La hora de educación física había terminado y Tweek no podía con sus nervios. Dio un fuerte suspiro y volvió al gimnasio.
Quizás aquel chico lo esperaría allí, y así fue.
Se sentó en el suelo abrazando sus piernas.
—Sabia que vendrias, Tweek—Una voz sumamente ronca resonó por aquel espacio cerrado.
El mencionado alzo su vista y finalmente se topo con el chico de los jugos.
—¿C-Craig?—Preguntó con una gran confusión.—¡C.T! Con razón, como no pude darme cuenta.
—Craig, o el amor de tu vida como quieras decirme esta bien—Bromeó al estilo McCormick, sintió pena de si mismo en esos momentos.—Tweek, me gustas.
El pobre rubio no pudo con los nervios y se desmayó.
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—¡Oh dios! Casi matas a tu pobre novio—Bromeó a lo lejos una voz conocida para el desmayado.
Era Kenny quien moría de risa ante esta situación. Tweek abrió los ojos y dirigió su mirada hacia Craig quien no dejaba de observarlo.
—¡T-tu también me gustas!—Soltó de repente, mientras le dedicó una tierna sonrisa.
Kenny no podía de la emoción, antes de salir del gimnasio, grito a todo pulmón.
—¡El creek es real!
—Pero el Bunny no—Dijo frívolo el de ojos azules.
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Bueno che, acá termina juice, tarde bastante en terminarlo. Pero espero que les haya gustado.