capitulo 1.

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Tan solo quiero volver el tiempo atrás, a un tiempo donde todo lo que quería lo tenía, esos momentos de felicidad que parecia no recordar, se que existieron y todos los días vivía con la esperanza de que volvieran, que se repitieran, que nunca se hubieran detenido, pero las cosas no siempre son como uno las quiere, solo cambian, con el pasar de los años veía como cambiaban los lugares que en algún momento lo fueron todo para mí, mi felicidad, mis amigos, mis buenos momentos, todo se fue y sólo quedaba un montón de tierra que guarda las imágenes en lo más profundo de lo que alguna vez fue, ahora sin poder recordar cómo era antes, solo veo un montón de tierra con algo olvidado esperando por ser reencontrado.

Termine de escribir en mi diario cuando tocaron la puerta, rápidamente lo cerré y lo guardé en un cajón con llave de mi nochero, era mi madre, como siempre, la única persona que entra a mi cuarto pero aún así se que no le importó, solo soy una carga, un peso que nunca debió existir.

-Por que no sales al cine con tus amigos como una persona normal en vez de quedarte en casa haciendo nada- dijo ella con un claro tono te fastidio, el cual no quise responder fingiendo no escuchar tecleando cualquier cosa estupida que se me viniera a la cabeza, si los borraba luego no me voy a esforzar buscando las palabras exactas que describan cada cosa que siento, mi madre solo cerró la puerta de un portazo rendida por mi ignorancia, y es que de verdad no le preste atención a lo último, solo me quedé pensando otra vez, y hubiera podido seguir así de no ser por un mensaje que apareció en mi pantalla, era una foto, de la persona que más odio en este mundo, ¿Y como no odiar a la persona que te hizo la vida imposible en la secundaria y repite lo mismo en la preparatoria?, Solo quería morir, ¿¡Cómo se le ocurre tomarme fotos cuando me están golpeando!?, Mi cuerpo estaba lleno de moretones oscuros, me dolía el simple echo de caminar, y ahora solo puedo usar manga larga cuello de tortuga por los golpes y hablar de los vaqueros que acostumbro a usar, me gustan con rotos pero no puedo usarlos no por ahora.

Borre la foto como pude, veía borroso, estaba mareada, bloqueé el contacto, me dieron náuseas, apague el celular, me levanté tambaleante mientras las lágrimas caían sin intención de detenerse, solo fui al lavamanos cogiendo la cuchilla ya tan conocida para mí, siempre usaba manha larga pero sin el cuello de tortuga, pase la navaja repetidas veces una y otra vez siendo una más profunda que la otra hasta que todo el lavamanos quedará totalmente rojo, solo abrí el grifo limpiando todo y luego sintiendo como mi piel ardía al contacto con el agua, vende las heridas y solo salí del baño y me tire a la cama llorando.

Otra vez, cayendo en la oscuridad, sin escapatoria, en lo profundo de un océano como un barco naufragado, esperando a que alguien encuentre el tesoro que se guarda en mi interior, aunque este pérdida y fuera del radar conservo la esperanza de que alguien me encuentre.

oceanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora