Capítulo 5

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M A C K

—¡Mack!— la voz de mi jefa resono por la habitacion de la Premiere.

—Ya voy— susurré.

Mientras caminaba por los pasillos de la Premiere pensaba en lo que me podia decir. ¿He hecho algo malo? ¿Me van a despedir? Necesito trabajar aqui, es el unico trabajo que tengo, con eso pago el departamento y mis necesidades. No podria conseguir un trabajo tan rapido.

Toque la puerta de su oficina, y me respondio con un pase. Entre y estaba sentada en su tipica silla con un cliente. Un chico mejor dicho.

—Bien Mack, toma asiento— le hize caso y me senté.

—Te  llame porque creo que tu eres una buena empleada, y estas mucho mas tiempo que los demas, trabajas duro. Por eso te llamé. Mack el es Stefan. El nuevo empleado del lugar— señalo al chico de a lado mio.

Era castaño con unos ojos color miel, muy guapo a decir verdad. Pero también poseía el aspeco de chico malo. Osea...

Un insulto más.

—Su padre es el presidente de una gran asociacion asi que tienes que tratarlo bien y ayudarlo en lo necesario— habló mi jefa.

—Ok— susurré.

—Bien entonces vayan a trabajar— sonrio falsamente y se fue a su otra habitacion dejándonos solos ahi.

Nos quedamos en un gran silencio pero finalmente hablo.

—Hola— me miro a los ojos con una sonrisa

¡Woow! eso no me lo esperaba

—Hola— añadi de la misma manera

—Eres buena aqui, quiero decir.. ¿desde cuando trabajas aqui?—

—Ya dos años.. aproximadamente— dije con orgullo. Claro era muy difícil poder conseguir o darle un empleo a chicos como yo a estas alturas. Esta Premiere se había cosiderado como las más famosas de la ciudad.

—Espero que me ayudes, nosé de que se trata esto aun, es medio raro esto de vender— su mano izquierda se acerco a su nuca y se comenzo a rascar.

—¿Pero porque lo haces?— susurré como toda una cotilla.

—Mi padre, el quiere que gane dinero para mantenerme ya solo, es decir, el me paga todo, mi apartamento, mis necesidades, todo... pero segun el malgasto su dinero y me metio aqui para ganar dinero para mi mismo— sentí lástima por él, cada uno debería escoger lo que quiera trabajar.

—¿Y tu madre?

—Ella murió— dijo cabizbajo

Enredad@ (H.S.)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora