Yo, el adolescente lobo [EDITANDO]

V. ¡¿Qué me pasa?!

-hijo comete todo, hoy día pasaste un mal rato, necesitas comer algo- dijo mi madre preocupada.-lo siento, pero no tengo hambre, creo que pasó-
Dicho esto me pare, acomode la silla y fui directo a mi habitación,ya costado empecé a sentirme raro, no podía dormir,me levante me dirigí a mi ventana.
-vaya...hoy es una bonita noche, aparte, hay luna menguante, lo qué es la guinda del pastel-

Derrepente, algo raro me pasó, sentí como qué me atravesaran con una flecha gruesa y filosa, el dolor que sentí fue horrible como si estuviera muriendo, acto seguido sentí cómo mis orejas desaparecían, se sentía como hierro cortante recién sacado de la fragua, sentía qué mis ojos cambiaban, el pelo me crecía sin orden alguno,sentía qué mi garganta se hacia un poco más grande, debido a esto no podía gritar por ayuda solo podía retorcerme de dolor.
-Ma...Dre...ayu..da..-
con fuerza de voluntad intente arrastrarme hacia la puerta.
Cada vez qué ponía una mano adelante veía como crecía las uñas. justo cuando había llegado a la puerta él dolor paró, debido a esto me quede sin fuerzas, intente levantarme y abrir la puerta. la logre abrir y, acto seguido, me arrastré para abajo.

Justo cuándo estaba arrastrandome, el dolor volvió a empezar, pero esta vez fue de la cadera para abajo,intente gritar, y, esta vez podía, pero mi voz no era aguda, era muy grave, con el dolor atravesado y el miedo seguí gritando hasta qué mi madre se despertó.
-hijo...porqué gritas sin son las 12:30 de la noch...-
-mMamA,AyUdAMe PoRFavOr

Mi madre presenció el voraz acto qué estaba sufriendo.

(Narra la madre)
Prendí la luz y Vi a mi hijo, tirado en el suelo, con voz de pubertoso,con mucho pelo en la corona de la cabeza,con garras en vez de uñas y una cola desarrollándose detrás de el.
Yo sin saber que hacer, lo subí al sillón y fui rápidamente a buscar agua fría y un paño.

(Narra Luke)
Tengo miedo, mi mamá salió
Corriendo a no se qué, no se qué hacer no puedo pensar-AGH, AYUDAAAAA- ,mi madre volvió con un cubo con agua y un paño mojado, me lo puso en la frente y me empezó a decir qué: "todo estará bien"
"No te preocupes, yo estoy aquí".
Después de un rato los dolores se han ido aliviando, me calme y deje de gritar, ahora estaba respirando rápidamente, aliviado de qué acabó mi tortura.