Nunca te diré adiós

17

Hyejeong estaba en su habitación. La noche había llegado pero ella aún no dormía. Le faltaba Seolhyun ese día. Los exámenes se acercaban, y siempre la menor fue su fuente de estudio. Aunque la ama con todo su corazón siempre pudo concentrarse a su lado más que con cualquier otra persona.

"Seolhyun.... Te extraño" -Murmuró mirando la ventana Hyejeong.

Desgraciadamente, ella no podía quedarse hasta tarde en el hospital. No era ningún familiar para poder quedarse, y su madre no se lo permitirá nunca en la vida.

Unos golpecitos en su ventana llamaron su atención. Se dirigió a ella viendo a Mina. Abrió rápidamente la ventana ayudando a su amiga a pasar.

"Mina, ¿Acaso estás loca? ¿Cómo se te ocurre entrar por la ventana? ¡Por algo se inventaron las puertas Kwon Mina! -Grito molesta Hyejeong fijándose que la menor no haya sufrido ningún raspon. Se preocupaba mucho por ella.

"Estot bien" -Rió Mina- "He venido para que salgamos" -Comentó con emoción.

"Estás loca si quieres salir a las dos de la mañana".

"Oh vamos Unnie, la noche es joven y debemos disfrutar de la vida a pesar de las caídas".

"¿Incluso de las mejores amigas en coma desde hace dos años sin olvidar que es tu primer amor?" -Preguntó con los brazos cruzados Hyejeong.

"Estoy segura que Seolhyun no le gustaría que no vivieras tu vida o si quiera te divertieras" -Respondió Mina con un pequeño puchero.

"Eissh esta bien, ¿Donde quieres ir?".

"Vayamos a la playa".

"Estas loca".

"Al igual que tú" -Dijo Mina sacandole la lengua infantil.

Mina hurgo en el armario de la mayor, eligiendo ropa bonita para ella. Hyejeong se cambio la ropa y salieron de la habitación sin hacer ruido. Caminaron hasta la puerta principal y salieron, un auto estacionado afuera sorprendió a Hyejeong.

"Espera, ¿No vamos a ser solamente nosotras dos?" -Preguntó Hyejeong mirando confundida al auto.

"¿Pensaste que solamente seríamos las dos? No seas tonta Unnie, traje refuerzos que tal vez odies" -Respondió Mina entrando al auto.

Hyejeong entro e instantáneamente una mueca se formo en sus labios. Choa y Jimin se encontraban ahí.

"Cambia esa cara Hyejeong, hagamos un tratado de paz por una noche" -La regaño una dulce y tímida voz.

"Pero Yuna".

"Pero nada".

"Esta bien".

"Bien! Ahora vamos!" -Gritaron desde atrás emocionada.

Jimin empezó a conducir. Pusieron la radio donde escucharon música pegajosa, las seis chicas cantaban a los cuatro bien. Por primera vez en tanto tiempo se divertían. Luego de una hora entera llegaron a la playa, fueron a una fiesta solo para divertise, bailar y beber.

"Niñas. Es hora de ir a dormir" -Dijo Choa mirando a todas, la mayoría se veían mal.

"Pero no podemos conducir" -Dijo está vez Hyejeong. Estaba ebria pero no lo suficiente para dejar que alguna conduzca.

"¿Quién dijo que íbamos a volver a casa ahora, hermanita?" -Preguntó Jimin con una sonrisa traviesa.

"¿Entonces?" -Hyejeong miro a cada una confundida al ver sus sonrisas traviesas. Sabía que algo tramaban.

"Hyejeong unnie, rentamos una casa de playa por una semana" -Comentó emocionada Chanmi.

"¿Como?".

"Las preguntas para mañana Hyennie, me duele la cabeza y tengo mucho sueño" -Hablo esta vez Mina acariciando su cabeza.

Sin decir más fueron a la casa de playa. Hyejeong no podía creer lo bien planeado que tenían la salida. Ella tenía que compartir habitación con Mina, se fueron a dormir y se quedo despierta viendo como la menor se dormía.

"Buenas Noches Seolhyun" -Comentó con una sonrisa dirigiendo su mirada hacía la luna brillante.

" A la mañana siguiente ".

Hyejeong despertó muy temprano de lo usual. Vio alrededor y Mina hizo un desastre con su cama. Trato de no reír, salió de la habitación sin hacer ruido. Se dirigió a la cocina para hacer un desayuno y comprar medicina contra la resaca.

Cuando estuvo todo listo salió nuevamente de la casa de playa para ir hacía el hospital, claramente robando el auto de su hermana mayor.

Llego al hospital, y se dirigió a la habitación. Entró tocando pensando que podía interrumpir a alguien su conversación con Seolhyun pero nadie se encontraba ahí. Solo la menor acostada.

"Buenos días Pequeña Seolhyun".

"Hyejeong".

Me acerqué lentamente hasta llegar a su lado. Le comenté lo que habían hecho las chicas, claramente le dije que hubiera deseado que estuviera ahí con nosotras.

"Seolhyun.... Cuando regreses espero que puedas cumplir con lo te pido. No odies a mi hermana, a pesar de sus equivocaciones. No la odies por favor" -Rogue mientras acariciaba tu mejilla dulcemente.

Las lágrimas invadian mi vista. Aunque no quisiera admitirlo, Jimin es más feliz ahora y Seolhyun deberá aceptarlo pero sobre todo que.... Ella ya no va a despertar y no sé si puedo seguir esperando a que lo haga.