Escuchaba el tono de su celular entre sueños, le dolía todo el cuerpo, y aunque le habían dado un masaje y analgésicos, estaba completamente agotado; una vez pasada la adrenalina del concierto le llegaba el bajón, y este siempre lo dejaba drenado física y mentalmente. Era su trabajo, claro, y lo amaba, pero era estaba siendo particularmente más difícil que otras veces, ya que tenían que llenar un enorme vacío...Siempre que él no estaba a su lado en el escenario, parecía costarle mil veces más ser "G-Dragon". Siempre que no podía encontrar esa mirada que le sacaba una sonrisa inconscientemente, se sentía infinitamente sólo, aunque estuviera rodeado por miles de personas que lo apoyaban.
Siempre que SeungHyun no estaba a su lado se sentía débil, sin ganas de luchar.
Por eso le costaba tanto abrir lo ojos, estaba cansado de todo, sólo quería que estos meses pasaran rápido. En su vida personal había sido el peor año de su vida, una maldita pesadilla; pero en el aspecto profesional, jamás creyó que viviría algo tan increíble.
Sólo quería seguir durmiendo en esta solitaria y enorme cama de hotel.
No quería pensar en lo que llevaba meses carcomiéndolo día y noche. Su carrera, la de sus hermanos, la del amor de su vida, sus padres, sus perros, su gato, el ejército, su marca de ropa, el linchamiento mediático hacía su hyung. Tenía que pensar en tanto, y a la vez, ¿Realmente valía la pena?
¿Realmente valía la pena el sufrimiento, el dolor, la frustración, sólo para poder tener una vida decente?
Cada vez le costaba más ignorar el tono de su iPhone, porque reconoció la canción que sonaba. Ahora sí. Estaba en una encrucijada, ya que la persona que estaba al otro lado de la línea podía necesitarlo, tanto como él mismo lo hacía.
Pero tenía tanto sueño...
Cuando el cuarto estuvo nuevamente en silencio, consideró regresar a dormir, era lo mínimo que se merecía.
"My love is with you..."
Mierda. Debía contestar.
-Dime que es importante, hyung.- Murmuró una vez llegó al teléfono y oprimió el botón verde.
"Buenos días para ti también hermoso, estoy bien, gracias por preguntar". La voz de SeungHyun era calmada, profunda, sin reproche, es más, parecía que lo quería hacer reír; y lo habría hecho, de no ser porque estaba aún medio dormido y no coordinaba. Eso lo tranquilizó, egoístamente sólo había pensando en su propia miseria, y no debía olvidar que su hyung no estaba para sus berrinches.
-Lo siento bebé, es que no pude dormir muy bien.- Se disculpó rápidamente.
"Yo tampoco" Suspiró. "Por eso te hablo a esta ahora, lamento haberte despertado, bebé".
-Está bien, de todas formas TaeHee no debe tardar en venir a joderme- Intentó bromear un poco, pero estaba muy cansado.
"¿A qué hora llegas hoy?" Preguntó, sonaba extraño.
-No sé, porque Yang quería que fuéramos a Jeju apenas me desocupara, por la cafetería y eso.- Se mordió el labio.
"Ah" Lo escuchó suspirar nuevamente.