Capítulo 1

34 1 0
                                    

Y ahí estaba yo, frente a ese adonis rubio de ojos verdes mirándome. Noté como se me acercaba lentamente mientras bajaba su mirada a mis labios entreabiertos y cuando estaba apunto de besarme... Sonó la maldita alarma. Otra vez, solo fue un sueño.
Ese chico me tenía locamente enamorada y lo peor de todo es que solo eramos amigos, solo estupidos amigos!
Después de esa desilusión que me creó aquel sueño hice el intento de levantarme, y digo intento porque me quedé otra vez dormida. Al tiempo una tranquilidad inmensa invadió mi cuerpo, por poco rato porque "alguien" picó a la puerta de mi habitación y con "alguien" me refiero a mi molesta pero fiel amiga Allison.
-¡Lis, tía, es que ya no se puede ni dormir!-Dije enfadada, no me gustaba que me despertasen, ni madrugar.
-Tu misma si quieres llegar tarde y no poder quedarte embobada viendo como Matt se toma su café... - En ese mismo instante me puse toda roja, y es que era verdad no podía resistirme ni tan solo al hecho de pensar en él.

Después de echar a Lis de mi cuarto me acerqué a mi armario y tomé unos pantalones cortos y la camisa más ortera de todo el mundo, la del trabajo. También tomé otra camisa la qual dejaba los ombros a la vista y era tan blanca que parecía que brillaba para después de hacer mi turno de media mañana en la cafetería.

Después de vestirme me lavé la cara y me peiné el pelo mientras Lisa intentaba convencerme con que me maquillara

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Después de vestirme me lavé la cara y me peiné el pelo mientras Lisa intentaba convencerme con que me maquillara. Nunca, en mi joven vida de 18 años, havia tenido la necesidad de maquillarme para salir a fuera o ir a trabajar, es más no me gusta porque pienso que una persona se tiene que sentir bonita tal y como es sin ningún tipo de producto en la cara que tape la belleza que tiene cada persona, por eso cuando veo a mi amiga echarse todos esos productos solo para impresionar a los demás me enfado, ella es demasiado bella como para necesitar maquillaje para que se fijen en ella.
Cuando ya estábamos listas cojimos el coche y nos fuimos al trabajo.
Estaba a punto de tomar el pedido a una señora que esperaba cerca de la caja cuando de repente mi compañero Louis me coje del brazo y me pone en frente de otro cliente, cuando me guiré para decirle que que coño le pasaba lo vi guiñandome el ojo, me volví a girar y a ahí estaba él, el chico de mis sueños, Matt.
-H-hola Matt, q-que haces aquí?-Dige tartamudeando.
-Jajaja, Kiara vengo cada día aquí, parece que estás un poquito despistada, pequeñita- Dijo con esa sonrisa tan perfecta en el rostro, de todas las personas en el mundo solo les dejaba a mi madre, mi padre y a él que me pusieran un apodo refiriendose a mi baja estatura.
-O-oh si, claro. Y q-que vas a tomar?-Le dije lo más normal que pude. Enserio esto de finir no era lo mio.
-Lo de siempre, un capuchino. - Dijo guiñando el ojo antes de retirarse, casi me desmayo.
Le dí el orden a Lisa la cual al terminar de hacer la bebida me miro diciéndome si me veía capaz de llevárselo sin caerme por el camino a lo qual yo negé.
Havia pasado un cuarto de hora, Matt se havia ido, y la cafeteria estaba un poco más tranquila, los clientes estaban servidos y nosotros podíamos descansar un rato pero todo eso desapareció cuando vino esa arpía robachicos que se hacía llamar Brittany.
-¡No os lo vais a creer, me acabo de ligar a un chico superbueno! Le e dado mi número de teléfono y todo.-Dijo en ese tono tan odiosamente chillón que tenía.
-Muy bieeen...-Digo Lisa pasando de ella como siempre.
-Y tu Kiara que opinas? -Dirigiendose a mi en un tono de burla.
-Que eres una calientapollas, una puta y que ese pelo tan mal teñido de pelirrojo que tienes no te queda para nada bien con las tetas operadas y hacen que te veas más zorra de lo que eres ya. - Dige con indiferencia mientras veía como Louis sugetava a la víbora y Lis me miraba con cara de controla esa impotència que tienes. Al instante empezé a reírme de la situación.

Acabó el turno, me puse la blusa que me traje des de casa y me fuí a la universidad de diseño llena de alegría.
En el camino mi amiga me miró y me dijo:
-Y a que vino eso?
-El que? - Dije apartando la vista del mòbil.
-Lo que ha pasado en la cafeteria con Brittany.
-Aaah, eso... Me pregunto sobre mi opinión y yo le respondí, nada más.
-Sabes, me cuesta creer que en un cuerpo tan pequeño quepa tanta mala ostia.
-Oyeee! No te metas con mi metro sesenta y tres!... Jajaja solo dije la verdad si no quería escucharla que no me fuese preguntado. Además la víbora siempre está ligando con mi futuro novio, digo Matt, la verdad es que me alegro que se lige a otro. - Respondí graciosa haciendo un puchero en la última parte.
- Jajaja, no tienes remedio amiga

Yo le sonreí a la vez que ponía los ojos en blanco y giraba la vista hacia el otro lado.
Sentía que este día merecía la pena.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 09, 2018 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Los Falcone (Kiara) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora