Me Gustas (Jikook)

XVIII

Llego la hora de receso, y Emma rápidamente salio del salón para evitar que la chica popular le dijera algo pero aunque fuese salido ya del salón, la chica popular igual la siguió y  comenzó a decirle cosas las cuales emma trataba de ignorar pero cada vez se hacían mas insoportables por lo que corrió hacia el patio trasero y se escondió detrás de un arbusto esperando que aquella chica no la viera y continuara molestándola, pero de lo que no se había dado cuenta era que había alguien mas junto a ella, la cual la miraba muy atenta tratando de adivinar que es lo que estaba pasando por la mente de Emma. 
Emma no se habia dado cuenta de que alguien estaba junto a ella, no hasta cuando aquella persona le hablo, lo cual hizo que Emma se sobresaltara.

-Perdón si te asuste -Se disculpo. -Mi nombre es Joshua y acabo de llegar de los Estados Unidos -Sonrio.

-Mi nombre es Emma y no te preocupes, estoy acostumbrada a que me asusten -Dijo mas tranquila. -Pero ea mejor que no hables conmigo, no quiero que después se burlen se ti, por mi culpa -Bajo la mirada.

-Tranquila, ya he escuchado los rumores que se hablan de ti, pero no pienso dejar de hablarte solo porque vengas de parte de una pareja gay -Sonrió Joshua. -No estoy en contra de las personas que tienen diferente orientación sexual, después de todo, somos humanos y tenemos derecho a elegir nuestros gustos -Suspiro.

-Nunca había escuchado hablar a alguien con tanta sinceridad como tu, me sorprende que al fin conocí a una persona que no es homofobica -Sonrió Emma.

-Te aseguro que seremos muy buenos amigos -Le devolvió el gesto. Pero por que te estas escondiendo? -Prefuntó curioso.

-Pues justamente me escondo de una persona que no hace mas que hacerme la vida imposible -Respondio Emma. -Siempre encuentra un momento para atacarme con sus comentarios homofobicos -Suspiro.

-Pues ahora ya no podrá molestarte mas, porque yo estaré a tu lado para defenderte, claro si tu me lo permites y también me aceptas como tu amigo -Estiro su mano.

-Acepto -Sonrio Emma y ambos se dieron la mano en señal de que ya eran amigos.

El final del receso había llegado, ambos se levantaron del cesped y caminaron de regreso al salón, aunque Joshua estaba en otro salón pero esta vez se quedaría en el salón de Emma con tal de que ella estuviera bien.