Realmente nunca te preguntaste quien eres realmente? ¿jamas? Esa idea me carcome toda, no se quien soy, puede que sea una chica normal, realmente no lo se. Saber que algún día esta humanidad va a dejar de existir ¿Para que vivimos? Si vamos a morir, todos, nadie va a quedar vivo de este infierno, excepto que todos creen en el "amor" nunca me enamore y no tengo planeado hacerlo jamas, en fin, siempre te van a romper el corazón.
Entro a mi hogar, dejando a continuación mi mochila en el pequeño perchero de madera vieja, camino por un estrecho pasillo y visualizo las escaleras llevándome a mi preciada habitación. Me gusta estar sola, me hace pensar en que mas sola este mucho mejor para mi, no soporto estar entre mucha gente, entro en pánico, lo se es ridículo pero no soy muy social que digamos, tengo a mis mejores amigos y con eso me conformo.
(...)
Siempre me pregunto que se siente amar, se podrá sentir bien realmente no lo se, me gustaría que alguien me amase pero nadie me ama y mas como soy, todos son unos aprovechados se acercan conmigo por el dinero de mis padres, es estúpido pero esta sociedad no cambiará. Mis padres se esfuerzan por darme todo, siento que no soy lo suficientemente buena para ellos, trato de darlo todo pero nunca consigo nada.
Mi movil suena, miro la pantalla y es Kileyen.
-"Mhmm"? -Digo.
-Hay una fiesta- menciona emocionada.
-Me alegro que vas a ir, y para que llamas?
-¡Ja! Tu vas conmigo querida - dice con voz poderosa.
-En tus sueños Yen, no es lo mío y lo sabes muy bien, ademas acostumbras en ir fiestas peligrosas.
-Vas a ir, no quiero ir sola y dicen que va a ver bombones en esa fiesta.
Podría jurar que solo me lleva para que sus padres la dejen, no iré aun así me tenga que partir el trasero en miles de pedazos.
-No iré, lo siento, invita a Caroline ella si le gusta ir, se que quieres que vaya para que tus padres te den permiso pero esta vez no te acompañare la ultima vez que te acompañe un tipo casi me viola-Escupo.
-¡Escusas! Quiero que te diviertas, me importas - hace su voz de ofendida.
Cielos, algo se me debe de ocurrir, algo. Busco con mi mirada en mi habitación algo que m sirva de escusa, tiene que ser buena o si no seguirá jodiendo hasta que vaya a la fiesta, lo tengo ya se que le diré.
-No puedo ir, mis papás tienen cena importante con unos socios y tengo que ir esta noche-mascullo.
-Mmmm, vale, espero que sea verdad, adios te quiero y disfruta tu cena en vez de ir a una fiesta-cuelga.
Tengo una cena a cual tengo que asistir por mis padres, suena aburrido pero no quiero ser como Kileyen, no me gusta vivir con peligro, no podría soportarlo, en pensar eso mi estomago se revuelve, me provoca náuseas.
(...)
Trato de encontrar un vestido adecuado para la cena, no soy de esas chicas que tienen ropa llena en los armarios de vestidos y tacones. Pude localizar un vestido plateado con con pequeñas piedras en forma de un diamante, definitivamente, ese era el vestido que estoy buscando.
Me encuentro mirando al espejo, siento que me miro ridícula ¿Que clase de chica va a una cena con zapatos bajos en vez de tacones? Exacto solo Marcie Anee Bleens, osea yo. Sigo mirándome en el espejo y mis ojos, tengo un maquillaje natural, no me gusta exagerar.
-¡Hija! Ya es tarde tenemos que irnos -grita mi madre desde el piso de abajo.
-¡En un minuto!
Agarro mi movil.
Una vez en el auto me digo a mi misma ¡"Excelente Marcie hacer el ridículo otra vez!"