De vi de hacerle caso a mi madre , pero Es que yo nunca la e obedecido , desde pequeña le e llevado la contraria si ella me decía que no me metiera a un charco de lodo yo iba y me metía a todos los charcos que mirara , así era yo, terca, caprichosa, conflictiva, decidida, orgullosa a morir y como dice mi madre con un carácter de la tostada y que no entendía como era que tuviera tantos chicos detrás de Mi, Sexo mamá, sólo quieren sexo todos son iguales - eso era lo que siempre le respondía; A y una última cosita nunca me quedaba callada, no importaba que estuviera hablando con el mismísimo presidente o con el delincuente más peligroso.
Siempre suelo meterme en problemas y este día no era la excepción, pero sin duda estaba arrepentida de haberme subido al auto de ese extraño sólo porque me pareció amigable, quien diría que una persona a la cual no conozco me traicionaria así, bueno esta bien era lo más lógico que podría pasar, pero vamos pensé que sería divertido - pensaba tomar su auto prestado sin que el se diera cuenta para dar una vuelta por toda la ciudad, claro que después iba a devolverlo-.AL parecer el tipo aquel tenía otro plan, me llevo a un lugar bastante alejado de la civilización pero no podría importarme más poco, asta que me Di cuenta de sus asquerosas intenciones. Cuando paro el auto se pasó asta mi asiento subiéndose arriba de mi, lo único que hize yo fue sacar con mucho cuidado el gas pimienta que traía en mi bolso y se lo eche en los ojos, este de inmediato se quito de encima así que aproveche y le Di un fuerte golpe en la nuca con mi pie, dejando a este inconciente. Sonreí, sabía que esas clases de defensa personal me serviría de mucho.
Me baje del auto y camine asta llegar a mi casa para dormir como el angelito puro que soy, bueno no, al que baje del auto fue a el y luego me dispuse a seguir el rumbo de esta autopista, auque no sabía a donde conducía, pero aun así seguí manejando asta llegar a un lugar que al miralo no daba muy buena espina, sonreí al instante me encantaban estos lugares, no pregunten porque pero me encantaban los problemas y en lugares así nunca faltaban. Me baje del auto y me dirigí a un bar , al entrar lo primero que hice fue irme directo ala barra y pedir la bebida más fuerte que tuvieran- Esta noche será fantástica - pensé , pero como siempre la vida tenía otros planes para mi. A los 20 minutos de tomarme el trago mi vista se empezó a distorsionar y lo último que escuche fue
-Nos darán mucho por ella.
