—No quiero hacerlo, pero haz sido un niño malo últimamente.
—¿De qué manera? Tan solo dejo que hagas conmigo lo que se te plazca.
—¡Exacto! Pero yo quiero ver tu rostro lleno de dolor, tus gritos desgarradores pidiendo ayuda y tus gemidos que tanto me excitan —va hacia el menor, quien esta de rodillas, y toma su mentón para que lo mirase directamente a los ojos. —Quiero que supliques por más y digas mi nombre, aunque no quieras hacerlo, pero veo que no lo haces. Eres un mal niño, y los niños malos merecen ser castigados.
—¿No ha sido suficiente con los al menos 4 meses que llevo aquí encerrado?
—¿Encerrado? ¡¿Qué dices?! Te mantengo aquí para que nadie más te haga daño.
—A costa de mi voluntad.
—Pero tampoco te niegas a lo que te hago —suelta su mentón y se arrodilla frente a él, mirándolo de arriba a abajo. —Ni tampoco de todas esas cicatrices.
—Prefiero quedarme aquí a arriesgarme a salir y que me mates. Además no sé en donde mierdas estoy.
—Sh sh sh, ya te he dicho que no me gusta que uses esas palabras, Jungkookie, pero haces bien en pensar —vuelve su mirada al miembro de este y lo toma sin más para después comenzar a masturbarlo. —Admitelo, no puedes resistirte a esto. Es la naturaleza humana.
—N-no lo ha... gas... Mgh...
—Sigue así. Gime más alto —mueve su mano más rápido.
—Tae... Ah... D-deja de hacer es...o- ¡Ah!
—Di que te gusta, vamos, no puedes decir que no a esto —comienza a gemir más fuerte.
—M-me gusta- ¡Ah!~ —muerde su labio inferior para evitar soltar gemidos.
—No te contengas, gime para mi. Gime lo más alto que quieras, al fin y al cabo solamente yo seré el único en escucharlos —se acerca y lo besa, mordiendo de paso el labio de este, un tanto fuerte, haciendo que sangrara, y para los movimientos de su mano.
—¡Agh! —se queja de dolor mientras jadea.
—¿Qué? No me digas que te dolió.
—Es obvio, ¿no?
—Ese dolor no es nada comparado con el que te hago sufrir diariamente.
—No puedo acostumbrarme, Tae.
—Deberías —se levanta y toma el cinturón. —¿Dónde lo prefieres?
—D-donde quieras...
—Buen niño.
Comienza a azotarlo, golpeándolo en la espalda fuertemente, y haciendo que gritara de dolor y sangrara rápido gracias a los anteriores golpes. Ahora estaba siendo gentil al usar un cinturón.
—¡Agh! Ta... e... ¡Mgh! —reprime el grito, saboreando la sangre de su labio mordido por el contrario.
Taehyung estaba loco.
Era mi mejor amigo, pero de un momento a otro pareció estar más atento de lo normal a lo que hacía; me seguía a casa, a veces me espiaba por la ventana, tomaba fotos, he incluso me toqueteaba. Al principio pensé es: normal, ¿no?, hasta que aquellos toqueteos fueron convirtiéndose más a menudo en caricias, me besaba, inclusive dejaba algún que otro chupetón. Sí, estaba mal de la cabeza por dejar que lo hiciera, ¿pero que podría hacer si no me disgustaba? En poco tiempo se volvió posesivo, bastante diría yo. Y bueno, era mi mejor amigo, pero igual me gustaba. Quería que fuese mi novio, pero no que me quisiera corromper. Teníamos sexo, no lo niego, pero sus embestidas eran cada vez más fuertes, sus mordidas dejaban horribles marcas, he incluso me golpeaba. Podía llegar a ser masoquista de vez en cuando en realidad.
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Mi Pequeño Jungkookie || [os Vkook/Taekook]
FanfictionEn un cuarto oscuro, con tan solo un foco en el centro y una silla en una esquina. Él me mira desde esa silla. Yo lo miro desde debajo del foco. Él tiene un cinturón de cuero en una mano. Yo tengo las mías atadas por detrás. Él sonríe malévolamente...