Destinado.

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Omegaverse




Los malditos supresores, había estado olvidando tomarlos todo por el ajetreo del nuevo come back, con tantos ensayos, programas y demás había pasado por alto un montón de cosas, como por ejemplo felicitar a su madre por haber podido entrar a ese club de repostería y mandarles unas deliciosas tortas a él y a los chicos, vaya que de no haber sido por su madre todo se habría ido a la mierda.

La progenitora de JinYoung le había marcado en medio del ensayo solo para reclamarle que no había sido un buen hijo para nada agradecido con todos esos pequeños detalles que había tenido con los siete, en otra circunstancia habría estado maldiciendo en su mente pero cuando su madre llegó a esa parte de: "Tienes la cabeza en otro mundo JinYoung, espero que al menos lo único que no olvidaras fuera tomar los supresores". El gemido de frustración que sacó luego de eso le dejó más que claro a su madre lo que pasaba, JinYoung fue regañado por ella, la mujer alegó que siendo un idol debía ser mucho más cuidadoso con ello y más teniendo en cuenta que su alfa estaba entre su grupo, demonios, él sabía mejor que nadie lo cuidadoso que debía de ser pero entre tantas cosas se le fue las manos y ahora estaba encerrado en el baño planeando una buena huida que costara estar alejado de JaeBum al menos una semana.

Desde que se habían conocido ambos habían sentido esa fuerte atracción, ese lazo que los unía pero JaeBum se había negado rotundamente a ello, JinYoung no hizo más que respetar la decisión de su compañero y fingir que ahí no existía nada, no iba a mentir que al principio le dolió como la mierda ser rechazado por su propio compañero siendo que en los primeros celos que tuvo al lado de JaeBum éste le evito a toda costa e inclusive compró los supresores para él, conforme el tiempo pasó aprendió a sobrellevar aquello, no iba a lamentarse toda su vida sobre el rechazo que sufría por parte de JaeBum en ese aspecto.

Volviendo a su huida Mark llegó como caído del cielo cuando entró al baño, JinYoung casi chilla de felicidad por ver a su única esperanza en el grupo entrar por aquella puerta.

—¡Mark!— JinYoung prácticamente se echó sobre los brazos de Mark haciendo que el aludido se hiciese un poco hacia atrás, la repentina bienvenida al baño sí que le tomó por sorpresa sin embargó no lo demostró y dejó que JinYoung siguiera sobre él, bien sabía que ese comportamiento era señal de que algo malo estaba pasando o era pronto a pasar.

El conocimiento que Mark tenía sobre JinYoung no falló desde luego, el menor contó sobre el porqué había salido de la práctica y porqué había estado tardando tanto en regresar, explicó sobre las cosas que había estado olvidando y desde luego no olvidó lo más importante; JaeBum y supresores. Mark ya estaba cansado que prácticamente fuera lo mismo cada que venía el celo de JinYoung, si bien los supresores funcionaban súper bien, JaeBum parecía tener un olfato demasiado desarrollado que parecía como si estos no hubieran hecho efecto en JinYoung, aunque en realidad era lo contrario pero al parecer el líder podía oler aun así a su compañero, lo que le cansaba de esa situación era ver cómo JaeBum hacía sufrir a JinYoung y se hacía sufrir él mismo.

—Tú sabes lo que pienso acerca de esto. — Dijo Mark una vez que JinYoung había acabado su relato. Vaya que lo sabía, Mark siempre insistía que mandara al carajo lo que JaeBum decía y lo tomara como su compañero pero JinYoung no iba a obligar a nadie a estar con él, desde luego que no. —Pero por esta vez no voy a insistir, inventaré algo para que puedas salir de esto, ya más adelante los chicos sabrán porqué lo hice, es obvio. —

JinYoung le dirigió una sonrisa en agradecimiento a Mark y aguardó en el baño esperando la señal para que pudiese por fin salir de allí.

Mark lo hizo, cuando llegó del baño todos los miembros le prestaron su absoluta atención, en especial uno, el líder.

Love Is... / [JJPROJECT]Where stories live. Discover now