🐰;7

261 27 3
                                    

Pov's Jungkook.
Abrí mis ojos, me encontraba en la camioneta en la cuál habíamos llegado antes. Estaba algo triste, odio no poder hacer las cosas perfectas.
Taehyung fue quien me consoló cuando más lo necesitaba y realmente estoy agradecido.
-¡El niño despertó!- gritó Namjoon en forma divertida para luego revolver mi cabello, lo cual me hizo reír.
-¿Cómo te sientes?- preguntó algo preocupado Yoongi, se podía notar en su rostro.
-B-bien- respondí tímidamente-. O eso creo- susurré.
-¡Lo hiciste perfecto, Jungkook!- habló con una sonrisa Hobi.
-Gracias, hyung- sonreí, me estaba ayudando que hablen y me animen un poco-. Tú no estás atrás- hablé para luego soltar una pequeña risa.
-¡Gracias, gracias!- habló de forma divertida.
Todo el camino a casa la pasamos hablando, de verdad me estaban subiendo los ánimos. Solo no escuchaba a Taehyung en ningún momento, ninguna risa o tipo de vida.
-¿Taehyung está vivo?- pregunté esperando a que me contestara.
-Está durmiendo, por eso no da síntomas de vida- rió Yoongi.
-Estaban dormido juntos en el sillón, realmente no sé lo que pasó allí, pero cuando lleguemos a casa, me contarás- me susurró en el oido mi mejor amigo.
Rodeé los ojos en forma de respuesta, no tenía demasiadas ganas de hablar por lo que pasó en el show, pero haría un intento por él.
Miré por la ventana buscando algo que llamara mi atención, pero solo se podían ver autos, personas y edificios. Saqué mi celular y me puse los auriculares para escuchar música, una canción lenta y tranquila sirvió para este largo camino de vuelta a casa. Varios pensamientos vinieron a mi cabeza, pero el que más tome importancia es que Taehyung contestó mi carta y debo responderle. Una sonrisa apareció.

[...]

El coche paró en una estación de servicio, haríamos algunas paradas para descansar de este viaje del cual todavía quedan horas. Todos (excepto Taehyung) bajaron del coche a saber qué harían. Yo decidí quedarme, no tenía ganas de bajar. Me saqué mis auriculares y suspire pesadamente, ¿Mi día podría mejorar en algún momento? Era lo único que quería, que algo mejore este mal día.
-¿Chicos?- habló alguien con voz dormida.
-Los chicos se fueron a estirar las piernas, comer o ir al baño- contesté-. Pero estoy yo- reí ante aquel tono que lo había dicho.
-Esta bien- habló para luego pasarse a mi lado-. ¿Cómo estás?- preguntó con una pequeña sonrisa.
-Mejor- miré de nuevo a la ventana-. Gracias, Taehyung- hablé sin despegar mi mirada.
-No es nada, sabes que estoy aquí para lo que necesites. Soy tu hyung y debo ayudarte- contestó con aquella voz gruesa.
-Lo sé- respondí en un leve susurro.
«Por eso te amo» pensé. Ojalá pudiera decírtelo, gritarlo a medio mundo que me haces feliz. Pero no es posible y espero que algún día, tenga el maldito valor de mirarte a la cara, para que mi boca se mueva y de ella salgan aquellas palabras.
-¿Ya sabes quién es el chico de las cartas?- pregunté cortando el incómodo silencio y volviéndolo a mirar.
-No, pero sospecho de varías personas. No sé si será algunos de los miembros o alguien del staff- respondió para luego suspirar-. Es raro sospechar de ustedes, estuvimos tantos años juntos que es difícil pensar que quizás alguno guste de mí. Y del Staff... Nunca lo pude imaginar- habló jugando con sus dedos.
-Me puedo imaginar lo confundido que debes estar- respondí con tranquilidad. Por un lado me daba lástima verlo tan confundido y sospechando de cada chico, pero por otro, simplemente me pone tranquilo que no sospeche que soy yo.
Sin decir una palabra más, los chicos subieron de nuevo al auto. Solo faltaba el chofer, así que aproveché y me fui al asiento donde estaba antes Taehyung, estaría solo y podría escribir la carta tranquilo.
Los demás chicos se reían y hablaban, mientras yo sin llamar mucho la atención tomé mi mochila, sacando la carta, una lapicera y mi cuaderno de IronMan.
Era normal que muchas veces este aquí atrás solo hundido en mi propio mundo, los chicos lo saben. Muchas veces me siento aquí y escribo canciones, dibujo o simplemente no hago nada. Así que preocuparme por escribir la carta, no era exactamente algo que tenía en mente a toda hora.
Leí aquella carta que Taehyung había escrito con sus propias manos y no podía dejar de sonreír, suena estúpido, pero cada simple palabra hace que una mínima sonrisa aparezca de repente.
"Querido hyung;
Quizás suene algo estúpido, pero me alegra que ya no este enamorado de aquella persona. Mi pequeño y entregado corazón dolió cuando leí aquello.
Estoy seguro que amaran el álbum, como yo ame demasiado Singularity y quedé fascinado ante aquella grabación.
¡Mucha suerte en su día, TaeTae!
-J.J"
Cerré mi cuaderno guardándolo junto con la lapicera y la carta de Taehyung en mi mochila. Estaba más tranquilo de haber podido escribir la carta, solo queda llegar a casa y dejarla en su típico lugar.
Un raro sonido hizo que todos nos miráramos entre nosotros, para luego darnos cuenta que el coche poco a poco perdía velocidad.
-¿Dong-san?- habló Namjoon con una voz un poco preocupada-. ¿Qué está pasando?- preguntó de la misma manera.
-Parece que el coche esta fallando, haremos una parada en una estación de servicio para ver que sucede, no se preocupen- explicó trasmitiendo de manera tranquila.
Y así fue, a la estación de servicio más cercana paramos. Todos bajamos del coche por seguridad. Al parecer, nada podía mejorar mi día. El coche se averió y no teníamos manera de llegar a casa, quedaríamos varados durante un largo tiempo hasta que alguien nos lleve o el transporte sea arreglado.
-Llamaré a la empresa- habló Nam yéndose lejos de nosotros, imagino para escuchar mucho mejor.
Decidí entrar en las típicas tiendas que hay aquí, donde se puede sentar a comer o a descansar de un largo viaje.
Así que me dirigí hacia aquellas mesas para luego sentarme y suspirar. Se podía notar que estaríamos varias horas hasta que el coche se arregle.
-Ahora que tenemos tiempo, debes contarme que pasó ahí- habló mi amigo sentándose enfrente mío.
-Nada fuera de lo normal Jimin- suspiré-. Sólo decidió consolarme por lo que pasó en el show, me sentía realmente mal y él solo ayudo- sonreí inconscientemente.
-Realmente ambos se aman demasiado- sus ojos ya no se podían ver de lo mucho que sonreía.
-Que cosas dices, hyung- miré al gran ventanal-. Él solo es así con todos, no es posible que tenga ese amor especial en mí- dije algo desanimado. Me paré rápidamente y me dirigí al baño.
No sabía bien porque vine a aquí, quizás para olvidar la verdad y no llorar delante de mi amigo. Mojé mi cara y me miré al espejo esperando tranquilizarme rápidamente.
Volví a la mesa donde mi amigo ya no se encontraba. Sentí cierto alivio al respecto, no quería más preguntas o algo por el estilo.
Mi celular vibró dejando ver una notificación; “Tienes un mensaje de TaeTae💕”.
Rápidamente y sin pensar mucho, abrí el mensaje.

Ojalá esa fuera la verdad, que no pensara en tí en todo momento, que simplemente no me gustaras

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Ojalá esa fuera la verdad, que no pensara en tí en todo momento, que simplemente no me gustaras. Pero no, te amo más que a nada en el mundo, eres dueño de mis sueños y pensamientos, podría decir que hasta de mi vida. Eres quien me vuelve loco con cada cosa que haces, que seas tierno y cariñoso conmigo me hace morir de los nervios, me hace querer besarte y decirte todo lo que siento. Pero ya sabes, el miedo es más poderoso.

La media hora me molesta, me llena de ansias de llegar a casa y poder dormir

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


La media hora me molesta, me llena de ansias de llegar a casa y poder dormir. Quiero acurrucarme en mis frazadas y pensar en cosas de la vida, escuchar música o solo estar ahí, acostado. Me siento vulnerable en este momento, lo del show ya pasó. Fue un error que tuve, como cualquier otra persona. Pero, me siento así por algo que no sé decir o explicar que es.
–¿Quieres papitas?– me ofreció papitas de su bolsa las cuales tomé.
–Gracias– sonreí.
–De nada, Kookie– se sentó en frente mío, dejando la bolsa en medio de la mesa–. ¿Qué te sucede?– me miró atentamente, esperando alguna respuesta.
–Muy pronto lo sabrás, Taehyung. Este no es el momento de decirlo y estoy resolviendo nudos en mi cabeza que no me dejan avanzar. Tan solo... No insistas– sonreí intentando sonar serio y seguro.
–Esta bien, cuando quieras puedes contarme– volvió a llevarse papas a la boca al igual que yo.
Miré al ventanal porque RM nos hacía seña de que vallamos donde él. Le avisé a Taehyung y rápidamente fuimos. El auto había llegado.

❝ Querido Hyung ❞ || TaekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora