Omega De Una Alfa

Capítulo 4

Mark sintió la luz en su rostro, despertó y supo que por fin había terminado su celo.

En la cocina se encontraba su mamá preparando el desayuno.

Mark- deja que yo lo hago
Alexa- No mi amor ya casi término, siéntate a la mesa cariño yo los atiendo.

En la mesa estaban sentados su abuelo y su padre.

Louis- Y tú inútil no veo las horas que te cases y te vayas lejos, eres toda una vergüenza, ¿no pudiste gemir más fuerte durante estos días?, por fin vas aceptando lo que eres un simple omega.

Mark corrió a su habitación con los ojos llenos de lágrimas, ya no podía mas no podía soportar más humillación y la humillación crecería en diciembre cuando todos sus hermanos llegarán con sus familias y su futuro esposo, seria la burla de ellos pero estaba decidido a no permitirlo más, tenia un plan escapar de casa ¿a donde? No lo sabía, no tenia ni un solo amigo que pudiera ayudarlo no conocía a nadie, nunca hizo amigos en la escuela sus compañeros lo trataban mal, siempre iba acompañado por su madre o su padre y al regreso siempre lo esperaban así que nunca pudo conocer a nadie y hacer amistades.

Mark estaba decidido ya lo había pensado con anterioridad y aprovecharía que había pasado su celo y tenia unos meses hasta el próximo al menos estaría un poco a salvó.

De su closet sacó periódico algo viejo que guardó durante meses en el había un aviso que le llamó la atención, era una oportunidad laboral, necesitaban empleados del hogar para un pequeño departamento de una sola persona, decidió llamar tal vez a pesar de que era un aviso antiguo aún necesitaban un empleado, así que sin hacer ruido salió de su habitación para dirigirse a la habitación de sus padres allí había un teléfono.

Timbró tres veces y contestó una voz femenina ¿Aló?  pero Mark no pudo emitir palabra alguna esperó unos segundos y colgó, sus manos le temblaban y comenzó a sudar frío, tenía miedo... en la mesa de noche había un billetera, era la billetera de su padre no lo pensó, la revisó y se fue con ella a su habitación.

Más calmado se sentó en su cama y vio que la billetera contenía varios billetes, pensó que eran los suficientes como para ir a la dirección del aviso y si no corría con suerte tendría suficiente para sobrevivir fuera de casa unos días mientras encontraba algún trabajo. Mark estaba decidido a no volver más a casa y menos casarse con Sean.

Cogió su mochila y metido unas cuantas mudas de ropa estaba tan desesperado que lo hizo todo de manera espontánea sin pensar en nada, caminó por el pasillo bajo las escaleras, escuchaba a su padre discutir con su madre en el patio trasero, estupendo así podría salir sin que se den cuenta su abuelo estaba recostado en el sofá tomando una siesta acostumbraba hacerlo después del desayuno, cruzó el comedor llegó a la sala paso sin hacer ruido hasta la puerta la abrió, la dejo junta para no hacer ruido y corrió, corrió lo más rápido que pudo sin rumbo, cuando ya no podía mas y sentía que le faltaba el aire paró no le importó donde estaba y se sentó en la vereda, estuvo unos minutos ahí mientras la gente pasaba y lo miraba raro a el no le importó.