Blood Bank [JuJae]

I

Siempre soy tan distraído, seguro que cuando llegue ya irán a la mitad de la práctica, necesito mejorar mucho más si es que quiero pasar audiciones futuras, corrí la última cuadra para entrar al edificio de la escuela, subí a toda velocidad las escaleras hasta que llegue a la sala, la clase como supuse ya había empezado y con ¿un nuevo profesor? aparte que puede tener la mismas edad que yo si no es que menos, sus pasos eran tan bien marcados, tenía un balance increíble, ojalá yo a esa edad pudiera ser tan bueno como él.

-¿Vas a pasar o piensas quedarte ahí parado?

¡Perdón! me metí rápido a la sala y comencé a seguir sus instrucciones, había perdido el ritmo de los pasos desde el principio ya que me salte toda la introducción por llegar tarde.

-Bueno hasta aquí llega la práctica, los veo a la siguiente

Me dirijo a la salida cuando...

-Tú, espera

¿Yo?

-Ya no veo a nadie más aquí o ¿si?

Tienes razón...

-Te perdiste mi presentación, me llamo Juyeon y creo que me serás de mucha utilidad a partir de ahora.

Gusto en conocerte, soy Hyunjae, si no es mucha indiscreción ¿cuántos años tienes?

-Mucho más de los que imaginas humano

¿Humano?, *acaso está loco*

-¿Sabes? Hoy realmente me encuentro sediento *lo ve con ojos seductores*

Ah, si quiere voy a comprar una botella de agua

-AHAHA no me refiero a eso tonto, ¿por qué los humanos tienden a ser tan estúpidos?

Creo que no te encuentras bien, mejor me voy

-¿No escuchaste que tengo sed?

Lo jalo del brazo hasta que su pecho chocara con el de él, con su mano izquierda giró su cuello para después tapar su boca, puso sus labios lentamente sobre una vena del cuello para después incrustar unos colmillos que salieron de donde estaban escondidos, bebió algo de sangre y después se separó.

¿Qu...qué es...ta...pasan...do? después de decir eso el joven se desmayó.
...

¿En dónde estoy?

-En mi apartamento, después de armar ese numerito de la desmayada te traje aquí.

-¿Cómo es posible que nadie se diera cuenta?

¿No acabas de ver lo que soy? Soy un vampiro y puedo hacer mucho más cosas que tomar de tu sangre, que por cierto ahora me pertenece, tendrás que saciarme cada vez que lo necesite, mientras dormías firmamos el contrato.

¿De qué hablas? ¿Cuál contrato?

-Nos besamos para sellarlo, dijo susurrando a su odio.