Cap 1

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Es normal sentir miedo pero en este momento no podía pensar en eso lo único que sentía era terror.

El de la campera amarilla se acercó a mi amenazante,yo estaba contra la pared sin poder hacer nada pero una idea fugaz y estupida pasó por mi cabeza pero en ese momento creí que sería una gran manera para salir de esa situación.
-y dime qué es lo que quieres ? -dije con la voz titubeante por el miedo.
El de campera no respondió ni tampoco movió ni un solo músculo de su cuerpo solo se podía escuchar su respiración y mis latidos acelerados por el miedo que llenaba cada célula y poro de mi cuerpo.
Todo pasó muy rápido lo único que vi es un puño directo a la cara del hombre que me apresaba contra esa helada pared y luego vi todo negro.
~
-O no que que te a pasado entupida? -reconocí esa voz al instante era Mía mi mejor amiga.
Me pase las manos por la cara intentando acostumbrarme a la luz blanca segadora y automáticamente me di cuenta de dónde estaba , estaba en el hospital pero la pregunta era ¿cómo había llegado al hospital? ¿Me había traído el desconocido que me salvó? Ninguna de esas preguntas tenía sentido ahora.
-Que me ha pasado ? -pregunte con una voz ronca ya que no había hablado por mucho tiempo y el frío también había afectado a mi garganta.
-No lo sé con exactitud solo sé que un chico te a traído -dijo mi amiga subiendo y bajando las cejas haciendo entender que quería saber de quien se trataba.
-Y sabes quien es ese chico ¿le has visto la cara? -pregunte curiosa pero con un aire de interés palpado en mi voz.
-No, le he preguntado a las enfermeras pero lo único que me han dicho es que traída un buzo rojo y una gorra negra que tenía la palabra "sinners" bordada-dijo ella como si fuera de el maldito FBI.
-A claro y eso me dice quien es de todos modos en donde están mis padres ? -pregunte un poco preocupada.
-ellos no han llegado todavía ya que estaban fuera de la cuidad.... (por asuntos del trabajo) termine su frase y ella rodó los ojos con un aire de cansancio.

Luego de hablar con las enfermeras,pude por fin salir de allí de alguna manera o otra no me gustaba ese lugar.
-quieres pasar a tomar un café? -pregunto mi amiga mientras intentaba abrir la puerta de su auto
-bueno no tengo muchas ganas pero esta bien -dije con la voz un poco rasposa por el cansancio.la verdad era que no quería ir pero bueno me serviría para despejarme un poco de esta rara situación.

Cuando llegamos a la cafetería nos pedimos cómo siempre un frapuchino de esos que sirven para hablar de todo y te alientan a seguir con la vil rutina diaria.

-eee..por qué estás con esa cara ...? -pregunto mi amiga con un aire de interés en su voz.

Yo no sabía la respuesta a esa pregunta lo único que tenía en la cabeza era un recuerdo un tanto extraño,podía recordar una cara muy blanquecina tanto como la sonrisa que llevaba plasmada en ella. Más preguntas invadieron mis pensamientos como olas y olas de preocupación pero acompañadas de una pequeña pisca de curiosidad.

-nada ... nada -dije algo cortante pero sin ser hiriente ya que sabía a la perfección el pequeño problema de sensibilidad que tenía Mía.

-ey sabes que puedes contar conmigo y contarme todo ,sabes que no me creo una mierda el cuentito que le dijiste a esa enfermera-Dijo ella con preocupación pero por sus ojos pasó una pizca de algo parecido al miedo.

-bueno ... ciertamente no estoy de humor para hablar de ello -no quería decirlo ya que sino eso sería admitir que todo fue real y que ese "alguien" que me llevo al hospital también.

-de acuerdo-dijo mi acompañante no tan convencida y tratando de restarle un poco de importancia al asunto.

-Ajá-dije mientras acercaba el pequeño recipiente humeante a mis labios para beber un pequeño trago intentando no resultar quemada en el intento y como siempre mis intentos fallaron por completo.

Al ver a Mía puede notar que no traía puesto su característico pero de mal gusto collar esto me resultó extraño ya que fue un regalo de su padre antes de irse a vivir a corea por trabajo.

-mia ...-dude antes de continuar con la oración,ella dirigió su vista hacia mi-bueno ... puede que me allá percatado que no tienes ese collar que te dio tu padre -dije y ella me miro con una cara de extrañeza para luego colocar su mano a la altura del cuello y papear la zona para darse cuenta que efectivamente no estaba allí.

-o mierda y más mierda-dijo para luego ponerse como una maldita desquiciada y buscar en todas partes de la pequeña cafetería.

-ey tranquila lo encontraremos juntas -dije para tranquilizarla un poco por qué realmente parecía que estaba a punto de colapsar en un ataque de nervios.

-está bien... -dijo antes de romper en llanto a lo que yo reaccioné dándole un pequeño abrazo ya que ella sabia que odiaba tener contacto físico de ese tipo.

Estaba pensando cómo hacer para recuperar el collar,hasta que me acorde que cuando estábamos en el hospital ella si lo tenía en su pequeño cuello.

-Mía hay que ir al hospital-ella tardo en responder unos segundos.
-si claro por qué cuando estaba contigo.... yo lo tenía-dijo pensando.

Tome mis cosas y me encamine a la puerta para posteriormente abrirla y chocarme con el frío aire de un tenue atardecer,Mía se colocó su estupido sombrero haciéndola parecer un puto hipster cosa que ya ni siquiera está de moda.
-súbete al auto hace mucho frío como para caminar -dijo Mía antes de abrir la puerta del copiloto y subirse.

-está bien no tengo otra opción-dije antes de que un pequeño escalofrío me atacara este subió rápidamente por toda mi espina dorsal.

Al subir al auto me mantuve en silencio mientras miraba por la ventanilla.Afuera la gente entraba a los cafés, tiendas o cualquier lugar que tenga calefacción para poder calentarse por unos pequeños minutos.

Al llegar al espacio de aparcamiento del hospital,Mía estacionó en un lugar cerca de la entrada del lugar para luego hacerme una seña para salir. Al entrar al lugar una ola de calor y el característico olor a hospital me inunda y una mala vibra se extendió por todo mi cuerpo. no me gustaba este lugar para nada la gente que vienen aquí tiene dos destinos,una salvación con una vida por delante o algo mucho más cruel pero real una muerte fría dolorosa o no pero muerte en fin.

-ey prestamente atención te estoy hablando-dijo una Mía con el ceño levemente fruncido.
-déjame yo iré a buscar tu absurdo pero importante collar-dije seca para luego dirigirme a la habitación 234 que era en la que yo me encontraba horas antes.

Al llegar la puerta estaba entreabierta así que decidí entrar sin previo aviso topándome con un pequeño resplandor en el suelo,era ese maldito collar lo recogí y me digne a salir de ese maldito y condenado lugar lo antes posible.Al estar afuera mire por el pasillo blanco con esos malditos bancos típicos de un maldito hospital ,al voltear al lado derecho vi un buzo color rojo intenso y una gorra era un chico de tez blanca y cabello oscuro. Antes de poder reaccionar ya estaba corriendo en su dirección el chico al darse cuenta corrió  rápidamente y dobló por un pasillo y luego por otro y otro más hasta que lo perdí de vista.

Mierda estoy demasiado cansada maldita sea. ¿Por que corre? ¿Está huyendo de mi?¿o solo lo hizo como defensa? al ver a una estupida correr tras él como una desquiciada.

Al seguir por el pasillo me encontré con una gorra negra en el frío suelo.
En ella se encontraba la maldita frase bordada "sinners" con una bonita letra gótica.

Mierda mierda y más mierda -pensé mientras buscaba a Mía.

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BUENO ESPERO QUE LES ALLÁ INTERESADO EL CAPÍTULO .

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