Capitulo 16

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Narra Aliana

Abro los ojos con dificultad, parpadeo un par de veces y observo todo a mi alrededor, estoy en la habitación de Christian

Me levanto de la cama y me aseguro de estar completamente sola en la habitación, pero al mirar hacia enfrente observo en un maniquí mi vestido de boda

- ya está aquí ??- me pregunté a mi misma

Me puse de pie y me acerqué a paso lento, pase mis manos por la tela suave y fina, este vestido era un sueño para mi, estoy Satisfecha con mi elección

La puerta se abre y Christian entra a la habitación, lo observo unos momentos y luego recuerdo que me drogo y el enojo comienza a apoderarse de mi

- cómo se te ocurre hacerme eso ?- grite enojada
-modera tu voz qué hay visitas - dice calmado
- no me pienso calmar - grite - yo grito lo que se me da la gana - dije

El Tomo asiento en la cama y se sujeto el cuello, al parecer  se encontraba muy estresado pero estaba tan enojada que no me importaba nada

- esa es tu forma de arreglar las cosas ?- grite acercándome - drogando a las personas ??- grite - ehh?? No dirás nada ?? Ahora no hablas ?? Que tienes que decir con respecto a eso - señalé las fotos - o que me tienes que decir de eso - señalé el maniquí - llévate ese vestido de aquí porque no me casare y ni tú ni nadie me van a obligar escuchaste ??
- BASTA - grito poniéndose de pie - no vuelvas a gritar - grito
- Ah pero tú si puedes gritar todo lo que quieras no ?- grite
- no me alces la voz - grito señalándome
- o que vas a hacer ??- grite cruzándome de brazos - me vas a pegar ?? Me volverás a pegar cobarde ??- grite golpeando su pecho - hazlo a ver si así te sientes un poco más hombre - grite

Él me tomó de las muñecas y me empujó a la cama, salió de la habitación y me dejo tirada en la cama

- ah no, a mi no me dejas con la palabra en la boca - grite corriendo detrás de él

Él iba bajando las gradas y yo detrás de él, descalza, en short, despeinada y con un humor de los mil demonios

- regresa acá - grite enojada - me vas a escuchar, estoy harta de que nunca me escuches y esta vez lo harás
- regrésate a la habitación ya - grito enojado
- no me regresaré a ningún lado - grite enojada- eres un maldito cobarde, un bueno para nada, un maldito machista que necesita a una mujer para sentirse hombre, un ingenuo que cree que será el primero - grite

En la habitación se formó un silencio tenso e incómodo, él estaba de espaldas y al escucharme volteo lentamente a observarme , vi en sus ojos el enojo, mucha rabia, sus venas se marcaban y sus manos estaban echas puño

- debiste malinterpretarme - dije arrepentida de mis palabras - no quise decir eso, no me refería a...
- qué mierda acabas de decir ??- grito furioso
- no es lo que crees
- acabas de arruinarme el maldito día -grito
- no Christian - dije retrocediendo
- eres una perra - grito enojado

En ese momento salí corriendo y el detrás de mi, me sujeto de la cintura en cuanto me alcanzó, me zarandeó unos momentos pero logré zafarme 

- basta Christian - grite con lágrimas mientras subía los escalones
- ahora si verás - grito

Tome un jarrón y lo lance por las escaleras, eso no lo detuvo, corrí por el pasillo botando todo a mi paso libreros, marcos, mesas, jarrones absolutamente todo dejando un desastre por todos lados, entre a la habitación principal y tire mi tocador intentando detenerlo

- abre la puerta - grito por un orificio

Comencé a lanzar mis perfumes, peines espejos  y absolutamente todo hacia la puerta, en un parpadeo Christian entro a la habitación yo corrí al baño y cerré con seguro justo antes de que me alcanzara

- abre la maldita puerta - grito
- vete por favor - grite
- qué abras - grito
- basta - dije con lágrimas
- aquí afuera estaré esperándote te lo juro - grito - aquí estaré aliana y si no sales juro por Dios que votaré la puerta - grito dándole un último golpe

Subí mis piernas a mi pecho y recosté mi cabeza mientras lágrimas caían sin cesar por mis mejillas, que maldito infierno..












Escucho la puerta sonar delicadamente, abro los ojos con nerviosismo, al parecer me quede dormida, siento un dolor en la espalda por la incómoda posición en la que me quede

- aliana amiga, soy Marian

Me puse de pie lentamente y recosté mi cabeza en la puerta

- estás sola ??- susurre con voz ronca
- si amiga tranquila - dijo

Tome la perilla mientras soltaba un suspiro, quite el seguro y abrí la puerta lentamente, Marian me miró preocupada, entonces se acercó y me abrazo, correspondí a su abrazo , tenía mucho miedo

- tranquila - susurró - estoy contigo tranquila - dijo acariciando mi cabello - ven siéntate

Me guío hacia la cama

- qué pasó aquí ?- preguntó

La observé unos momentos y luego la habitación, estaba echa un desastre, había vidrios por todos lados, muebles tirados y mucha tensión acumulada

- no lo se - dije - solo discutimos y luego paso todo - dije confundida

Me puse de pie y me acerqué al único espejo completo, estaba despeinada, tenía ojeras, la nariz roja y una cortada en la pierna derecha

- Dios, debemos ir al doctor - dijo preocupada
- no te preocupes estoy bien - dije con la voz ronca
- será mejor que vengas conmigo y con James a casa - dijo
- si, si si por favor - pedí
- si amiga tranquila, vístete y nos vamos
- si ahora salgo

Entre al baño y cerré la puerta lentamente, saque el botiquín y lo regué en la alfombra, desinfecte la herida y me puse una venda, entre al cuarto de ropa, saque una maleta y metí lo necesario, me puse un pants completo y cómodo y acomodé un poco mi cabello

- lista ?- preguntó en cuanto salí
- si, lista - dije respirando profundamente
- vamos entonces - dijo tomándome por los hombros

Al salir al pasillo observé todo el desastre que causé, pase lentamente por encima de todo y baje los escalones junto con Marian, al llegar al primer nivel observé que también estaba echo un desastre y en cuanto volteé la mirada mis ojos se abrieron como platos

Christian al verme se paro e intento acercarse a mi, por instinto retrocedí y caí sentada

- quieto ahí - dijo James sujetándolo a tiempo

Lo mire con temor y él a mi con enojo

- tranquilo hermano, relájate, Marian se la llevará a casa y se quedará allá con nosotros
- no se irá -dijo
- si amigo, tranquilo, me quedaré contigo y charlaremos y en cuanto te tranquilices ella volverá si ?

Él no contesto, me puse de pie y Marian me guió a la puerta, lo observé mientras me alejaba, me odiaba a muerte

- te estaré esperando aliana...

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