04.
{Justin}
Salí de mi oficina dirigiéndome hacia el ascensor, algunas personas me saludaron amablemente y yo les devolví el saludo cortésmente. Entré al ascensor y apreté el botón que bajaba al primer piso de aquel enorme edificio, aflojé el nudo de mi corbata y miré mi reflejo en el espejo del ascensor, todo estaba en orden.
Suspiré profundamente cerrando mis ojos por un momento, levantarme temprano se había convertido en una rutina diaria y ya estaba acostumbrado, aunque no era necesario llegar sumamente temprano ya que soy el jefe.
Mi trabajo me gusta, es lo que he planeado desde hace mucho y poco a poco lo he logrado, establecer negocios era mi mayor fuente. Planeo tener muchos negocios y también establecerme en los negocios de bienes raíces, mi padre me había echado una mano y agradezco el tiempo que estuve ayudándolo en vacaciones. Eso había sido de gran ayuda.
Saqué las llaves de mi Ferrari y me adentré a éste, encendí la radio y puse en marcha el motor, manejé por algunas calles hasta que llegué a mi destino. Aparqué el auto en un lugar seguro, quité mi saco y bajé del auto, caminé sin prisa hacia la tienda que tenía enfrente y al entrar busqué con la mirada a los idiotas que suelo llamar amigos. Aunque estén un poco mal de la cabeza.
Reí para mis adentros al ver a Chris discutiendo con Ryan porque el traje no le quedaba bien y Chaz discutía con la modista porque el traje le quedaba pequeño o eso entendí yo.
Empecé a reírme a carcajadas y ellos notaron mi presencia ya que pararon de discutir y se voltearon a verme con el ceño fruncido.
—¿De qué te ríes idiota? —gruñó Ryan soltando el saco que tenía en la mano.
Me acerqué hasta ellos quedando a una distancia cercana.
—De sus caras de payasos —reí burlón. Fruncieron el ceño cruzándose de brazos y me miraron de mala manera.
—Pensé que no llegarías —comentó más calmado, Chaz.
—Tenía una reunión y tardó más de lo planeado —me encogí en hombros restándole importancia. —Pero estoy aquí y creo que llegué en un buen momento. ¿Por qué están discutiendo? —alcé una ceja.
Algunas veces éstos hombres se comportaban como unos malditos niños de primaria.
—Mi traje me queda pequeño y es el que quiero. No sé qué pasó, hace dos meses me quedaba perfectamente y ahora no —bufó exasperado.
—Estás gordo man. ¿No te haz mirado en un espejo? —se burló riendo fuertemente y contuve las ganas de reír con él.
—Cállate Christian —lo fulminó con la mirada. —Será elegir otra talla más grande. No me queda de otra.
—Al fin —suspiró la modista. —Ahora mismo le traeré uno de su talla, no me tardaré —sonrió amablemente alejándose completamente de nosotros.
—Chaz parece la maldita novia —soltó una risita con un brillo de diversión en sus ojos. —Está conmocionado de elegir el traje perfecto.
Chaz rodó los ojos y se apoyó en la puerta del vestidor, me senté al lado de Ryan y dejé caer mi espalda en el respaldo del pequeño sillón.
—Ya deja de molestarlo Ryan. Simplemente quiere estar impecable para su futura esposa, ¿tiene algo de malo? —arqueé una ceja ocultando una sonrisa burlona.
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Lo que un día fue » Justin Bieber ➳Editando.
Fanfiction❝Las promesas están para cumplirse, a pesar de lo que un día fue❞ Créditos tráiler: @/bieberfanficsof y @/prinxipa. Créditos portada: @isjxstin Escritora: @/Janchesca.