Ahora yo tengo el control

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-  ¡BBoy! -gritó una joven alta de cabellos largos- ¡BBoy! -volvió a llamar, al no oír respuesta, sonrió maliciosa y uso su típica frase para asustar a su compañero- BBoy... si no vienes en este instante ¡Te mandaré al sol! -gritó, y al cabo de unos segundos oyó unos pasos apresurados, segundos después un chico un poco mas bajo que ella, llegó con la respiración agitada, mirándola con un notable miedo en sus ojos azules-

- ¿Me gritaste Puppet? -preguntó el chico, quien recuperaba el aliento después de haber corrido al oír que su amiga lo llamaba amablemente. Unos chasquidos lo regresaron a la realidad mientras ella lo veía fijamente con su típica expresión inexpresiva.

- ¿No escuchaste lo que dije? -le pregunto la mas alta con el ceño levemente fruncido- ahh no importa ven... -suspiró, haciendo una señal con cabeza para que lo siguiera- Mira, hice dos pociones, una altera el comportamiento, y necesito que la pruebes -lo mira fijamente, mientras saca unas cuantas gotas de este con un gotero- Necesito ver en que debo mejorarlo, así que solo unas gotas, no estoy segura que funcione correctamente por eso necesito saber la reacción de la persona que lo ingeste -le extiende el gotero- ten -el chico lo ve y lo toma-

Él toma el gotero, ingiriendo el contenido, al cabo de unos segundos un mareo se apropia de el, siente pesado sus ojos cayendo al suelo.

...

Al despertar ve a su alrededor sintiéndose extraño, una mano fría toca su frente seguido ve unos ojos negros ya conocidos

- ¿Cómo te sientes? -preguntó preocupada la mas alta.

- Un poco mareado -dice tocando su cabeza, se levanta y camina- me siento bien

- Oh esta bien... ¿Me puedes traer una soda? -dijo ella mientras anotaba algo en su agenda exclusiva para los hechizos.

- Tráela tú -respondio él, mientras salia del salón dejándola sola.

Aquello hizo que ella se quede curiosa de aquella actitud nueva en su pequeño compañero
Después de esa respuesta, no lo vio en un buen rato, eso le pareció extraño, fue a la sala de arte y efectivamente ahí lo encontró pintando en un cuadro algo que pareciese ser unas cadenas con algo debajo, no le tomo importancia e interrogó el comportamiento de el

- ¿Te sientes bien? -preguntó, volviendo a tomar la frente de el para examinarlo, al no oír respuesta se comenzó a impacientar un poco- BBoy te estoy hablando -el la miró con un gesto aburrido y asintió con la cabeza

- Estoy bien, y mas... al fin me doy cuenta de todo, me usabas como sirviente personal -respondió cortante, levantándose y acercándose a ella- ¿No te gustaría invertir los papeles? -dijo con una sonrisa un tanto bizarra.

- ¿¡Que demonios te pasa!? -gritó ella levantándose también, mirándolo con enfado- Te enviare al sol si vuelves a hablarme así -amenazó-

- Claro claro, como sea -dicho lo ultimo salio rumbo a la sala de química donde había olvidado su mochila, al llegar ahí vió la agenda de Puppet, nunca había visto que tipos de hechizos tenía, la curiosidad fue grande y la guardó en su mochila, junto con la poción de comportamiento, lléndose a su casa.

...

Una llamada en la noche hace la joven de cabellos largos llegue rápidamente a casa del muchacho quien se encontraba mal, aparentemente la poción tuvo efectos secundarios, e hizo que el cuerpo del que lo ingirió pierda energías, quedando débil. La joven de cabellos largos al llegar a la habitación del mas bajo no lo encontró, solo sintió que no podía moverse como si estuviese paralizada, miró hacia todos lados buscando algo, pero no encontró nada, de momento a otro la luz de la habitación se apago, haciéndole sentir una extraña presencia detrás de ella, sintió como le quitaban la mochila que traía en la espalda y buscaban en esta.

No son como creímosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora