FELICES PARA SIEMPRE NO EXISTE.

NUNCA MAS.

CONSEJO Nº 1: Cuidado, tu primer amor te va a cagar la vida.

Somos niños y creemos que conocimos a nuestro gran amor, mandamos cartitas cursis y con corazoncitos en todos lados, les damos mil besitos a las cartas para sellarlas, dos semanas después estamos llorando porque nuestro gran amor ya no quiere jugar con nosotras sino con otra niña. Somos adolescentes y creemos que hemos conocido a nuestro primer amor, que ricos abrazos, que ricos besos, espera, espera, wow ¿a donde va esto?¿que ricas cogidas? un año después estas llorando porque el muy desgraciado se estaba agarrando a tu amiga. Tranquila hay muchos de esos. Eres una adulta y estas emocionada por tu boda. Es tu gran amor: guapo, atlético, buen empleo, buena familia, perfectos modales, exquisito en la cama y en verdad es divino. Cariño, te gastaste un dineral en la boda para que dos años mas tarde te gastes otro dineral en el divorcio, y en psicólogo para los niños; que ya de por si te quitaron tiempo, juventud y fuerza, pero son lo mas maravilloso que tienes y tendrás.

Nunca sabrás cual fue tu gran amor, porque realmente pudo haber sido cualquiera, en cualquier edad, en cualquier sitio, hasta el chico al que le sonreíste en bus. Lo que siempre sabrás, es quien fue tu maldito primer amor, eso SIEMPRE lo sabrás; y si aun no lo sabes te lo diré en palabras sencillas fue el que MAS TE JODIO la existencia.

Mi primer amor fue gracioso, fue lindo, fue dulce, salvaje, tierno y loco. Conocí un mundo al que jamas hubiera entrado si no fuera por el y conocí personas que definitivamente no hubiera conocido si no fuera por el. Un maldito narcisista, drogadicto y egocéntrico que pensaba que todo giraba en torno a su pene. Y no es broma ni estoy mintiendo. La verdad es que el chico de 17 años que volvía loca a la una quinceañera estúpida a la que conocía de masones toda su vida sabia jugar muy bien su rol de chico malo. Todos los fines de fiesta, a veces conmigo, a veces sin mi. Todos los fines drogado, a veces conmigo, a veces sin mi. Todos los días usando condones a veces conmigo, a veces con otra. Y es que estúpidamente decía soy la oficial me llegan las demás.

No me importo cuando después de tanto gastar, supero el limite de mi tarjeta de crédito. No me molesto cuando invito a salir a una de mis mejores amigas, ni cuando se agarro a tres de las mismas. No enloquecí en furia cuando le contó a todos sus amigos como había sido el, el que rompió mi delicado himen, y como llore y grite según el de placer por lo que su diminuto pene podía hacer. No explote cuando después de verme por mi cumpleaños se fuera a gastar mis condones a casa de su ex. No quise matarlo cuando se beso con mi amiga el día de mi fiesta de quinceaños, ni tampoco cuando se metió con la chica que prometio JAMAS tendría algo.

Llego un punto en el que me di cuenta que estaba mal. Yo estaba mal, una persona sana JAMAS hubiera permitido todo eso, no se si yo estaba sana o no pero, definitivamente bien no estaba y después de meses de alejarme lo mas que podía de el me di cuenta que me había cagado la vida pero que todavía era yo. Pinte mi cuarto de blanco y comencé de cero.

Me dedique a estudiar y a leer para intentar borrar toda la mierda que según yo el había echo en mi pero que en realidad yo hice. Me aleje de amigos que la verdad estaban de mas y que nunca lo fueron. Recordé con nostalgia como decidí en venganza según yo dormir con su mejor amigo para que le duela todo el daño que me había echo, resulto ser que ademas de ser un pésimo polvo por no decir el peor que he tenido el pobre niño tenia un dedo meñique entre las piernas que iba a necesitar mucha ayuda para crecer algún día.

Así paso un año desde que me di cuenta que era demasiado pequeña para haber pasado cosas tan feas, que crecí demasiado rápido en mi mente y que necesitaba ayuda para cambiar mi forma de pensar, mi forma de vivir y mi forma de analizar las cosas con los demás, decidí ser una cactus en vez de un clavel, para tener espinas para picar o pecar, pero no solo pétalos para que aplasten.

Y con el en otra universidad y yo creciendo cada día mas para entrar a la que quería, comencé otra historia que todavía no acabo y que me viene torturando ya bastante tiempo. Solicito ayuda de Aduanas para que no deje entrar cualquier huevada a mi cora, pido que el FBI los investigue antes de que salga con ellos y que la CIA mande espías ultra secretos para saber si son perros o gatos.

LECCION Nº 1: Los primeros amores nunca se olvidan pero se disfrutan al máximo.