Through the dark (Harry Styles)

3.

Tras un largo rato de espera para recoger el equipaje, nos dirigimos hacia el taxi que nos llevaría a "casa".

Las preguntas asaltaban mi cabeza: Seguirá todo igual, tal y como lo recuerdo? Lo dudo, 6 años dan para muchis cambios, y si no que me lo digan a mí que he vivido en 7 paises en 6 años.

Tras 15 minutos de viaje en el taxi todo era un poco más familiar, las casas comenzaban a parecerme familiares. Reconocí un par de tiendas y restaurantes que solíamos frecuentar.

El taxi fue frenando lentamente según nos acercábamos a nuestra "casa", para finalmente aparcar frente a ella.

Salí del taxi para coger mis maletas y subir a la que un dia fue mi habitación. La panta baja estaba tal y como la recordaba, parecía como si no hubiese pasado el tiempo.

Ignorando todo aquello subí a mi habitación. Exactamente como la dejé. Cada una de mis Barbies perfectamente colocadas, las paredes terriblemente rosas y todo como de princesita, si que cambian las cosas en 6 años.

"Wow..." La voz de Liam me saca de mis pensamientos. "Parece que un unicornio ha vomitado tu habitación, dios mío no recordaba que fueses tan.... rosita." Dijo riendo haciendo que una pequeña sonrisa escapase de mis labios.

"Parece que hace siglos de esto cuando solo fue hace 6 años.." Dije soltando un largo suspiro.

"Buddy!!!" Exclamó mientras corría hacia la habitación para coger el pequeño muñeco que descansaba en el suelo. "Creí que lo había perdido en el aeropuerto al irnos." Dijo estirando de la cuerda del muñeco 'Hay una serpiente en mi bota..' era la frase que decía.

"Lo que yo decía, nada ha cambiado." Dije riendo.

"Voy a ordenar mis cosas, te veo luego enana" Dijo revolviéndome el pelo, gesto que odiaba.

No me sentía con ánimos de ordenar la maleta, y mucho menos de quedarme allí encerrada con todos aquellos recuerdos, así que decidí ir a dar un paseo.

"Mamá!" Grité mientras bajaba las escaleras.

"Qué pasa?" Su cabeza se asomó por el marco de la puerta que daba al salón.

"Voy a salir a dar un paseo, necesito estirar las piernas."

"Está bien, pero ven antes de las 8, pediré algo para cenar." Dijo volviendo a su tarea de desempolvar todos los muebles.

Cogí unas llaves y mi móvil y comenzé a caminar sin un rumbo fijo, fijándome en cada casa y reconociendo muchas de ellas como en las que vivían mis amigos de entonces.

Recordé que a unas cuantas calles de la mía había un parque al que solíamos ir todos los niños del vecindario. Decidida a revivir dulces recuerdos de la infancia me encaminé hacia allí, pero para mi sorpresa ya no estaba. En lugar del precioso parque en el que jugaba había un par de pequeños edificios, no demasiado altos, y a medio construir.

Quién sería apaz de haber quitado ese parque? Nos gustaba a todos, lo recuerdo perfectamente. Gente de todas las edades acudía a él y el vecindario estaba más unido gracias a él.

La ira estaba empezando a tomar el control en mí, por lo que decidí dar la vuelta y volver a casa antes de enfadarme más aún.

Justi cuando me daba la vuelta choqué con alguien y caí al suelo.

"Ehh..." Protesté desde el suelo.

"Eres tú la que ha girado como una loca." Miré hacia arriba para encontrarme con un chico bastante alto, pelo castaño y ojos claros, no distinguí el color.

"Al menos podrías pedir perdón!" Dije alterada levantándome del suelo.

"No tengo tiempo para esto..." Y sin más palabras continuó su camino.

______________

"Dónde has ido?" Preguntó Liam en cuento entré por la puerte.

"A dar una vuelta." Respondí mientras colocaba las llaves en su sitio.

"Y qué tal anda todo?" Dijo mientras cogía una caja del suelo.

"Recuerdas aquel parque en el que solíamos jugar de pequeños?" Asintió. "Ya no está." Su cara mostraba una clara confusión.

"Cómo que no está?" Dijo incrédulo.

"Si, ahora hay un edificio en su lugar." Dije encogiéndome de hombros. Él suspiró.

"Has visto a alguien?" Dijo curioso mientras iba a la cocina a dejar la caja.

"A nadie conocido, estaba en el parque y..." El timbre me interrumpió.

"Debe ser la pizza que ha pedido mamá." Dijo intentando dejar la caja para ir a abrir.

"Déjalo, voy yo." Rápidamente fui hacia la puerta y la abrí.

"Buenas noches, traigo la pizza que..." No puede ser...

"Hola maleducado..." Dije poniendo los ojos en blanco y apoyánsome en la puerta.

"Eh, has sido tú la que se ha chocado conmigo." Se defendió.

"Al menos podrías haberte disculpado, no crees?" Dije cruzándome de brazos.

"Por qué tardas tanto?" Dijo Liam detrás de mí.

"Liam?" Dijo el chico. Le conocía? Liam mostró cara de confusión unos segundos antes de reconocerle.

"Harry!" El chico se adentró en la casa sin más para darle un abrazo a Liam a la vez que le daba la pizza.

"Tío cuándo has vuelto? La última vez que hablé contigo vivías en Australia!" Dijo quitándose la gorra que llevaba para revolverse el pelo. Estaba ligeramente rizado y lo llevaba bastante largo.

"Hemos llegado hace un rato. Hace años que no hablábamos!" Dijo Liam riendo. Su mirada se dirigió a mí, dándose cuenta de que tanbién estaba allí. "Ella es Laura, Harry. Te acuerdas de ella?" Dijo haciendo un gesto con la cabeza para que la mirada de Harry se dirigiese a mí. De inmediato se dio la vuelta y sus ojos se encontraron con los míos. Fue ahí cuando pude ver que sus ojos eran verdes, de un color que no había visto nunca.

"Laura?" Dijo incrédulo. "Joder cómo has crecido!" Dijo examinándome de arriba a abajo haciendo que me moviese incómoda.

"Tú también has cambiado mucho..." Murmuré. La verdad es que no quedaba nada de aquel niño que recuerdo como Harry.

"Bueno tengo que irme, aún tengo algunas pizzas que repartir." Dijo colocando la gorra en su sitio de nuevo.

"Seguís viviendo aquí no?" Preguntó Liam.

"Claro, en esta misma calle, a 10 casas de esta." Dijo sonriente.

"Bien nos pasaremos a veros, me alegro de haberte visto." Dijo Liam entrando de nuevo en la cocina.

"Yo también" Dijo Harry mientras se acercaba a la puerta donde yo seguía apoyada. "Bueno, ya nos veremos por aquí." Dijo rascándose la nuca mientras esperaba fuera. Me limité a asentir mientras lentamente cerraba la puerta. "Ah, y perdona por lo de antes, llegaba tarde al trabajo..." Dijo girándose hacia mi.

"Está bien, siento haber sido un poco torpe." Murmuré provocando que él sonriese. Tenía una sonrisa bonita.

"Bueno... adiós." Dijo antes de girarse y continuar su camino.

"Adiós." Dije para después cerrar la puerta.