IDWK - 2JOON - O.S

Hope you don't cry no more

Abrió la puerta, exasperado por los insistentes golpes que provenían del otro lado. Pequeña sorpresa se llevó al ver que se trataba de DoJoon.
Iba con el cabello naturalmente rizado y brillante, como si hubiese tomado una ducha recientemente; recordó todas las veces qué pasó sus manos entre aquellas suaves hebras castañas.
Lo observó durante algunos segundos, buscando algún indicio del porqué se encontraba ahí.

"HaJoonie"

"¿Qué está haciendo aquí?" Preguntó, cohibiéndose en el instante que recordó que sólo llevaba puesta una vieja camisa perteneciente al mayor.

No existía razón alguna, o al menos eso creía el menor, pues su relación tuvo fecha de vencimiento unos meses atrás. No hubo buenos términos y si mal no recordaba DoJoon se había llevado hasta la última pertenencia del departamento.
Mentiría si dijera que no deseó verlo durante ese pequeño lapso de tiempo, pero tampoco era algo que pudiese admitir en voz alta, mucho menos frente a él.

"¿Acaso no puedo venir a verte? Que hayamos terminado no quiere decir que no podamos volver a vernos" Dijo seriamente, entrando como cada tarde antes de irse.

"Bueno, creí qué tal vez no quería volver a verme en su vida" Soltó. "Pero claro, las personas suelen arrepentirse de sus palabras"

El mayor bajó la mirada avergonzado, nunca quiso decir aquellas palabras. Nunca quiso que terminaran su relación, todo era imperfecto, pero así es el amor.
Una maldita y boba pelea con dos personas molestas fue como una bala que atravesó todo aquello que los mantenía juntos, haciéndoles olvidar por un momento que se necesitaban el uno al otro.
Todas esas mentiras que salieron de sus labios, se arrepentía de todas y cada una.
Ambos querían darse otra oportunidad, pero eran demasiado orgullosos como para arreglar las cosas antes.

"Lamento lo que dije, no hablaba en serio" Se disculpó, fijando sus ojos en los contrarios, revelando honestidad en ellos.

"Pero se veía tan seguro..."

"Tú también lo hiciste ¿Cierto?" El azabache giró su rostro, sus mejillas tomaron un color rojizo. Estaba acusando a DoJoon de algo que también hizo, el mayor merecía una disculpa.

"Lo siento" Su voz sonaba ahogada.

El castaño se acercó hasta donde HaJoon se encontraba, invadiendo su espacio personal como era costumbre en él. Por un momento la respiración de HaJoon se cortó. Continuó acariciando con parsimonia su mejilla y se alejó, desabrochó el reloj que adornaba su muñeca izquierda, colocándolo en una de las mesillas que sostenían las lámparas a un lado del sofá color verde.

"¿Qué está...?"

"Escuché que estás saliendo con alguien" Habló de repente Park, cambiando rápidamente de tema. "WooSung es su nombre ¿Cierto?"

WooSung en realidad era solo su amigo, o al menos así lo consideraba HaJoon; el mayor había confesado sus sentimientos, que iban más allá de una simple amistad hacia el menor, a pesar de que sabía que su corazón pertenecía completamente a otra persona. Lee nunca pudo corresponder aquello y en veces se sintió un poco culpable por ello.
Kim lo apoyó durante todo el tiempo después de su ruptura con DoJoon, ambos se volvieron más unidos, casi mejores amigos. WooSung solía llevarlo fuera de casa, lo hacía tomar aire fresco y despejar su mente.

Pero nada podría borrar en nombre de DoJoon de su corazón.

"¿Quién le dijo eso?" Preguntó. La malicia no resonó en su voz, quería ver que tan lejos llegaba.

DoJoon quien tenía su vista desviada a ningún lugar en específico al escuchar las palabras del menor dirigió su fuerte mirada hacia él.

"Nadie importante" Respondió. "Los rumores corren rápido"