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Sus pequeños deditos viajaron por las facciones de Harry, acariciando sus labios y mejillas, besando su mandíbula y párpados, dejando suaves besos en su pecho.

Dios, era tan guapo. Louis se preguntaba constantemente que había hecho para tener a Harry, era grosero y altanero, orgulloso y mimado.

Sonrió al acariciar su mordida; tenían tres años de relación y un año con el lazo. Se metió entre las cobijas y Harry quedando sobre él.

"Despierta."

Los labios de Harry estaban entre abiertos y su pecho subía y bajaba, Louis lo miraba embelesado.

"Despierta alfa."

"..."

"Bien, duerme un poco más amor mío, haré el desayuno." Louis le besó los labios y se levantó de la cama pisando de puntitas para salir de la habitación. Estando en la cocina decidió que era tiempo de cocinar para su alfa. ¿Pero que iba a hacer si Louis no sabía cocinar?

Harry siempre cocinaba y él lavaba, era algo justo. Bueno, no tan justo si Harry lavaba la mitad de los platos porque Louis era un poco, bastante, flojo para todo.

✧ ☼ ✧

Harry despertó sólo y desorientado sin el calor de su omega. Se estiró y se talló la cara con sus manos mientras se levantaba. Bajó las escaleras de forma rápida y sonrió cuando lo vió sentado en el piso de la cocina.

"Ahora sí son buenos días."

Louis sonrió y esperó a que Harry estuviera frente a él para alzar los brazos, el alfa lo levantó como si de una pluma se tratase y le besó los labios.

"Buenos días Hazz." Rodeó su cuello con sus bracitos y sonrió cuando Harry lo sentó en la barra.

"No me gusta despertar y no verte en la cama omega, lo sabes." Harry gruñó bajito colocándose en medio de las piernas del menor mientras olía y besaba la mordida. Louis le acariciaba los rizos de la nuca mientras inclinaba su cuello dándole más acceso

"Quería hacerte el desayuno, pero no se me ocurrió nada." Murmuró para luego tomar la cara de Harry con sus pequeñas manos y acariciarla las mejillas. Harry se inclinó a su tacto. "Perdón por no ser un buen omega."

"Oh cariño." Harry le besó la palma de las manos y luego lo rodeó con sus fuertes brazos, el omega empezó a llorar aferrándose a la espalda desnuda de su alfa, ahogándose con su aroma.

Harry lo cargó hasta el sofá y lo acunó en sus brazos, Louis sollozaba mientras se acurrucaba en el regazo del alfa. Logró calmarlo con suaves caricias en su espalda bajo su suéter de lana y cálidos besos en todo su rostro. El omega besaba el cuello del alfa mientras sentía cómo lo marcaba con su aroma.

"Te amo Louis, ¿lo sabes?"

El omega gruñó.

"No me digas Louis."

"Así te llamas."

Gruñó de nuevo levantando la cabeza y viéndolo con sus preciosos ojos azules, Harry sonrió dichoso, ese ser humano tan hermoso era suyo, era su omega.

"Dulce criatura, soy tu dulce criatura."

"Lo eres." Le besó la punta de su naricita.

"También te amo alfa, con todo el corazón."

m i m a d oDonde viven las historias. Descúbrelo ahora