Capítulo XII

4 0 0
                                    

          

             Los nervios aumentaron mucho más cuando sunny vio al Sr. Lee en aquella lujosa camioneta.
- ¿Qué esperas niña? ¡Sube! - dijo el Sr. Lee.
Sunny subió a la camioneta y se sentó.
- Hola, soy sunny
- Sé quien eres, pero descuida que esta no es una visita de cortesía. Más bien es de interés.
- ¿Interés? ¿A qué se refiere?.
- Digamos que es interés mío por saber que relación hay entre Jun Myeon y tú, ¿Qué pasa entre ustedes?.
- Bueno...
En realidad no pasa nada, él dijo que primero tiene que terminar el contrato.
- Y tú, ¿Lo amas?.
- Por supuesto señor, no lo dude ni un instante.
- Eso es bueno entonces, porque sabes que dicen que "el  amor no busca sus propios intereses, si no los de la persona que ama" ¿No es así?.
Sunny ahora asintió, pero esta vez el rostro le cambió ¡había comenzado a captar lo que el Sr. Lee quería decirle!.
- Quise reunirme contigo personalmente, por que quiero saber tu opinión acerca de una cosa. ¿Estarías dispuesta a hechar por la borda el sueño y vida de la persona que amas?
- No, claro que no. Sería incapaz de hacer algo así.
- Pues eso es lo que suho esta a punto de hacer con su vida. A pesar de lo que lo costó estar donde está ahora, quiere "tirarlo" todo.
- ¡No puede! ¿Por qué haría eso?.
- Por ti.
Por ti rompió reglas importantes, faltó a ensayos y está a punto de finalizar su contrato con Exo. Y todo eso lo hace por tí.
- ¿Qué? ¿Va a finalizar su contrato? ¿Quiere destruir su vida?...
Y dice que todo es ¡Por mi culpa!.
- Hablé con él, pero parece que está cegado. Creo que no es justo que se acabe para él, cuando es muy talentoso y todavía es joven, ¡Todo por un capricho!.
- ¿Disculpe? ¿Ha dicho usted que lo que sentimos es solo un "Capricho"?.
- Sí, eso es lo que los jóvenes de hoy día sienten.
- Se equivoca, yo amo a Jun Myeon y usted no sabe cuanto. Jamás renunciaría a él, por que sin él yo no podría vivir.
- Pero y él ¿Te ama?
- ¿Perdón? ¡Por supuesto que me ama!.
- Creí que serías un poco inteligente niña, ¡Eres una tonta!...
Pero aún así ¿sabes? Espero que medites mejor La situación, y tomes una decisión correcta. De lo contrario puede que hagas infeliz a alguien por el resto de su vida.
Ahora ¡bájate! Y ve a tu trabajo, sinceramente espero no saber más de ti.
      Sunny bajó de inmediato, casi como si la hubiesen empujado. La camioneta arrancó y se perdió en la distancia.
        Ahora ella volvió al trabajo, su semblante era totalmente distinto al que tenía cuando abandonó el café. Su tristeza era notable, y por más que quiso no pudo retenerlo más.
- Chae Young! Cúbreme un segundo, necesito ir al baño.
- Claro...
¡Espera!, ¿Necesitas algo? No te ves muy bien.
- Estas en lo correcto, no estoy bien. Pero no puedes hacer algo, es más ni sé si yo pueda hacer algo.
        Sunny dio media vuelta y caminó hacia el baño, cerró la puerta con llave. Entonces ¡se desvaneció! Y las lágrimas comenzaron a desprenderse de sus ojos, era una sensación tan agobiante pues ella no sabía que debía hacer.
         Después de llorar por unos minutos se levantó, abrió la puerta y fue hacia el lavado para manos. Ahí frente al espejo, se miró a los ojos:
- Sunny ¿Tú renunciarías a tus sueños por amor? - dijo - ¡Sí! Por supuesto, o...
¿NO?, hay no sé. Si no lo sabes ¿Por qué quieres que la respuesta de él sea "sí"?.
No puedo, lo amo tanto que no puedo permitir que destroce su vida. Él merece ser feliz...
         Se limpió sus ojos, y respiró profundamente. Después salió del baño y se dirijio a la barra.
- Bueno sunny, ¿Estas segura que hoy viniste a trabajar? - dijo Chae Young.
- Lo siento, ya no habrá más distracción. Gracias por cubrirme.
- ¡Mentirosa!.
- ¿Qué? No, es enserio.
- No, alguien te busca. Te está esperando desde hace rato.
- ¿Quién?.
- Es un Ídol...
Por cierto ¿Eres cercana a exo?. Ya ha venido Kai, Chenyeol, Baekhyun, Chen y ahora Suho...   - ¿Qué? ¿Suho está aquí? - interrumpió sunny.
- Sí, y ¿sabes que? ¡Ve, atiendelo! Yo te cubro el resto del turno.
- No sabes cuanto te agradezco hoy, te prometo que te cubriré el día que tú quieras.
- Está bien, pero ya vete.
               Sunny lo vio, ahí estaba sentado frente a la barra de aquel café. Lo primero que pensó fue en correr hacia él y abrazarlo, pero sus piernas no respondieron a sus pensamientos, más bien se quedaron estáticas por un momento.
           Suho ahora volteó, ¡La vio! Ahí seguía parada como una estatua. Le sonrió, pero ella parecía estar en otro mundo, así que él se levantó y fue a su encuentro ;
- Sunny ¿Qué ocurre contigo?.
- ¿Conmigo? Nada, ¿Por qué?.
- Te sonreí y tú ni en cuenta, estabas ida.
- Lo siento, no me di cuenta...
Pero ¿Qué haces aquí?.
- Tuve algo de tiempo libre y quise venir a verte, ¿Me concedes una mini cita?
- Por supuesto ¡Me encantaría!.
         La cita fue perfecta, fueron al parque de diversiones "El país de las maravillas", parque temático muy conocido en surcorea, se la pasaron muy bien. No sintieron lo rápido que pasó el tiempo, hasta que se percataron de la hora.
- Suho, es tarde. Tenemos que volver ya.
- Espera unos minutos más, no quiero separarme de ti.
- Yo tampoco quisiera tener que separarme de ti, pero las cosas tienen que ser así.
- Pero ¿Por qué lo dices tan seria?, en realidad no nos separaremos para siempre.
- Lo sé, es solo que...
No nada, olvídalo. Tienes razón.
        La cita terminó, suho acompañó a sunny a casa. Después de Dejarla volvió a casa, entró a su habitación y quedó profundamente dormido. A la mañana siguiente, cuando suho despertó vio un sobre al lado de la cama, él lo abrió y entonces leyó lo siguiente :
        " JUN MYEON, AHORA TENGO DESPEDIRME. SÉ QUE ACABO DE ENCONTRARME CONTIGO, PERO NO PUEDO PERMANECER A TU LADO POR SIEMPRE.
           AHORA NO QUIERO DESTRUIR TUS SUEÑOS NI TU VIDA, POR ESO TENGO QUE IRME. ESTO NO ES UN ADIÓS, SI NO UN HASTA PRONTO.
         TE ESPERARÉ EL TIEMPO QUE SEA NECESARIO, YA ESPERÉ 8 AÑOS ASÍ QUE NO CREO QUE SEA UN PROBLEMA.
HAZLO BIEN!!
FIGHTHING!!

                                CON AMOR DE SUNNY ".

- ¡Esto no es cierto! [°°°]

                   MAS QUE UN SUEÑO Donde viven las historias. Descúbrelo ahora