LIES • Min Yoongi

Capitulo 23

¡Mil pero mil disculpas a tod@s! No solo se me hizo difícil escribir el capítulo, sino que la universidad me tiene estresada y ya estoy a punto de acabar el ciclo en un mes😫 Estoy ocupada con mis trabajos y exámenes (estudie mucho y me saque 19.20 en una de mis prácticas😭💜) por eso no he podido actualizar y encima, estoy estudiando inglés (solo 3 meses más y ya acabo TODO) haré lo posible por subir otro capítulo el fin de semana, NO PROMETO NADA, espero desocuparme, incluso se me ocurrió un one-shot con Jungkook y ni tiempo para escribir.

Las dejó de molestar y continúen con la lectura.

Besos, Vale🌷👄 💜

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El mes ya estaba por terminar y Nari estaba llena de exámenes y trabajos finales, ni siquiera había podido ver a su novio en una semana porque el también tenía cosas que hacer y trabajos que entregar.

Nari aún tenía solo un examen más por dar y luego dormiría todo lo que no había dormido en al semana. Lo peor de todo, es que era inmune a la cafeína, podría tomar café y aún así, tendría sueño.

— No puedo creer que tú madre se haya atrevido a engañarte

— Tampoco yo, Eunbi

— Ese idiota de Min me va oír cuando llegue a corea — su mejor amiga, Kang Eunbi, se había ido a estudiar a Inglaterra y no había tenido manera de contactarla luego de que ella no respondiera el celular que su madre había guardado luego del accidente. — Al menos ya están juntos

— Y espero que esta vez no pase nada

— Por cierto, cómo va tu memoria

— No hay mucho avance, pero ya no me preocupo tanto por eso

— Tal vez si te golpeas la cabeza con algo, como en las películas, todos los recuerdos vengan a ti — tanto ella como la rubia rieron, Nari no iba hacer eso, le daba miedo y además, ya sabía la mayoría de cosas de los 2 últimos años que no recordaba gracias a Yoongi. — Debo irme, tengo clase en unos minutos

— Llámame cuando puedas, adiós Eun

— Adiós, cuídate, Nari

Escuchó la puerta del departamento abrirse y dejó el celular. No esperaba a Yoongi, el mayor le había dicho que recién estaba libre el sábado, así que salió de su cuarto con un florero en la mano, temiendo porque fuera un ladrón. En lo único que se escuchaba ruido era en la cocina y con cierta cautela camino hasta ella, solo bajo el florero cuando observó una espalda muy conocida.

— Yoongi...

— ¿Qué haces con un florero?

— Creí que era un ladron... ¡estás aquí! — dejó el florero en la mesa y saltó a los brazos del pelinegro, quien no tardó en corresponderle. — Dijiste que estabas ocupado

— Lo estoy pero quería darte una sorpresa — el chico le sonrió, derritiéndole el corazón, Nari comenzó a espacir besos por su rostro para finalmente acabar con sus labios en los de él. Aquellos días sin Yoongi habían sido un infierno, no podía creerlo lo mucho que extrañado la compañía de su novio. — Traje el almuerzo, porque te conozco muy bien y se que no haz almorzado.

— Estaba estudiando

— Lo se, cada vez que estudias, te concentras tanto que no paras ni a comer algo — el olor a pollo frito llego a su nariz y su barriga hizo un sonido, bajo la mirada avergonzada. — Saca platos, Mina, vamos a comer y luego sigues estudiando