soft moans // taekook

one

el sol empezaba a salir, los primeros rayos molestaban a cierto chico aun durmiendo. fastidiado por aquella luz se levantó y de un golpe cerró completamente las cortinas. cuando volvió al lugar del que venía escuchó un grito que arruino la perfecta posición que había elegido para dormir.

— ¡ taehyung ya es de día y el desayuno esta listo ! —escuchó al más grande de todo el grupo golpeando a su puerta.
la expresión del contrario no era tan agradable como se esperaba al escuchar a alguien decir que el desayuno estaba listo, al contrario, parecía que con esa mirada estaba apunto de apuñalar a alguien. al escuchar los mismos golpes y gritos contra su puerta decidió levantarse con la mejor cara posible que tenía y bajar a tener ese dichoso desayuno.

mientras bajaba las escaleras podía sentir como un delicioso olor atacaba sus fosas nasales, soltó un pequeño suspiro seguido de un rugido inesperado por su estómago, gritando por comida.
— al fin te dignaste a bajar. — miro a un seokjin con brazos cruzados frente a él balanceando una espátula sobre su mano.
— pues como no va a bajar con esos gritos que pegabas, que, ¿ acaso namjoon te la metió sin avisar ? — un tal pálido chico paso por donde los otros se encontraban con una sonrisa burlona en su rostro. sin avisar recibió un golpe por parte de aquel mencionado, dándole entender que no se le hacía divertido su comentario.
— ¡ buenos días hyungs ! — una tercera voz se escuchó a unos pasos detrás de taehyung. cuando miro hacia atrás se topó con la sonrisa de cierto chico con complejo de un lindo conejito. taehyung sintió algo removerse en su estómago, tal vez era hambre, sintiendo que en cualquier momento podría comerse al menor.
— buenos días jungkookie~ — el más bajo de todos corrió hasta donde estaba el pequeño, empujando a taehyung para poder tomar de su brazo y abrazarlo. —
— j-jimin hyung, me está apretando. — jungkook apretaba sus ojos sintiendo como los brazos de su hyung tomaban fuertemente de su cuello.—
taehyung solo formó una mueca, un tanto molesto al ver como alguien más abrazaba a su conejito.
seokjin volvió a llamar a los chicos para comer, esta vez ya molesto a que nadie me hiciera caso.
sería una mañana larga para taehyung, y sería peor sabiendo que su pequeño jungkookie era mimado por un estupido enano.
" es  mío "  se repitió miles de veces en su cabeza, pero era inútil, ya que todos sus hyungs querían a ese pequeño conejito.
¿ pero quien no lo haría ? ese niño si que era demasiado hermoso. toda una obra
de arte para los ojos de taehyung. o sería más fácil decir, su obra de arte.

soy yo o la estoy cagando con esta historia? oh well aun así la seguiré juju
—bri📿