación de como abrazan mi cuerpo, me cubre.

Promete no desaparecer frente a mis ojos, que no harás nada impulsivo por los sentimientos y emociones que llegaras a sentir, prométeme no seguirnos.





— Promete no desaparecer frente a mis ojos, que no harás nada impulsivo por los sentimientos y emociones que llegaras a sentir, prométeme no seguirnos

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Gracias por leer.

Imaginación al borde, cariño.

Acabados.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora