La locura del rey [Creek]

Capitulo Uno: El extranjero

Fuego

Fuego por todos lados

Ardiendo sobre su piel y cualquier cosa que estuviese cerca, desintegrando en segundos los arboles y cabañas al rededor sin ser posible detenerlo.

Quemaba y dolía tremendamente, el aire se hacía escaso y más pesado de respirar, su vista apenas podía diferenciar entre los tonos rojos y anaranjados de las llamas consumiendo todo y el oscuro cielo de noche, ya estaba completamente envuelto en aquél sofocante fuego.

Y despertó

~°~

Un fuerte grito hizo que desde la entrada de aquella habitación Craig abriera los ojos enormemente por la impresión, sin pensarlo más de una vez empujó con fuerza la puerta de madera encontrándose con una escena para nada agradable que le hizo girar los ojos por el fastidio. Aquel joven que el día anterior había irrumpido descaradamente el palacio del rey de diamantes murmurando incoherencias ahora se encontraba intentando forzar los barrotes del ventanal fracasando patéticamente, tenía el cabello alborotado desde el día anterior,Craig pensó que era debido al trato que debió haber tenido a manos de los guardias de corazones, según Red lo habían visto caminar completamente desorientado afueras de la sección ⁿ27 , en un principio no les pareció extraño ya que la gente que sale de ahí nunca está en sus cinco sentidos. Pero algo en la expresión de ese chico llamó la atención de la pelirroja, su mirada estaba perturbada y la ropa parecía intacta, si realmente hubiese entrado a ese lugar su vestimenta habría estado por completo destrozada.

— ¿Que crees que haces? —

Solo obtuvo como respuesta un grito y la mirada intranquila del tipo rubio, sus pupilas estaban contraídas y se movían incesantemente, analizando cualquier cosa anormal en Craig quien permaneció quieto con la mano en la manija de la puerta, sus manos en torno a las rejas de su ventana se apretaron aún más y el labio inferior del rubio quedó aprisionado entre sus dientes.

— ¿Eres sordo? —

El extraño negó un par de veces con la cabeza  y se alejó de la ventanilla, con paso lento se acercó hasta la cama en la que había estado hasta hace una hora y dejó caer todo su peso sobre esta. Craig simplemente suspiro y se acercó al chico levantándolo sobre su hombro a pesar de que el extraño comenzó a retorcerse inquieto y rogó por que le bajara, no tenía tiempo para esas cosas ahora, con pasos calmados se dirigió con el rubio a cuestas sobre su hombro hacia el jardín trasero del castillo y lo dejó junto a un gran roble, el desconocido negó varias veces agarrando su cabello con ambas manos y jalando de vez en cuando, gesto que asustó un poco a Craig.

— Ngh... ¿Donde estoy?— Una vez el chico pareció recobrar la compostura fue lo primero que salió de su boca, Craig aún se mantuvo preocupado y un tanto alerta, no podía confiarse de alguien que se agredía de esa manera tan repentinamente y sin razón aparente.