Beso mortal

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Disclaimer: Todos los personajes le pertenecen a Kohei Horikoshi. La que escribe esto es una señorita que piensa en monos chinos gays y hombres embarazados, así que ya se sabe qué haría yo si estos personajes fuesen de mi propiedad.

Pareja: Katsuki x Izuku.

Dedicado a: Para mi husbanda que me abandonará por motivo de viaje, añuuuu ;3;

Advertencias: Esto es muy corto porque originalmente era drabble, sólo que me pasé en palabras (?). Relaciones homosexuales y muerte de un personaje.

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Beso mortal

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Capítulo único

─ Estúpido Deku... ─Katsuki lanzó al aire aquello en un murmullo inaudible luego de tragarse el grueso nudo de su garganta. Pero no dijo más, debía quedarse en silencio.

Seguido a esto cargó el arma que llevaba en sus manos, con una cautela y rapidez sin precedentes. Esto... no era parte de él. Podía ser agresivo, desde chico lo era, mas nunca se vio a sí mismo como un asesino, la carrera que escogió no era para matar, no obstante a este punto... mataría de ser necesario, pues ya el mundo no era el mismo que le vio crecer, se había distorsionado en tan sólo un mes.

En ese mes que parecía ser el último puto mes de la maldita humanidad.

Por mucho tiempo fue llamado un héroe, al igual que Izuku, su actual esposo. Tanto él como Izuku salvaron miles de vidas, luego fueron millones de vidas para cuando tras mucho esfuerzo encontraron una vacuna para un arma biológica que se había desatado hacía un par de años. No estaba en sus planes aquello, su yo de la secundaria jamás de los jamases habría trabajado con Deku, mucho menos pensó en enamorarse del nerd ese, pero son cosas que pasaron porque sí.

Y deshacer un arma biológica también desencadenaba cosas. Como el hecho de trabajar por otra más fuerte. Los seres humanos se caracterizaban por el egoísmo, el orgullo y también por la estupidez. Pues ese virus codificado por personas sólo se salió de control, arrasando con ciudades enteras, y ya faltaba alrededor de la cuarta parte de la humanidad, que había muerto de eso que aún no se podía controlar.

Estaba de más decir que el caos se había desatado. Todos peleaba, todos saqueaban, todos mataban... sólo para ganarse unos días de más, el resultado del egoísmo y la desesperación que superaba en creces a todos, incluyéndose.

Por eso es que luego de breves minutos acabó apuntando a uno de los intrusos que había irrumpido a su hogar para llevarse sus provisiones, cosa que no permitiría. Ya que él, su estúpido marido Deku al que tanto amaba los necesitaba.

─ No lo voy a repetir ─esta vez sí habló más fuerte alertando a quienquiera que estuviese allí─. ¡O sueltan eso o les volaré los putos sesos, malditas mierdas!

Enseñó su puntería tirando del gatillo, la bala dio directo a la maceta que estaba colgando del techo.

─ La próxima irá a tu cabeza, desgraciado. ¡Así que fuera de una puta vez!

Al quedar solo soltó el arma, luego se apresuró a bloquear toda posible entrada. En el exterior seguía el mismo caos, desde hacía dos día no podían ver el sol a causa de todo el humo por los incendios causadas por las personas.

Y el caos quebraba a cualquiera. Él se sentía quebrado, desde que notó como Deku se negaba a besarle y se enteró porque se sentía así, sólo que sin ver la oportunidad de recoger los pedazos de sí mismo.

Beso mortalWhere stories live. Discover now