Era un día normal en la DEO, todos en sus labores yendo y viniendo por toda la oficina, yo atrapando algunos criminales... Las cosas comunes. Pero de repente, Winn descubrió una señal de una nave extraterrestre estrellada en la Tierra. J'onn, Alex y yo fuimos al lugar donde estaba esa nave, pero yo en ese entonces no sabía que dentro de esa nave estabas tú, la persona que yo amaría por siempre.
Abrí la cápsula y allí estabas... el hombre mas hermoso que jamás había visto. Estabas profundamente dormido, y yo te estaba mirando fijamente.
-¡Kara!- escucho que me dicen de atrás- ¿estas bien?- pregunta mi hermana Alex que siempre se esta preocupando por mi.
-Si si, lo estoy. Solo estaba observando al extraterrestre- digo con un tono titubeante.
-¡Bien! Entonces ahora lo podemos llevar a la DEO para analizarlo- dice J'onn.
En el trayecto no pude dejar de mirarte, eras tan... perfecto.
Llegamos a la DEO y Alex se puso a examinarte y yo estaba con ella, no porque me necesitara, sino porque no me quería separar de ti.
Me quede toda la noche contigo y trate de quedarme despierta, pero después no pude resistir más y recosté en tu camilla y me dormí. Al día siguiente despertaste, pero yo estaba profundamente dormida así que tu te quedaste como estabas. Cuando me desperté casi me muero de la vergüenza, yo estaba sobre ti, un desconocido y dormida. Me parece que tu te diste cuenta de que yo estaba avergonzada porque me dijiste las palabras correctas para que no me sintiera mal:
-Hola- me dijiste con tu dulce voz.
-Hola- dije yo con una voz nerviosa. Y nos quedamos mirando unos segundos, unos hermosos y largos segundos. Yo seguía acostada sobre él.
-Bueno, creo que ya que dormimos justos merecemos saber nuestros nombres- dijiste de manera graciosa pero no burlona- soy Mon-el, de Daxam.
-¡Oh! Lo siento- dije con un tono vegonzozo y me senté en la silla que estaba al lado de la cama- soy Kara, de Krypton.
-Un gusto Kara de Krypton- dijiste con una bella sonrisa en tu rostro.
-Un gusto Mon-el de Daxam- dije yo tratando de hacer una sonrisa bonita.
-Entonces... ¿sabes donde estamos exactamente?-
-Oh si. Estamos en un planeta llamado Tierra-
-¿Donde están todos?-
-Hoy es un día de descanso para todos los empleados-
-¿Entonces... tu que haces aquí?-
-Me quede a cuidarte y ver si despertabas- dije mientras bostezaba un poco.
-¿Entonces hoy es tu día libre?- asentí con la cabeza-¿aquí también hay restaurantes?
-Si... ¿porque preguntas?-
-¿Quisieras ir a comer algo conmigo? Digo, para conocernos mejor- esa última oración la dijiste muy nervioso.
-Está bien- dije yo con un tono más nervioso que el tuyo -aquí cerca a un par de calles hay un restaurante, si quieres ir a ese-
-Está bien, vamos- dijiste. Y en ese momento me comencé a enamorar de ti. Pero eso lo contaré después.
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Cuando Nos Conocimos
RomanceLa primera impresión es lo que más cuenta... ¿y si así te enamoras? 💜