Capitulo único
Pareja predestinada
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.La mayoría de Alfas y Omegas desean, así sea en lo más recóndito de su ser, conocer a su persona predestinada, algo que ha llegado a ser casi que una leyenda urbana a esas alturas, con tantas personas y de diferentes edades en el mundo que la mayoría termina por rendirse, conservando únicamente un ápice de esperanza que no se atreven a confesar en la mayoría de los casos.
Pero Dabi no era diferente a cualquier Alfa, en cuanto sus resultados informando su clase llegaron el anhelo de conocer a su pareja predestinada se cernió sobre su persona, embargándolo en todo su ser; aunque, claro está, es el hijo de Endeavor, no es como si pudiera darse el lujo de ir por ahí exponiéndose y preguntando a todo el mundo que fue de su pareja predestinada.
Es por lo que él se limitó a rezar, a pedirle a la criatura que estuviese ahí arriba su pareja predestinada estuviera planeada en su destino, orando porque llegara a encontrarla en su camino, no importaba como o donde.
Admite a sus 11 años ya había empezado a perder la esperanza, en ese momento ya solo oraba una vez a la semana y esperaba, pacientemente y entre suspiros, a que su padre lo comprometiera —porque si bien su persona no era el arma definitiva de su padre, él también tenía los genes de su madre y padre en su sistema—. Ahora que lo recuerda, quizá esa habría sido la mejor forma de vivir su vida, entre suspiros y esperando a una pareja que jamás llegaría.
Excepto que, si llego, solo que de la peor forma posible.
Recuerda como ese día fue corriendo al hospital, emocionado por un nuevo compañero de juegos —sus hermanos eran divertidos, claro que sí, pero nunca sobraba alguien más a la pandilla—. Aún tiene las fotografías que le mostro su abuela cuando le recordaba como había estado a punto de llorar de la emoción cuando le dijeron su madre estaba dando a luz.
Esta en sus recuerdos también como entro a la sala a punto de estallar de la emoción, y duda que algún día olvide como se quedo helado en cuanto vio al niño entre los brazos de su madre.
Shōto empezó a reír en cuanto él entro en la habitación, Dabi empezó a llorar cuando Shōto lo miro.
¿Eso era posible? ¿El destino acaso podía ser tan cruel? No lo creía, ¿Cómo era posible su hermanito fuera su predestinado? Eso tenia que ser una mala broma del destino, una sin ápice de gracia que para ese momento ya había empezado a carcomerlo de adentro hacia afuera.
Logro lo que casi ningún Alfa y Omega; se asqueo de la situación, le aterro conocer a su predestinado, y aun peor fue cuando debió de cargarlo entre sus brazos, a sabiendas se suponía el quería a esa bolita de pelos bicolores.
No podía ser, él amaba a Shōto, como hermano y como Alfa, pero claro estaba su cariño por su hermanito era mucho mas grande que el deseo de tener un romance inigualable; así que, con cierto nudo en la garganta, se juro a si mismo esa misma tarde frente a su espejo no iba a hacer nada.
Shōto era su hermano, no estaba bien lo viera con otros ojos; incluso si debía de no actuar como un desconocido junto a él a cambio de no hacer crecer esos culposos sentimientos, entonces lo haría, se alejaría lo más posible.
Pero en definitiva el heterocromático no cooperaba.
Dabi no podía echarle toda la culpa, el niño que apenas gateaba solo sabía se sentía feliz junto a su hermano, lo único que entendía es que quería ser sostenido entre los brazos del ojiazul, y no es como si Dabi tuviera el corazón para siempre salir de la habitación e ignorar los fuertes llantos de Shōto.
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Pareja predestinada [DabiTodo]
FanfictionTodo Alfa u Omega quiere conocer a su pareja predestinada, aún cuando las posibilidades son casi inexistentes; y Dabi, como cualquier Alfa, no es la excepción. Con un único detalle, y es que ahora que ha encontrado a su tan aclamado predestinado no...