Amor Prohibido

Post Carreras

Ness's pov

Me despierto con un dolor de cabeza horrible, miro a mi alrededor y me percato de que esta no es mi casa.

Me doy la vuelta y me encuentro con Matt, que esta durmiendo sin camiseta dejando al aire su trabajado pectoral.

Abro los ojos como platos

Esto no esta pasando, no lo he podido hacer con el -

Levanto la sabana con cuidado, y veo que esta en calzoncillos

- No definitivamente, no lo he podido hacer con el, esto solo es un sueño -

El se despierta y me mira - Buenos días - dice 

- Me he acostado contigo - le pregunto cuando salgo de mi estado de shock

- No - dice el

- Dios, por un momento me temí lo peor - digo mientras me dejo caer en la cama

- Porque, no te acostarías conmigo - pregunta el pícaro

- Claro que no, eres mi profesor - digo con cara de asco

- Me gustabas más cuando estabas borracha, eras mas amable - dice el

- Que te jodan - digo. Me levanto y me veo en el espejo

Esta no es la ropa que llevaba ayer -
- No mierda -

- Me cambiaste de ropa - pregunto

- Si, tienes un cuerpo precioso - dice el mientras me guiña el ojo

- No te atreverías a quitarme la ropa interior - pregunto

- No, aunque ganas no me faltaron - dice

- Pervertido de mierda - digo

El se levanta de la cama, y se acerca peligrosamente a mi, yo retrocedo  hasta que choco contra la pared.

- ¿Que haces? - pregunto

- Voy a cobrar mi favor - dice el mientras pasa las manos por debajo de mi camiseta y acaricia mi cintura, en ese momento noto un pinchazo en el abdomen, y hago una mueca de dolor.

El se da cuenta

- A si, se me olvido decírtelo, ayer alguien te acuchillo, cuando te encontré estabas sangrando y borracha - dice el, y sube las manos un poco más, casi hasta mis senos

- ¿ Se puede saber que coño quieres hacerme? - le pregunto

- Tranquila, solo te voy a besar - dice el

- No te atreverás - digo

- Claro que sí, además es lo mínimo que me puedes dejar hacer después de que te salvara de acabar durmiendo en cualquier portal toda la noche y te acabaran violando los vagabundos de la calle - dice el

- Esta bien, dejaré que me beses - digo resignada, el se dispone a besarme, pero lo paro - Pero que quede claro que esto no significa nada - le digo, y luego dejo que me bese.

La verdad no besa mal, pero decido no hacerle pensar que me gusta y no le devuelvo el beso, me besa durante un rato, hasta que necesita parar a respirar.

Se aleja y puedo ver que la tiene empinada.

- Se te ha encendido el radar - le digo. El mira hacía abajo 

- Es que me pones mucho - dice

- Anda y que te jodan - le digo, el ríe y yo le lanzó una mirada asesina

- ¿Donde has dejado mi ropa? - le pregunto

- Esta allí - dice señalando la silla que hay en la esquina de la habitación