Phoebe Young.
-Madre-digo mientras bajo las escaleras y observo el living desde unos escalones arriba.
-¿Cómo amaneciste, hija?- pregunta mientras acomoda los platos de comida en la mesa. Al instante mis pies tocan la primera planta. Suspiro. Me sentía como siempre, aunque algo me decía que esto no iba a seguir así por el resto del día.
-Bien-respondo con una sonrisa. Es la verdad.
-Eso es bueno.- me observa por un segundo.- Ahora sientate a comer que se hace tarde para el colegio.- camino hasta donde se encuentra aún con la mochila en el hombro.
El desayuno consta de panqueques y una taza de leche con cafe.
Entre conversaciones triviales, silencios breves y miradas algo raras de mi progenitora, termino de comer rápido. Debía de ir a la escuela.
-¿Estarás bien, verdad?.- cuestiona mi madre y su pregunta me descoloca por unos segundos.
-Supongo- mi voz sale baja, y recompongo mi postura. Un extraño sentimiento se había concentrado en mi estómago luego de aquello, y eso no me agradaba.
-Cuidate, hija-una sonrisa se dibuja en su rostro. Frunciendo el ceño me despido de ella, y minutos después, puedo asegurar que he llegado con bien a la preparatoria, al menos.
•
Apenas llegó a la escuela, casi que obligó a mi cuerpo a correr hacia el salón de Historia. Hoy era lunes, y mi horario este día no era de los mejores, no cuando los cursos de por sí eran pesados, y lo eran aún más con los estrictos profesores que impartían las asignaturas.
Sumergida en mis pensamientos y trotando frente a unas miradas curiosas, un sonido en seco detiene mi andar bruscamente, y al segundo un cuerpo choca contra el mío. Bufo. Que cliché es todo esto.
Poniéndome de pie recojo mi mochila, me sacudo y miro a la persona con la que cruzado en este pasillo.
-Disculpa- la fémina frente a mi evita mirarme a toda costa, probablemente por la vergüenza.- Lo lamento, fue mi cul-
-No hay problema- mis palabras detienen las de ella y por primera vez en varios segundos, o tal vez minutos, sus ojos se cruzan con los míos. Verde.
-Lo siento.- recoje el último de sus libros rápidamente, y sin siquiera dejarme responder, retoma su camino, perdiéndose entre los pasillos y algunos alumnos que aún no ingresan a clases. Frunzo los labios.
Si me preguntaran, podría asegurar que ahora en mi estómago vuelan todo tipo de animales. Sobre todo mariposas. Pues, al ver los orbes de aquella muchacha, mi nerviosismo solo había aumentado, dejándome intranquila.
-Rayos- tratando de restarle importancia retomo mi andar, y ruego porque la profesora no me haga pasar vergüenza esta vez, porque la culpa no había sido completamente mía, sino también de aquella chica de cabello castaño y ojos esmeralda.
Cuán equivocada estaba al pensar que no volveríamos a toparnos.
Aclaración: Los primeros capítulos serán cortos a comparación de los siguientes.
ESTÁS LEYENDO
𝘰𝘣𝘴𝘦𝘴𝘴𝘪𝘷𝘦; 𝘮.𝘨
Fanfiction«Ella era mi salvación y yo su perdición » #06 en etiqueta: Martin Garrix Sin editar los primeros capítulos. Copyright ©itsdalcx- au (universo alternativo) ®Queda totalmente prohibido copiar o adaptar esta historia sin mi consentimiento, de lo cont...